tag:blogger.com,1999:blog-25278944331563728632024-03-07T21:42:25.319-08:00Las cosas buenas me hacen dudarAnonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.comBlogger22125tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-75563432646993029182018-01-16T13:47:00.002-08:002018-01-17T13:34:07.851-08:00Guantanamo<div style="text-align: justify;">
Entreabrí los ojos como pude, y mi vista estaba completamente nublada. Tenía la misma sensación que tienen los amnesicos en las películas. Volví a cerrar ojos, y los volví a abrir lentamente, para ver si así conseguía que mis ojos se acostumbrasen a la luz. Me seguía molestando la luz, joder, nuevamente volví a abrirlos y observé, al fondo, ese color naranja que tanto odiaba.</div>
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- ¡Ostia puta! Me han traído de vuelta a Guantánamo.</div>
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- Tenemos una graciosa - dijo la enfermera mientras cambiaba el goteo.</div>
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- Es que, joder, ¿quién fue el iluminado diseñador de estos pijamas?. ¿Naranja?, ¿en serio? - por cierto, señores diseñadores de los pijamas de los oncológicos, no digo que tengáis que hacer un diseño Loewe, ni utilizar tela con estampados de unicornios; pero joder, es que parece pitorreo, ¿encerrados con un pijama naranja?. Podría hacer una película: "La Chica del pijama naranja"</div>
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- ¿Nos hemos levantado con el pie izquierdo hoy?</div>
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-No, hoy sólo no. Nací con el pie izquierdo arraigado al suelo. - no pude evitar reírme de mi propia broma.</div>
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<br /></div>
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Miró el plástico vacío a los pies de la cama.</div>
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- ¿Y tu informe de anoche?</div>
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- Me has pillado, me lo he comido ya que mis carceleros me castigaron sin cena ayer.</div>
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- Sarah, de verdad - suspiró y dejó entrever una leve sonrisa - se lo ha llevado mi compañera, ¿verdad?</div>
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- Siiiiii. Y hablando de cosas serias, ¿me permitirá usted poder acercarme a la celda de la planta sexta dónde podré ver a mi padre?</div>
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- Por supuesto, pero ya sabes las normas.</div>
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<br /></div>
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En ese momento la puerta de la habitación se abrió.</div>
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- Hola, ma - y saludé alzando el brazo lleno de tubos y un largo etcétera de mierdas que carcomían mi cuerpo, aunque según los médicos era para mi bien.</div>
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- Hola cariño, ¿cómo estás? - y me miró con lástima, sabía que se culpaba de todo.</div>
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- Pues nuestra encarcelada dice que quiere bajar a la planta seis, y justo cuando usted entraba iba a recordarle las normas. - mi enfermera, ese ángel que me cuidó tantas veces, desde aquí quiero darte las gracias por lo insufrible que llegué a ser, y aún así cuidaste de mi con la mayor dulzura.</div>
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- Creo que las recuerdo perfectamente: mascarilla de Michael Jackson, no me puedo permitir una fuga de Guantanamo, no fumar, no comerme a nadie y ... - mi enfermera no pudo evistar reirse de nuevo, aunque lo intentó ocultar tapándose la boca con la mano - por supuesto nada de fiestas, aunque las drogas ya las llevo yo - dije señalando el brazo.</div>
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- Sarah, por favor - me regañó mi madre, con ese tono serio que tantas veces empleó conmigo.</div>
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- Vale, ma, tranquila, es una broma, sino me lo tomo así... - mi madre apartó la mirada, no dejaba de sufrir - Pero vamos a lo que vamos, ¿me ayudas a ponerme el kit de <i>Walking dead </i>y bajamos?</div>
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<br /></div>
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Bajamos en ascensor, entre la mascarilla, la cantidad de bolsas de mi goteo y mi muñeca llena de agujas, era sino una imagen cómica. Te das cuenta que la gente tiene pánico a la muerte cuando vives más de un día cómo enfermo en el oncológico. Cuando se cruzan contigo, apartan la mirada e intentan no rozarte no sea que la muerte se pegue; pues bien señores, les quisiera comentar una cosita, la muerte la llevas pisándote los talones desde el día que naces, de nada.</div>
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<br /></div>
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- Hola gordo, ¿cómo estás? dicen que nos hacen descuento en Guantanamo ya que compartimos edificio.</div>
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- Ja ja ja - mi padre siempre supo apreciar mi humor - ya ves pequeña, aquí estamos - y señaló la misma cantidad de aparatos que habían en mi habitación.</div>
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- Creo que alguno de estos lo conozco - y sonreí, mi padre siempre había tenido una conexión especial conmigo.</div>
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- ¿Ha pasado el médico? - preguntó mi madre para cortar aquella conversación tan sarcástica.</div>
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- Ma, sabes que no pasan hasta las once - y la miré con rabia, se cercioró. Mi madre era de esas personas que no le gusta bromear sobre la muerte, la quimio, la radio y todas las mierdas que nos pasaban; nunca entendió que era mi forma de defenderme del mundo. No la culpo.</div>
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- Fabio, ha pasado por aquí me ha dicho que subía a tu habitación.</div>
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- Pues nos habremos cruzado en el ascensor, ya cuando suba, bajará. Cómo soy un desastre me he dejado el móvil en el cajón.</div>
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- ¿En el cajón?, ¿no sabes que roban en las habitaciones? - mi madre y sus teorías de la conspiración; no creo que ningún ladrón por muy hijo de puta que sea se atreva a robar un móvil a un enfermo terminal. Obvié decirle esa frase a mi madre porque la hubiese destrozado.</div>
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- Quería comentaros una cosa, antes de que me ingresasen de nuevo, me había planteado hacer un viaje a Tailandia - mi madre abrió la boca, pero no le dejé interrumpirme - ya se lo que me vais a decir, qué estoy loca, que como voy a hacer algo así y un largo etcétera de cosas que ya me he planteado yo por mi cuenta; no os pido permiso, simplemente quiero que lo sepáis.</div>
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- Pequeña, yo sólo quiero que disfrutes, hazlo y mándame muchas fotos - mi padre forzó una sonrisa de oreja a oreja. Sabía perfectamente que estaba intentando no preocuparse por lo que me podía pasar. </div>
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- Sarah - esta vez quise interrumpirla yo, pero mi madre alzó la mano a modo de pausa - ve, diviértete, disfruta, lo que no puedas hacer ahora, no sabemos cuándo lo podrás hacer - noté como su corazón se encogió - ¿te vas con ese chico al que veías últimamente? </div>
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- No ma, eso, eso se acabó - y recordé la conversación de la noche anterior tan liberadora para mí - me voy con Fabio.</div>
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- Ah, siempre ha estado a tu lado, y es una gran ayuda - mi madre me miró extrañada, cómo si supiese que algo en mi interior había cambiado.</div>
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Estuvimos unos diez minutos hablando y Fabio, apreció por la puerta.</div>
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<br /></div>
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- Toc, toc, ¿se puede?</div>
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- Oh, no por favor, estábamos dibujando un plan de fuga buenísimo y nos has pillado. ¿Sabes que encubrir un delito también conlleva una condena? - mi padre y Fabio sonrieron; mi madre, como todos los últimos días, me sermoneó mentalmente.</div>
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- Fabio, ya que estoy tan sexy, y me apetece pasearme, para que todos me miren cómo a un mono de feria, ¿te importaría acompañarme a la planta de abajo para recargar la máquina de la televisión? - sí, la televisión en el oncológico no es gratuita, es más, un día de televisión cuesta alrededor de unos seis euros; una puta vergüenza.</div>
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<br /></div>
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- ¿Intentas escapar de algo? - Fabio me conocía perfectamente.</div>
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- En parte sí, en parte no. Les he dicho a mis padres lo de Tailandia, y auque te sorprenda, les parece perfecto.</div>
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- Hay algo más, te conozco pajarito - y me estiró de la goma de la mascarilla a modo de broma.</div>
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- Si, hay algo más, y antes de que me juzgues, quiero que sepas que simplemente he hecho lo que tenía que hacer.</div>
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- Sarah, conozco lo autodestructiva que eres, y esa sonrisa no me gusta. Y también se que Él va a salir en esta conversación. Joder, Sarah - se tocó el pelo, estaba nervioso - prometiste, te prometiste no joderte más. </div>
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- Fabio, tranquilízate, no ha sido algo malo para mí. Siéntate - le señalé una de las sillas cutres del pasillo, y me senté a su lado, apoyé mi mano en su rodilla y proseguí - le he dicho la verdad, que no se culpe, que todo está bien. No me interrumpas por favor, le he dicho literalmente que no se culpe de nada, porque no era ni el momento ni la persona adecuada. </div>
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- ¿Y?, ¿tengo que entender que le perdones?, ¿que le dejes irse de rositas después de todo?</div>
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- Shhhh, déjame seguir, Él me lo confirmó, y en parte necesitaba escucharlo, bueno, leerlo. No quería pasarme el resto de mis días lamiendo mis heridas. Me he perdonado a mi misma, y eso es lo que importa.</div>
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- Mira Sarah, ahora mismo no puedo contestarte algo coherente, escupiría mil insultos. - no levantó la mirada del suelo en ningún momento.</div>
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- Le he dado muchas vueltas, y necesitaba perdonarme, el saber que no fui nada, me ha ayudado a enterrar esa fase de mi vida. Se que no lo vas a entender.</div>
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- No, no lo entiendo - empezó a alzar la voz y a señalarme con el dedo - no entiendo cómo coño te sigues haciendo daño. Y cómo ese, ..., ese, ... ese cabrón de mierda sigue haciéndote falta. - no era propio de él decir palabrotas y me sorprendí, supongo que se reflejó en la poca parte de mi cara que se podía ver tras la mascarilla - Hazte un favor y eliminalo de todo lo que se refiere a tu vida.</div>
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- Espera un momento, no has entendido nada de lo que te he dicho.</div>
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- Sí, parezco gilipollas pero no lo soy. Ese, ese - esta vez se contuvo - te ha terminado de joder todos estos meses. No entiendo porqué eres capaz de perdonarle, se comportó como un completo niñato en los peores momentos de tu vida. - la ira empezó a poseer su boca - ¿Te acuerdas de cuándo supiste que eras portadora del VPH? Se cagó, te dejó en la estacada y sólo se preocupó por Él. ¿y cuándo supiste que tenías cáncer? ¿Estuvo ahí? No, por supuesto que no, se volvió a cagar y te dejó tirada como a una mierda. ¿Estuvo cuándo te enteraste del cáncer de tu padre?. Nunca ha estado Sarah, y tu le perdonas, ¡increíble!. Jamás te ha visto como te he visto yo, jodida, echa una mierda. ¿Sabía que te intestaste suicidar?</div>
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- No sigas por ahí, Él no estaba en mi vida cuándo eso pasó.</div>
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- No, ¿sabes quién estuvo? estuve yo - y se señaló el pecho, noté por su tono de voz que iba a empezar a llorar - no sabe lo jodida que has estado, que estás y seguirás estando. A la mínima salía huyendo, y tú volvías arrastrándote a su lado. </div>
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- Para, no es justo que remuevas mierda de mi pasado. - y vi como sus lágrimas empezaban a recorrer sus mejillas.</div>
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- No lo entiendo. - volvió a sentarse colocó la cabeza entre sus manos y arrancó a llorar.</div>
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- Por favor, no te hagas esto, tan sólo quería que supieras que me voy a Tailandia - intenté tranquilizarlo - contigo, que no es una rabieta si no es una etapa de mi vida que debía cerrar. Es cómo cuándo no quieres terminar un libro porque te gusta demasiado, pero necesitas saber el final por muy trágico que sea.</div>
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- No puedo con esto, Sarah, no puedo. - no sé si se refería a mi forma de actuar, a mi cáncer o a la situación que estaba viviendo.</div>
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- Necesitaba dejar de odiarle, dicen que si odias es porqué todavía sientes. Y yo, Fabio, necesitaba dejar de odiarle y perdonarme a mi misma por amar de la forma en la que lo amé, con adicción y sin ser racional. </div>
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- No sé qué decirte - y realmente sé que no sabía qué decir.. </div>
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- Estoy intentando pasar página a todo lo tóxico de mi vida. De principio a fin, y he empezado por el final. En fin ya sabes lo complicada que soy - y suspiré.</div>
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- Sarah, -seguía llorando, me abrazó desesperadamente - no me dejes nunca. </div>
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- Tranquilo, seguiré aquí. </div>
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Por desgracia para mí, esa frase hizo remover mierda en mi interior, yo también, supliqué en su momento que no me dejasen nunca. Y ahora, Su respuesta, casi calcada a la mía, carece de toda credibilidad. Pero también Le perdono. En parte, el "hilo rojo" nunca estuvo atado a su dedo. Algún día os explicaré lo del hilo rojo si es que aún no lo sabéis.</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-86103353124984101082017-12-16T06:10:00.000-08:002017-12-16T06:10:42.090-08:00Cartas a una muerta (Fabio) <div style="text-align: justify;">
Querida Sarah:</div>
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Aquí me ves escribiéndote , como cuando tú estabas en la universidad, y mientras estudiabas en mi escritorio, yo te escribía torpes palabras de amor en un cuaderno . </div>
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Estoy aquí sentado, mirando cómo pasan los días, sé que de alguna forma me estarás vigilando desde algún sitio, y se que desaprobarás mi estado.</div>
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También creo que lo te voy a decir lo sabes de sobras; te quiero, te he querido toda mi vida y no sé como llevar esto sin ti, siempre me has apoyado en todo y ahora ya no estás.</div>
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Te voy a explicar cosas que creo que no sabes o quizás, en el fondo sí, y siempre lo supiste y obviaste.</div>
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Aún recuerdo nuestro primer viaje a Bilbao fue en aquella época en la que tú ibas, creo, cada mes. Habías conocido a gente allí y Barcelona se te había quedado pequeña. Un buen día decidiste que ibamos a hacer un viaje, no teníamos nada, absolutamente nada entre nosotros, siempre fuiste tú la que decidas como iba a ser nuestra relación y yo siempre te seguí. Fue quizás un viernes, no lo recuerdo, y hablando sentados en un bar tomando una cerveza me dijiste: </div>
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- Oye, ¿por qué no nos vamos unos días a Bilbao?, necesito despejarme.</div>
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Para ti, despejarte era irte a Bilbao, recorrer Zazpi Kaleak, fumarte 40 petas, beberte hasta los charcos, y vivir la vida que son dos días. Cómo lo echo de menos.</div>
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Recuerdo cada uno de los detalles de aquel el fin de semana que pasamos juntos por primera vez, tú con media cabeza rapada, esas patillas largas, ese flequillo de color rojo, parecías una kale borroka; y yo que lo más parecido que había tenido a ropa informal era un tejano. Aún así decidí que me iba a ir contigo hasta el fin del mundo, que si tú me pedías la luna, yo te la bajaba. No hay día en el que no recuerde todo aquello, aún te veo mientras te arreglabas, a tu manera. Arreglarte a tu manera era ponerte unos tejanos rotos, unas Converse un jersey a rayas y tú palestino lleno de agujeros hechos de las chinas de los canutos y ponerte un poco de cacao en los labios. ¡Qué diferente eres ahora!, más sofisticada, más mujer, aún con ese aire de niña rebelde que tanto me gusta, como ves sigo sin saber sin saber hablar de ti en tiempo pasado. Recuerdo que te observaba desde la cama con admiración ¿cómo podías haberme robado el corazón de esa manera? A través del espejo, con una ceja levantada y con cara de sorprendida, refunfuñaste; no entendías que hacía desnudo en la cama mientras te contemplaba con aquella cara de bobo.</div>
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- Piltrafa, levanta de una puta vez. Vístete que nos vamos.</div>
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Y siguiendo tus órdenes, como siempre, me fui a la ducha. Me puse mi ropa, pantalón de vestir, zapatos, camisa y mi americana. Cuando salí del lavabo y me viste con aquellas pintas, tus carcajadas aún resuenan en mis oídos. Me cogiste de la mano y me dijiste vamos a comprarte algo decente, así no puedes salir conmigo. Me arrastraste escaleras abajo de aquella pensión que tanto te gustaba en mitad de Zazpi kaleak, y caminamos como unos 500 metros, me llevaste al Arise. En aquella tienducha me tuve que comprar una camiseta negra de Exploited porque era la única camiseta de mi talla que había en toda la tienda, una sudadera negra lisa con capucha y cremallera, unos tejanos medio rotos, que aún sigo sin entender porque pagué por aquellos tejanos cuando parecía que los hubiesen usado 200 indigentes antes que yo, y por supuesto, me tuve que comprar algo parecido a unas Converse; eran una imitación aunque casi costaban lo mismo que unas Converse auténticas. Subimos de nuevo a la pensión, me cambié, me puse aquella ropa. Y juro que jamás me había sentido tan disfrazado, pero tu sonrisa valía todo aquello y más. No hay un sólo día en el que no rememore esa sonrisa, ojalá te la hubiese podido devolver. Salimos de allí, callejeamos, por supuesto conocías cada una de las tabernas, las herriko tabernas y Arrano tabernas que habían por todo Bilbao. Al menos no di la nota, si hubiese llegado a salir con aquel traje seguramente o nos hubiesen echado, o me hubiesen pegado. En una de las cavernas, por llamarla de alguna manera, en las que paramos conocí a uno de tus amigos Eder. Recuerdo que te habló en vasco, y yo no tenía ni la más mínima idea de lo que te estaba diciendo; tú como siempre tan dada a los idiomas, le hablaste medio en castellano medio en euskera. Siempre tan dispuesta a aprender todo. La gente me miraba de forma extraña, cómo haciéndome un escaner, ya no solo porque yo me sintiese disfrazado y fuera de lugar, sino porque jamás habías llevado a un chico contigo a Bilbao. Eder se acercó y y me dijo al oido: eres un tipo con suerte, no la sueltes, ojalá hubiese más vascas como ella.</div>
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Nunca te dije lo que me susurró al oído, imagino que te preguntarás porque no te lo conté, pues porque sabía que lo nuestro no iba a durar. En aquel viaje yo tenía preparado decirte que te quería, que te necesitaba, que la relación que teníamos no era suficiente para mí y, efectivamente, no fui capaz de decírtelo por el miedo a perderte.</div>
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Fue un mes más tarde cuándo te perdí definitivamente, estábamos tomando un café tranquilamente en un bar cerca de la estación de Sants y te dije la gran frase: tenemos que hablar. Supongo que ya sabías lo que te iba a decir, e intentaste evadir el tema, no querías perder lo que tenías pero yo necesitaba decírtelo. Te cogí de la mano y te dije: Sarah, te quiero, me he enamorado de ti como un imbécil, y yo no puedo seguir con este tipo de relación. Necesito estar contigo, pero estar contigo de verdad.</div>
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Tu cara, un poema, no sé si tenías preparada aquella frase de hacía tiempo, y me dijiste: Fabio lo siento, de verdad que lo siento y no te lo digo por decir. Yo no siento lo mismo que tú, me va bien como están las cosas ahora, pero entiendo que si tú sientes algo más, entonces ya sabes que ésto se acaba aquí.</div>
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En aquel momento sentí como el corazón se desquebraja dentro de mí, y te dije que estaba bien, que no pasaba nada, que podíamos seguir así como hasta ahora, pero tú no quisiste hacerme más daño y decidiste dejar lo que teníamos. Siempre he pensado que si me hubiese callado, que si hubiese dejado pasar el tiempo, quizás y solo quizás, habrías querido seguir con lo nuestro. Te habriás enamorado de mí, me habrías amado, no lo sé, siempre he pensado que fue un mal momento para decírtelo, y que si tal y como dicen el tiempo lo cura todo, quizás el tiempo hubiese hecho que te enamorases de mí. Supongo que me ilusioné, habíamos ido juntos a una mini escapada, durante aquellos días sentí que realmente éramos una pareja, no sólo dos amigos que practicaban sexo por placer. Pasábamos mucho tiempo juntos y creía que nos compenetrabamos.<br />
Siempre soñé contigo, no te voy a negar que alguna calentó mi cama, algo fugaz y sin sentido, sin sentimientos, pero no eras tú, siempre desee que fueras tú. Te echo tanto de menos. </div>
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Te tengo que pedir perdón, nunca te lo confesé, cuando nos fuimos a Tailandia y tu móvil empezó a hacer cosas raras y me dijiste: ¡ostia puta, no sé qué coño le pasa al móvil!, te fuiste a duchar y cogí tu móvil, lo siento muchísimo. Vi su mensaje, no iba a dejar que te hiciese más daño en tus últimos días, y aún sabiendo que aunque lo habías superado, le seguías queriendo. Decidí que lo mejor era borrar aquel WhatsApp, sólo te preguntaba qué tal estabas, pero lo borré. Cambié su número, sólo uno de los dígitos y lo guardé, por eso nunca más supiste de Él, porque no tenías su teléfono, perdóname. No quería verte mal, estabas muy enferma y quise disfrutar de cada uno de los días que pasamos juntos. Sé que en aquel momento, si hubieses visto el mensaje, le habrías contestado; le habrías escrito que estabas bien, que todo te iba bien, cómo siempre hacías con todos y cada uno de nosotros. No me dio la gana, no quería que malgastases ni un segundo más con Él. En el fondo sabes que siempre lo odié y lo envidié, nunca quise hacerte daño, te lo juro, pero no podía permitir que por tu cara callese una lágrima más. No te merecías eso, sé que lo llevabas bien, pero también sé que cada vez que Él te escribía tu humor de aquel día cambiaba, te pido perdón nuevamente, no tenía ningún derecho a hacerlo, pero lo hice y la verdad es que no me arrepiento. El viaje a Tailandia es lo mejor que me ha pasado en la vida, tu cara de asombro, tu felicidad, tus ganas de verlo todo, levantarte por la mañana con ganas de vivir, no lo cambio por nada; de lo que he hecho, espero que estés donde estés sepas perdonarme. Me gustaría explicarte tantas cosas Sarah, ojalá estuvieses aquí.<br />
Recuerdo el día en que me fui a New York, me habían ofrecido un puesto de trabajo mejor y mejor sueldo, con la posibilidad de volver a España cuando me diese la gana. Esperaba que me detuvieras, que me dijeses que no me fuera, pero cuando te lo dije simplemente me dijiste : Que tengas mucha suerte, que seas feliz porque te lo mereces.<br />
Tú siempre fuiste una huída hacia delante para mí, si me fui a Nueva York fue por estar lejos de ti, no soportaba verte y no poder estar contigo como yo quería. Tampoco soportaba que estuvieses con alguien, todos me parecían una panda de gilipollas que no te llegaban ni a la suela de los zapatos, por eso le odiaba tanto, porque te robó el corazón cosa que yo no fui capaz de hacer.<br />
También recuerdo el día en el que te vi sentada en Plaza Cataluña, sola, destrozada, llorando. Si lo hubiese tenido delante le hubiese partido la cara, ¿cómo tuvo los santos cojones de utilizarte? nunca te había visto tan abatida ni tan dolida. Cuando por fin destruyes muros, que aún sigo sin saber cómo lo hizo, cuando por fin muestras cómo eres, va y te abandona, te dejo ir pajarito, no te merecía. Lo que más me duele es que aunque tú hayas muerto, Él vive con la conciencia tranquila, porque tú se lo permitís te, le regalaste la tranquilidad de saber que le perdonabas, con lo rencorosa que eres. Le perdonaste no haberte querido, le perdonaste haberte dejado tirada como una colilla cuando más lo necesitabas. Para mí, siempre fue un cobarde, nunca estuvo en tus malos momentos, en el momento que había un problema salía huyendo y tú volvías arrastrándote y perdonándole, hasta el último día. Aún no entiendo porqué fuiste tan benévola con Él. </div>
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</div>
<div style="text-align: justify;">
Nos has dejado solos, sin tu risa, sin tu cariño, sin tus palabrotas, sin tu sarcasmo, sin tu ironía. La vida no es justa, pero eso ya lo sabemos desde que nacemos. Es algo que me enseñaste tú. Me has regalado cosas muy hermosas, experiencias y vivencias que jamás habría hecho o vivido sin ti; pero ahora estoy solo, Sarah, muy solo. Me siento vacío, seguiré escribiendote y cada vez que me acerque a la orilla de algún mar, te hablaré, sé que me escucharás y hallaré respuestas aunque muchas de ellas no sean de mi agrado.</div>
<div style="text-align: justify;">
Hoy no puedo seguir escribiendo, porque cada palabra son agujas en mi corazón. Te vuelvo a pedir perdón por lo que hice y te pido perdón por no poder pensar en ti en pasado. Te quiero mucho Sarah no lo olvides nunca.</div>
<div style="text-align: justify;">
P. D. Parado frente al mar, mientras el mundo gira.</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-65275247447017609112017-11-23T12:35:00.002-08:002017-12-06T22:31:09.157-08:00De cómo desear morir<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">Tal y cómo me había prometido, iba a vivir cada segundo cómo si fuese el último. Estaba demasiado débil, "la cosa mala" me estaba dejando echa un asco, pero eso no me impidió hacer mi última terapia. Me la merecía, tenía derecho a pagar todo lo que me estaba pasando con una desconocida.</span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">- Sarah, me puedes explicar qué pasa por tu cabeza, sin miedo a ser juzgada - ahí estaba mi <i>loquera </i>intentando que me abriese a ella.</span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">- No estoy pensando en nada y, no me gusta mendigar pena.</span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">- Porqué siempre sueltas lo de la "pena", te escudas en esa palabra - enfatizó en esa palabra que tanto he odiado este último año.</span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">- Bufff - me aburro - no me gusta dar pena, no quiero que nadie me trate diferente en este "ciclo" - y enfaticé en esa palabra haciendo burla de su frase anterior.</span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">- Sarah, no estoy para juzgarte, lo sabes ¿no?, ya sé que conoces las terapias y tienes la respuesta perfectamente locuaz para todo lo que te pregunto; pero, ¿no te cansa estar siempre a la defensiva?</span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">- No estoy a la defensiva - mis cojones que no - ¿quiéres que te diga la verdad? - venga que mi negra del Bronx está preparada para disparar.</span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">- Por supuesto que sí, sólo estoy para escucharte.</span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">- Estoy echa una puta mierda, mi padre está echo una mierda, mi familia está destrozada. Me agobia pensar que no existe un futuro, en si mañana voy a abrir los ojos o no. Quiero morir sabiendo que me han amado y que yo he correspondido. No sé como afrontar el mañana, es más no sé ni cómo afrontar las próximas dos horas sin pensar en que me voy a morir y que me quedan mil cosas por hacer, ¿continúo? - ante mi agresividad verbal, ella simplemente asintió mientras tomaba notas en aquel absurdo papel - estoy cansada de sonreír y decir que estoy bien, cómo si no pasase nada. No entiendo porqué todo ha salido tan mal, y ya sé que me vas a decir que estoy en la fase de negación, pero estoy hasta los huevos de hablar con gente desconocida de lo que me pasa; de no poder descargar toda mi mierda y que me digan que van a estar ahí hasta mi último aliento. Ya sé que tengo a personas a las que le puedo contar todo, pero no quiero echarles mi mierda. Y también sé como se llama esto, no quiero crear una dependencia emocional. - paré un segundo para coger aire - </span><br />
<span style="font-family: "times new roman"; text-align: justify;">Estoy harta de tener que fingir, de no poder llorar tranquilamente, de ahogarme en mí misma, de tener que mirar hacia otro lado porque no soy capaz de asumir todo lo que me está pasando. </span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">Cansada, estoy cansada, de decirle a todo el mundo lo que quiere escuchar, que no se sienta mal por mí, que todo pasa; que todo el mundo tiene que continuar su vida.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Sarah, - me interrumpió - debes expresarte y poder sacar todo esto de tu interior porque te está comiendo por dentro. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Y hasta aquí puedo leer. Espero que hayas obtenido suficientes notas para tu próximo estudio sobre personas que no pueden asimilar el cáncer. - y me levanté como alma que lleva el diablo, cerré la puerta detrás de mí, y sentí el mismo alivio que se siente cuando tienes gastroenteritis y vomitas como una cerda. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">Recorrí aquel pasillo cómo una autómata, conocía perfectamente todos los pasillos de aquel hospital. Realmente estaba cansada de decirle a todo el mundo lo bien que estaba y que, como siempre, no pasaba nada. Ese día solo quería "hacerme bola" y que alguien me acurrucase durante horas mientras lloraba todo lo que no había llorado en aquel tiempo.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- ¡Sarah!, ¡Sarah!, ¡quieres parar! - había olvidado por completo que no había ido sola al hospital.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Perdona, es que no sé dónde tengo la cabeza - hice un <i>reset, </i>me toqué el pelo y volví a sonreír.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- No estás bien, ¿quieres ir a casa? - sabía que en realidad era una afirmación, no una pregunta.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- De verdad, no pasa nada, estoy bien, es la puta <i>loquera </i>que siempre me saca de quicio. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Siempre igual, cada vez que vienes te peleas con ella.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- No me vengas con broncas, que es lo que más me hace falta ahora mismo - de nuevo otro <i>reset </i>- perdona, es que no sé que me pasa.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Sí sabes lo que te pasa, pero como siempre no vas a contar nada a nadie, te lo vas a comer, y en unas horas todo ha pasado. Esto no funciona así, Sarah. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">Bajamos por el ascensor, y no le dirigí la palabra, sé que tenía razón, pero no iba a dársela, tenía mi derecho a pataleta, tenía todos los derechos del mundo. Llegamos al coche sin mediar palabra, Fabio sólo hacía que tocarse el pelo y eso ya sabíamos que significaba; que estaba nervioso, y se estaba reprimiendo.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Eres la única persona que me pone al borde del abismo - me espetó al cerrar la puerta del coche; respiró profundamente - te tengo que perseguir, ni si quiera cuándo estás enferma eres capaz de - y se calló.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- ¿De qué? ¡vamos! si ya después de descargar con una, puedo con dos - mi negra del Bronx había vuelto y con fuerza.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- De pensar en ti, de pensar en ti, joder - y echó la cabeza hacia atrás; había dejado las llaves en el contacto pero no las había girado.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Lo siento - y aquel perdón era sincero - sé que estás haciendo lo imposible por no aplastarme la cabeza - y sonreí - no te lo estoy poniendo fácil</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Nunca has sido fácil.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Estoy cansada de luchar sóla - por fin algo sincero de mi boca.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- No estás sola, sé que no te puedo dar lo que tu quieres, ni tú a mi lo que yo quiero. Pero planteémonos tener lo que tenemos hasta ahora. Yo estoy bien si estoy a tu lado, déjame ser yo quién decida si esto es justo o no. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- No es justo para ti, y lo sabes.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Es algo que tengo que decidir, yo y sólo yo. No te estoy pidiendo tener una relación, ni ser novios, ni pareja, ni nada; tan sólo déjame estar y darte todo lo que te pueda. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- No sé qué decirte - y la verdad es que no tenía ni la más remota idea, me había quedado sin palabras.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- No puedes alejar todo lo bueno que tienes de tu vida, por el simple hecho que tengas miedo a morir mañana.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- No estoy alejando todo lo bueno, tan sólo es que no quiero que nadie pase por esto.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Soy yo el que quiere estar a tu lado, no te pido tu consentimiento, no lo entiendes.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- No quiero que nadie se preocupe, no quiero que tengas que verme así - y me eché a llorar; otra vez un mar de lágrimas recorría mi cara, cuál niña pequeña.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">- Me desabrochó el cinturón con cuidado y me abrazó hasta que dejé de llorar, me quedé dormida. Sólo recuerdo llegar a cuestas hasta la cama. Realmente estaba agotada.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman";">Era media noche, estaba soñando con Él, nada de sueños eroticos no seáis mal pensados. En mi sueño Él estaba abrazandome en plan "cucharita" como tanto me gustaba, y me besaba la cabeza mientras me decía un "te quiero" de esos vanos que a veces escuchaba. Sentí su calor en mi cuerpo. </span><br />
<span style="font-family: "times new roman";"><br /></span>
<span style="font-family: "times new roman";">- Sarah, ¿estás bien?, llevas mucho rato moviéndote - Fabio se despertó y se levantó de su cama, dormía justo a mi lado. </span><br />
<span style="font-family: "times new roman";">- Si - susurre - te quiero, no me dejes. </span><br />
<span style="font-family: "times new roman";">- Estas ardiendo - me toco la frente - estás delirando. Voy a llamar a una ambulancia. Joder. </span><br />
<span style="font-family: "times new roman";">- Déjame ir - realmente quise morir en ese momento, no quería sufrir más. Sentí que mi cuerpo me abandonaba y en mi mente, estaba feliz. De verdad quise morir. </span><br />
<span style="font-family: "times new roman";">De fondo escuchaba como Fabio llamaba a esa jodida ambulancia. Díez minutos más tarde estaba en el hospital, llena de tubos y con dificultades para respirar. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
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<br /></div>
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<br /></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-3409214673211202192017-10-24T15:01:00.001-07:002017-10-29T02:58:34.368-07:00Me perdí en el mismo laberinto que Tú<div style="text-align: justify;">
Me encontraba delante de mi portátil, con una tarjeta de crédito que no era mía, buscando vuelos a Tailandia. ¿Qué cómo he llegado hasta aquí? </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Era sábado, el sábado siguiente después de enterarme que mi padre tenía cáncer. Y estaba haciendo mis maletas, casi cómo una autómata. Había mantenido una conversación muy reveladora con mi padre y mi madre. Por primera vez abrí mi mente y mi corazón, sin ironías, sin sarcasmos, sin muros; y todos vomitamos nuestros sentimientos. Las lágrimas dejaron paso a una promesa que les hice, iba a disfrutar cada segundo. Me lo debía a mi misma.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Iba a recorrer más de mil trescientos kilómetros de ida y lo mismo de vuelta, para disfrutar de la compañía de mis amigos y mi familia; no iba a ser fácil, pero iba a ser un mes en el que tenía que reflexionar y dejar de pensar tanto en la muerte. Iba a dejar de apiadarme de mí, y por una vez en mucho tiempo, iba a vivir. Después de ese mes, en un acto de locura, mi mejor amiga y yo preparamos un segundo viaje en el que íbamos a recorrer la costa de Sicilia. Y a la vuelta, a la vuelta ya veríamos.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Primera parada, Zaragoza; allí me esperaban mis amigos con los brazos abiertos; hacía mucho que no nos veíamos. Coincidieron las fiestas mayores de varios pueblos, cómo es lógico en agosto, y disfruté de todas ellas. Entre risas y momentos incómodos en los que las personas que más te quieren no saben cómo preguntarte por ti y tu padre, olvidé por completo el hospital, los tratamientos y los dolores. Me permití el lujo de disfrutar de unas cervezas después de tanto tiempo, subí en ataracciones de feria y exprimí cada segundo de varios conciertos rodeada de la multitud, saltando y gritando. Dejé el que dirán fuera de mi cabeza y le di unas vacaciones bien merecidas a mi negra del Bronx. La fatiga y algunas molestias aparecieron, claro que sí, pero no dejé que eso invadiese mi mente, unas buenas terapias de descanso y <i>soffing </i>me mantenían en pie; y por supuesto que algunos días no me pude levantar de la cama; pero esos días se han perdido en algún cajón del olvido de mi cabeza.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Siguiente parada Madrid, me dirigí a ver a mis dos amigas de la infancia Menchu y Ruth (prometí no cambiar sus nombres en este relato). Menchu ya estaba echa una "madraza" con sus dos pequeños Sarah Maria y Marc; y Ruth seguía igual de loca que hace nueve años. Recorrimos Madrid en una semana y nos pateamos todos los museos, salas de jazz y lugares alternativos y estrambóticos dónde salimos con alguna que otra sorpresa, como por ejemplo ver a un chico completamente desnudo; bueno completamente no, llevaba pajarita, algo muy elegante.<br />
<br />
Seguí mi viaje hasta Huelva dónde mi familia esperaba ansiosa mi llegada, este viaje fue más sentimental. Durante todos aquellos días, alguien se apiadaba de mi familia recordándome la mala suerte que teníamos, me abrazaban y me daban recuerdos para mi padre que no se había podido desplazar hasta allí. Caminé por aquellos caminos desiertos durante horas, me empapé del sol y bebí agua de las fuentes que por el camino me encontraba. Disfruté de la compañía de mi familia y volví a establecer vínculos con antiguos amigos. A diario visitaba el bar de aquel minúsculo pueblo dónde todos me trataban como "la pequeña"y hacían cómo si me sintiese por fin en casa. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
Regresé un sábado por la tarde a mi casa, casi no me dio tiempo a deshacer la maleta ya que al día siguiente de madrugada salía mi vuelo a Sicilia con mi mejor amiga. Casi perdemos el vuelo, Silvia se había dormido y tuvo que coger un taxi a toda prisa. Llegamos por los pelos, menos mal que habíamos hecho el check-in online sino nos quedamos en tierra, una anécdota más.<br />
Este viaje fue más calmado, disfrutamos del mar, los paseos, los baños en la piscina del hotel y de los deliciosos helados y granizados. Las noches las pasábamos en los <i>launge bar </i>más pintorescos que encontrábamos , tomando cocktels y deleitándonos con conciertos en directo; en alguno de ellos llegamos a bailar rock and roll y swing de los años treinta. Al más estilo guiri, cenamos en un restaurante de lujo con vistas al mar, eso sí, pedimos pizza y pasta; catamos el mejor y el peor vino de la costa norteña de Sicilia, soñando entre copa y copa que nos quedaríamos allí para siempre. Un viaje sin planear que jamás olvidaré, no solo por las maravillosas playas, sino por el tiempo que pasé con Silvia, dónde las risas no cesaron y las ganas de pensar en el futuro volvieron a mi cerebro.<br />
<br />
A la vuelta mi cuerpo dijo basta, y tuve que estar en cama más de una semana, pasando por un ingreso de tres días; ya que mis defensas habían bajado a niveles inimaginables. Pero todo había merecido la pena.<br />
<br />
Ale se había ido a New York por motivos de trabajo, y se iba a quedar durante tres meses, y nos comunicábamos a diario a través de whatsapp. Alan había pedido una excedencia y se había ido con él; esta vez parecía que le iba a ir bien. Y ¿porque no podía disfrutar de ese tiempo?, al menos lo habían intentado, y ésta vez me alegraba por ellos.Yo no pude intentar nada.<br />
Fabio no se separó de mi ni un segundo, regresó de New York y al enterarse que estaba en el hospital vino directo desde el aeropuerto.<br />
<br />
Cuando me dieron el alta tuve que vivir, a regañadientes, en casa de Fabio, mi padre estaba ingresado en el hospital, mi madre estaba con él; y nadie se podía encargar de mí durante veinticuatro horas sin estar en el hospital; así que asumí mi encierro.<br />
Al tercer día de estar casi medio inconsciente, y sin poder levantarme de la cama conseguí mantener una conversación lucida.<br />
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Qué te parece viajar a Tailandia en invierno?</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Que dices que, ... qué? - balbuceé.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Que qué te parece viajar a Tailandia en invierno?, creo que es una pregunta fácil de contestar - y sonrió. Con aquel simple gesto cualquier chica habría caído rendida a sus pies, pero yo, yo era yo. </div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿ A ti se te ha ido por completo la olla? Ni no, ni no, ni no - imité el ruido de una sirena - estás para encerrarte en el frenopático.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Te lo estoy diciendo completamente en serio, es tu viaje pendiente, y ¿porqué no?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues, porque no.</div>
<div style="text-align: justify;">
- A veces me sorprende lo locuaz que llegas a ser - maldita ironía.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No es el momento, mi padre, yo, los tratamientos, joder - y empecé a sudar, no paraba de tocarme el pelo, signo de que estaba nerviosa perdida.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sabes perfectamente lo que te han dicho, hazlo ahora. </div>
<div style="text-align: justify;">
- Lo sé, lo sé. - y las palabras de mi padre empezaron a sonar en mi cabeza "<i>Sarah, disfruta ahora, mañana, mañana será otro día. Hemos nacido para morir, pero este no es nuestro momento, así que disfruta de todo lo que puedas cada día. Yo voy a hacerlo, si me prometes que tú también lo harás.</i>"</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah ... - y su tonó cambió a reprimenda porque creía que estaba pensando nuevamente en que me iba a morir y que no merecía la pena nada. Pero aquel verano, realmente me había cambiado.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, ¡sí!, ¡que coño, pues claro! - y ahí estaba de nuevo demostrando mi inteligencia y mi capacidad mental.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿En serio? - se quedó perplejo mirándome cómo si estuviese mirando a alguien que estaba padeciendo una posesión demoníaca.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, en serio, vayámonos. No tengo nada que perder, mañana, mañana será otro día.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Quiero que sepas, que si te arrepientes en el último momento, no me voy a enfadar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Fabio, es en serio, no quiero perder el tiempo, si he aprendido algo durante estos dos meses es que no voy a perder ni un segundo de lo que me resta de vida.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Se que te va a joder la pregunta pero, - la iba a hacer de todas formas, Fabio era así, primero avisa y luego la puñalada - ¿has hablado con Él? esto no será una especie de "ataque de cuernos", ya me entiendes.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si piensas que tienes la más mínima oportunidad conmigo, lo llevas claro. - y me eché a reír - No, no sé nada de Él, seguramente estará calentádole la cama alguna rubia lerda - y por primera vez, aquello no me dolió, no lo imaginé retozando con alguien mientras yo estaba echa un mar de lágrimas, no noté como el corazón se volvía a partir en mil pedazos, no anhelaba poder sentirle. Supongo que mi interior se había curado progresivamente, Él no había estado en todo este proceso, ni en lo bueno, ni en lo malo. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
- Sarah,... - tono de reprimenda de nuevo - ¿no le echas de menos?, dime la verdad.<br />
- Fabio - esta vez iba a ser sincera, no necesitaba mentir - echo de menos su voz, sus caricias, sus pequeño detalles. Ni te imaginas lo que le he querido.<br />
- Hablas en pasado, y eso no me gusta.<br />
- Lo sé, pero es la verdad, por una vez, no duele, claro que le quise; y no sabes cuánto - al menos ya no se me ponía esa cara de gilipollas enamorada a punto de vomitar arcoiris cuando hablaba de Él - nunca he sentido nada parecido, Pero, ya es pasado, todos hemos pasado página; Él, yo... - pausa melodramática - nunca, es que nunca había necesitado a nadie. Adoraba sus caricias, ese pequeño detalle de tener alguna chorrada para mí, cómo bombones en su despensa. Estaba deseando que llegase el viernes para poder pasar tiempo con Él. No sé como explicarlo.<br />
- ¿Y qué más?. - Fabio me miraba embobado, nunca me había visto sincerarme.<br />
- Pues, ... no sé, su sonrisa, su brillo en los ojos, sus ganas de quererme, aunque nunca lo hizo. Pero hubo un momento en el que caí en que ya no estaba en mi vida, y ... - callé.<br />
- Sarah, vomita.<br />
- No duele, de verdad, tengo muy asumido que Él tiene una vida estupenda sin mi, no pasa nada - seguía siendo sincera, le había dado vacaciones a mi negra del Bronx - claro que me hubiese gustado que Él estuviese aquí y que me cuidase; pero no estaba preparado.<br />
- ¿Alguna vez le dijiste algo de ese viernes? - sabía perfectamente a lo que se refería, habíamos hablado de ello.<br />
- No, nunca.<br />
- ¿Y?<br />
- Y, ahí se quedó, sólo le dije que quería quedarme a dormir con Él; ni si quiera sé porque discutimos. Me quedé con las ganas de decirle que qué le parecía que me trasladase a su casa unos días para probar. Me quedé con las ganas de sentirle por última vez. Me quedé con las ganas de tantas cosas. - callé mil cosas de aquel día - Pero, no pasa nada - cogí su mano - todo está bien.<br />
- ¿ Todo está bien? Llevabas preparando un álbum más de dos meses, con vuestras fotos - menos mal que Ale no lo sabía - habías preparado de nuevo una cena romántica para tu cumpleaños. No me puedes decir que todo está bien.<br />
- Dicen que las cosas pasan por algún motivo, y ... bueno, le quise, necesitaba de Él, pero, Él ya no está, al menos de esa forma, en mi vida.<br />
- Alguien me dijo alguna vez una frase de un escritor: <i>y quizás nos volveremos a encontrar y las cosas serán diferentes, habremos madurado y ahí en ese entonces exista un nosotros.</i><br />
<i>- </i>Soplapoyas - esa frase se la dije yo hace muchos años - no merece la pena pensar.<br />
- ¿Porqué no le dijiste todo?. ¿Porqué todos sabíamos lo que Él significaba para tí, y Él nunca se enteró?.<br />
- Porque Él no me quiso, al menos de la forma que yo queria, y a veces comprar entradas en la montaña rusa no te asegura poder subirte, siempre puede llover. Hay veces en los que la gente prefiere estar seguro y no subirse. Querer a alguien no implica que ese alguien te quiera, o te haya querido.<br />
Y vamos a dejar el tema, ya lo he superado. Y sé que qué de lo próximo que hablaremos será de ti y de mi; y ese tema lo tenemos muy agotado darling - y me eché a reír, acaba de imitar a Ale a la perfección.<br />
- Cabezota como tú sola eh pajarito. Antes de nada, tendrás que hablar con la doctora. Ya me preocupare yo de hacer las maletas.<br />
- Tú lo que quieres es mirar mi ropa interior eh! Pues te vas a llevar una desilusión. Todas mis bragas son negras, ya sabes por el luto sexual. - Y reímos a carcajadas. </div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-71793382334025063832017-09-09T17:02:00.002-07:002017-10-16T10:03:02.909-07:00Malas noticias<br />
<table style="background-color: white; text-align: justify; width: 100%;"><tbody>
<tr><td align="center" height="28"></td></tr>
<tr><td style="text-align: center;"><table style="text-align: justify; width: 99%;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><span style="font-family: "arial" , "tahoma" , "verdana"; font-size: 14px; line-height: 20px;">La noche se está cayendo<br />y con ella cae el tiempo.<br />El día no sirvió de nada,<br />tarde de nubes sin agua.<br />Hoy el cielo es de cemento,<br />parece que Dios está muerto.<br />Golpean la puerta de casa,<br />mensajeros de desgracia...<br />¡malas noticias!<br /><br />En el barrio del infierno<br />la muerte va buscando empleo.<br />Corre, corre que en la plaza<br />se pasean las navajas.<br />¡Ay! corazones de hielo,<br />la noche de un viernes negro<br />y en los billares de la esquina<br />se están jugando la vida...</span><br />
<div style="text-align: center;">
<span style="font-family: "arial" , "tahoma" , "verdana"; font-size: 14px; line-height: 20px;">¡malas noticias! </span></div>
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="font-family: "arial" , "tahoma" , "verdana"; font-size: 14px; line-height: 20px;"><br /></span></div>
</td></tr>
</tbody></table>
</td></tr>
</tbody></table>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Era martes, un jodido martes, estaba esperando la respuesta del nuevo PET, y por ahora nada había sido bueno, así que no esperaba que me dijesen nada bueno. Había estado agotada durante el último mes y no había hecho nada por mí. Durante ese mes sólo recuerdo el oncologico y la cama.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah, como ya te comentamos, pues no ha salido bien, y debemos darte 20 sesiones más de radio. Esta vez serán 15 minutos cada día, en días laborables</div>
<div style="text-align: justify;">
- Vamos, un mes ¿no?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí Sarah, tendremos que volverte hacer un tag y un electro, ya sabes como funciona.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, quiero consultarle una cosa, si mañana no sale bien la operación de mi padre. ¿Puedo posponer el tratamiento? </div>
<div style="text-align: justify;">
- A ver, no es recomendable, mejor empezar cuanto antes. Pero esto es decisión tuya, yo no puedo decidir por tí.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ya, si lo entiendo, pero por ahora nada ha dado resultado por lo que, sólo te pregunto si puedo posponerlo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No creo que sea una opción, pero depende de ti. Por ahora está controlado, pero no se reduce. Y ya sabes que no es operable.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Es que eso no es una respuesta, si puedo hacerlo, lo haré.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Salí de allí, como siempre, medio huyendo. A mi padre le tenían que operar al día siguiente de unos quistes en las cuerdas bucales; supuestamente nada grave.</div>
<div style="text-align: justify;">
Llegué a casa de mis padres, casi por inercia, no quería pensar. Realmente creía que la vida me iba a dar un jodido respiro. </div>
<div style="text-align: justify;">
El día se pasó, como se pasan los días malos, sin un más ni un menos, me preocupaba más el estado de mi padre. Él sonreía, como siempre, pero sabía perfectamente que estaba cagado; nos parecíamos demasiado.</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Y llegaron las doce la noche, cómo si el reloj hubiese girado cuál <i>delorean </i>en <i>Regreso al futuro.</i></div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-style: italic;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Vas a querer ver el boxeo? </div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
- Por supuesto, pues cómo hacemos siempre, hasta que nos quedemos dormidos. - sabía perfectamente que no íbamos dormir, y la noche se nos iba hacer eterna. Acabamos viendo combates de M.A.</div>
<div style="text-align: justify;">
Llegaron las puñeteras 7 de la Mañana, nos vestimos todos y fuimos al hospital. <i>No va a pasar nada, todo va a ir bien</i> repetía mentalmente, como si fuese un mantra. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Era miércoles, un jodido miércoles, pasaban las horas y mi padre no salía de quirófano. El resto de enfermos salían en las camillas, acompañados del celador mientras llamaban a sus familiares.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Pasaban las horas y mi padre no salía, a las dos de la tarde, y con nuestra respectiva desesperación, nos llaman a los familiares, mi padre no había salido de quirofano. Mierda.</div>
<br />
Nos hacen entrar a un habitáculo y empiezan a con el gran discurso:</div>
<div>
- No se ha podido operar el tumor maligno se ha extendido por toda la garganta. y no sabemos hasta dónde ha llegado. Tenemos que hacer varias pruebas y, a partir de aquí, decidir qué tratamiento empezar.<br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
Mi madre me miró fijamente, se hizo la fuerte, y consiguió sentarse sin temblar en aquella silla ridícula. Yo no me lo podía creer, de nuevo el puto cáncer nos perseguía, pero, ¿qué coño habíamos echo en otra vida? ¿Acaso fuimos los propulsores de la Santa Inquisición?</div>
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<br /></div>
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- ¿Tumor maligno?, pero, ¿no era una operación simple de unos pólipos? - consiguió decir mi madre.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Lo lamento, pensábamos que era un pequeño quiste operable, que lo eliminaríamos con láser y se iba a enviar la biopsia para su análisis, pero, .. pero esto no es operable, no ha sido posible. En 10 días tendréis reunión con Oncología y os dirán si empiezan con quimio o radio, o si se pueden extirpar las cuerdas bucales. Lo lamento.</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
- Pero, ... a ver, ... ¿él lo sabe? - conseguí preguntar</div>
<div style="text-align: justify;">
- Él por ahora está despertando de la anestesia y aún no han hablado con él, pero os explicaran todo esta tarde cuándo se haya recuperado de la anestesia. El doctor se pasará y os explicará todo. Lo siento.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Gracias - y mi madre extendió su mano temblorosa a la doctora, yo, por mi parte, sólo conseguí salir por la puerta.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
El mundo se nos vino encima. Salimos de esa habitación desorientadas. Mi madre rompió a llorar, no se podía creer lo que nos estaba sucediendo, y yo, yo lloré cómo si no hubiese un mañana; nos abrazamos, y entre lágrimas recorrimos aquel pasillo, hasta salir por aquella puerta infernal hasta la sala de espera, dónde nos dijeron que en treinta minutos lo subían a la habitación 24 de la planta 13.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Necesitaba aire, salimos a la calle, mis manos temblorosas acercaron un cigarro a mi boca, mi madre no conseguía mediar palabra y simplemente me observó mientras el cigarro se consumía entre mis labios.</div>
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<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿ Por qué? - consiguió pronunciar - No lo entiendo, ¿qué hemos hecho para que nos pase esto? - y siguió llorando. Yo no sabía que contestar, realmente creía que una "maldición" había caído sobre nosotros, intentó abrazarme pero me aparté; no porque no quisiera ese contacto, sin porque no podía soportarlo. Seguí fumando, sin pronunciar palabra durante alrededor de veinticinco minutos. Nuestros móviles no paraban de sonar, pero ninguna de las dos hizo el más mínimo esfuerzo por mirarlo o prestarle atención. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Mama, tenemos que subir - tiré el tercer cigarro y lo pisé, no esperé respuesta, simplemente volví a aquellas puertas, con la misma sensación que debe de tener un toro al entrar en un encierro.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah, espera, no entres. - mi madre me cogió del brazo para pararme - ¿cómo se lo vamos a decir? - sus lágrimas seguían recorriendo su rostro.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No lo sé, pero no puede estar sólo, no ahora.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Y tú? ¿Porqué siempre estás sola?</div>
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- Mamá, no es el momento - sólo le llamaba mamá cuando estaba realmente cabreada.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Nunca es el momento Sarah, no pides ayuda nunca, no te comunicas con nostros, no sé que te dijeron ayer. ¿No crees que ya es hora de hablar de lo tuyo?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Estoy bien, la doctora me ha dicho que está todo controlado, ahora no es momento de pensar en mí - y mi nariz dio la vuelta al mundo dos veces, mentira sobre mentira.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Antes de subir, necesito que seas fuerte, sé lo que nos espera, ya sabes. - y se calló</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Localizamos el puñetero ascensor para llegar a la planta trece, yo seguía callada, no quería pensar, mi cabeza iba por una parte y mi cuerpo por otro. Pulsé el número de la planta y dejé que aquel ascensor me llevase hasta aquel recinto, que no se parecía lo más mínimo a una habitación. Nos sentamos, cada una en una silla, sin hablarnos. Pasó una hora hasta que mi padre despertó de la anestesia.</div>
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<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- ¡Pequeña! - y alzó su brazo lleno de tubos para intentar acariciarme.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Gordo, no hagas esfuerzos, que estás lleno de vías. - y sonreí forzosamente, mi madre se había quedado dormida.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No quiero ni una lágrima, ¡eh!, a este lo mato yo. - y con todos sus tubos y un gran esfuerzo apretó mi mano, sabía que mi padre tenía más cojones que el caballo de Espartero, en eso nos parecíamos demasiado.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Papá, shhhhh que se ha quedado dormida. Tú no tienes que pensar, déjalo. - hablé lo más bajito que pude.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pobrecita, debe de estar cansada. - dijo bajando la voz mientras miraba aquel "sillón" que ocupaba mi madre de la forma más ortopédica del mundo .</div>
<div style="text-align: justify;">
- Papá, ahora que está dormida, cuéntame, ... ¿cómo estás realmente?<br />
- Yo estoy bien - me daba tanta rabia asemejarnos tanto, sabía que estaba echo una mierda; un golpe así no se lleva nada bien.<br />
- Pa - así le llamaba - de verdad, conmigo no, dime la verdad.<br />
- Que estoy bien pesada, a ver que nos dice el médico mañana por la mañana.<br />
<br />
Mi madre se despertó y consiguió incorporarse y deshacer aquella postura tan esperpéntica.<br />
- Me he quedado traspuesta<br />
- Traspuesta dice, ... si se te caía la baba y se te escuchaba roncar - mi padre siempre sabía sacarnos una carcajada.<br />
<br />
Estuvimos hablando durante horas, contándonos tonterías y viendo las noticias en esa mini telvisión que funcionaba a monedas. Ninguno de nosotros teníamos ganas de pensar ni hablar de "la cosa mala". A las diez de la noche me tuve que ir a casa, ya que cómo sabréis sólo se puede quedar una persona durante la noche, y por supuesto mi madre quiso quedarse.<br />
<br />
No pude dormir en toda la noche, fumé, lloré, grité, blasfemé y me cagué en los muertos del puto cáncer. Eran las 6 de la mañana y mi cabeza no regía, demasiadas horas despierta, demasiadas horas pensando. Salí a la calle, sin rumbo, sólo caminé. Me senté en un banco encendí un cigarro y dejé la mente en blanco durante unos 10 minutos, hasta que mis piernas decidieron comenzar a caminar hasta el hospital.<br />
<br />
- ¿Qué haces aquí tan temprano?<br />
- Ma, no sabía que hacer, no quiero que vivas la muerte de los dos.</div>
</div>
</div>
</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-50910743016052950532017-07-20T14:30:00.000-07:002017-07-20T14:30:33.290-07:00Lo tuyo y lo mío<div style="text-align: justify;">
Estaba en el hospital, ingresada desde hacía dos días, tenía las defensas muy bajas y por riesgos habían decidido ingresarme por posibles complicaciones. En la habitación no había muchas cosas, tenía poco más que un papel y un bolígrafo. A parte del dichoso móvil que no paraba de vibrar.</div>
<div style="text-align: justify;">
Cogí la libreta y recordé algo que me enseñó un profesor de psicología de la Universidad, vomitar todo lo que me daba rabia en un trozo de papel.</div>
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<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
1. No soporto mi perfume, me hace recordar cuándo estaba con Él y nuestros olores se mezclaban.</div>
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2. No aguanto el anuncio de Estrella Damm lo veíamos siempre juntos, era como un ritual del que nunca habíamos hablado y lo repetíamos cada año.</div>
<div style="text-align: justify;">
3. El anuncio de coca-cola en el que la chica al final bebe de su botella me repatea las tripas, yo nunca tendré la oportunidad de beber de esa botella.</div>
<div style="text-align: justify;">
4. Sentirme perdida y con el corazón roto como Sandy en <i>Grease</i></div>
<div style="text-align: justify;">
5. El anuncio del euromillón en el que el chico "persigue su destino" y se coge el asiento de al lado de la chica para conocerla.</div>
<div style="text-align: justify;">
6. Mojarme bajo la lluvia y sentir como las gotas recorren mi cuerpo, he decidido usar paraguas.</div>
<div style="text-align: justify;">
7. Ojete calor, me pregunto si seguirás viendo sus vídeos. (sí soy una friki) les he cogido hasta un poco de manía.<br />
8. Preparando mi próximo viaje creo que debería volver a Menorca, para no recordarte. A ver si llego a hacer viajes.<br />
9. No soporto recordar cómo me mirabas, ...</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Qué haces pajarito? - y la sonrisa de Fabio iluminó toda la habitación mientras entraba.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola petardo - levanté el brazo lleno de tubos a modo de saludo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- A ver ... Y y me arrancó la libreta de entre mis manos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Se quedó callado durante un par de minutos.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Ya estás como en la uni? Vomitas y destruyes el papel, cómo si así se fuesen todos tus males.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Fabio, estaba aburrida y bueno, he escrito un poco. Tampoco es para ponerse en plan <i>dramaqueen </i>por favor, eso le pega a Ale no a tí.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Te autodestruyes y este no es el momento. Mírate.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Eh eh eh! - levanté la mano alzando el dedo al más estilo negra del Bronx - ¿ves la puerta?, aquí viene gente a animarme no a joderme. Así que ya sabes.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¡Sarah! -alzó la voz- no empieces, vamos a llevarnos bien, no quiero que pagues conmigo lo que te pasa con Él.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Lo siento - me di cuenta que me había pasado bastante - ¿te puedo hacer una pregunta?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Dime petarda, a veces no sé porqué te aguanto - y se sentó en el borde de la cama mientras acariciaba mi mano y sonreía.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Porqué no funcionó?, ¿porqué nunca ha funcionado? Siempre viví con ese miedo a perderle.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Porque nunca te amó - miró hacia mi mano y la agarró con más fuerza - lo nuestro nunca funcionó porque tú no me amabas, y lo vuestro, porqué Él nunca te amó.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Fabio, ... lo siento. - me quedé en silencio y sin saber qué decir, y es bastante raro, porque siempre tengo alguna chorrada que decir, sobretodo para quitar hierro al asunto y cambiar de tema.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No te pido que lo sientas, no te lo he dicho para que te sientas mal. Sólo quiero que dejes de darle vueltas. Sé que duele y mucho pero no debes culparte, y debes dejar que todo siga su curso. Y deja de odiarte, que me pones enfermo.</div>
<div style="text-align: justify;">
Nos miramos y nos echamos a reír, sabíamos perfectamente que esa frase había sido bastante inapropiada, </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Le has vuelto a escribir ¿verdad?. Me prometiste que borrarías su teléfono.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, bueno, sólo le he dicho que me gustaría saber de Él y que suponía que estaría viendo el fútbol</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Y? - Me miro miró con cara de Sherlock Holmes en un interrogatorio.</div>
<div style="text-align: justify;">
- <i>Ya hablamos</i>, esa ha sido su respuesta. - miré hacia el suelo como cuando los niños se sienten culpables cuando hacen una trastada .</div>
<div style="text-align: justify;">
- No le has dicho que estabas aquí ¿verdad?</div>
<div style="text-align: justify;">
- No, la he cagado, lo sé, sólo esperaba que ... Va es igual</div>
<div style="text-align: justify;">
- No, no es igual, esperabas que te dijese que te quería, que quería saber de ti y que siente todo el daño que te ha hecho. ¿Qué esperabas?, ¿que viniese al hospital a pedirte perdón y te besase en plan película?. Nos habías prometido que ibas a borrarlo todo y que ibas a luchar por ti.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No, no esperaba que me dijese nada, ni que hiciese nada. Ya esperaba que dijese algo así, Él tiene su vida y estará ocupado, - y ahí estaba mi nariz creciendo como la de Pinocho.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Me da igual, tú sigue machacándote, como se entere Ale, lo va a hacer él mismo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ni se te ocurra contárselo a Ale, sabes que no está de acuerdo con nada de esto, hace mucho que le prometí que no volvería a ponerme en contacto con Él.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Mentirle a Ale? Tu sabes que te lo huele, al igual que yo.</div>
<div style="text-align: justify;">
Y ya sabeis que Ale es como <i>Beetlejuice </i>cuando pronuncias su nombre tres veces, allí aparece.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Toc, toc. ¿cómo está mi <i>princess</i>?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues ya ves, aquí, haciendo gasto de la Sanidad pública. - sí esas somos yo y mi ironía.<br />
- A la próxima te llevas una colleja Sarah. - y esos eran Fabio y su regañina rutinaria hacia mi ironía.<br />
- ¿Cómo te va con Alan? - y así es como se cambia de tema (punto para mí).<br />
- Ay darling, pues estoy in love, y esta vez va a funcionar, éste es el de verdad, hemos esperando mucho tiempo para estar juntos - habíamos escuchado demasiadas veces la misma historia pero ahí estábamos, aguantando estoicamente sin pronunciar ninguna palabra - ha vuelto, y ésta vez es para estar juntos; ya sabeis que no suelo bajarme los pantalones - ahí si que solté una risita de las mías mientras Fabio me daba la colleja que me merecía - ¿de verdad darling? ¿tenemos doce años?, a lo que iba; pues como ya sabéis quedamos para tomar un café cuando volvió de su viaje. Y una cosa llevo a la otra y ... (pausa dramática)<br />
- ¡Ay, de verdad Ale! ¿que pasó? ¿te lo tirarse? - me sorprende lo fina que puedo llegar a ser.<br />
- Deja que se explique, qué animal eres cuando quieres.<br />
- Gracias Fabio, (segunda pausa dramática tocándose el pecho y mirando hacia el cielo cual gilipollas enamorado) pues cómo iba diciendo, le dije que le echaba de menos y ...<br />
- ¡Ostia puta! Qué tortura, a ver si te piensas que tengo todo el tiempo del mundo ¿Hola? - señalé los tubos que colgaban de mi brazo y recibí una nueva colleja.<br />
- Eres insufrible - cuantas veces había escuchado esa frase - pues le dije que le echaba de menos y que había pensado mucho en él y me dijo que ¡él tambien! pero ...<br />
- Vale, esta vez me exasperas a mí. - Fabio se revolvió el pelo y resopló.<br />
- Resumiendo que estamos empezando de cero, estamos en plan amigos y a ver que surge.<br />
- Vamos que no te lo has tirado, y para eso tanta tontería, ¿en serio? Joder.<br />
- ¿Y me lo dices tu?, ¿la que se ha pasado todo este tiempo vagando como un alma en pena enganchada a un móvil?, ¿la que me ha llamado en infinidad de ocasiones porque te han dejado tirada como a una cualquiera?<br />
- ¡Eh!, ¡Eh! Te has pasado tres pueblos, si quieres te echo en cara las miles de cosas que he tenido que hacer por ti y tus elecciones maravillosas con los tíos. ¡No me jodas!<br />
- Vamos a tranquilizarnos todos un poco que estamos desvariando un poco. Nos alegramos mucho por ti, y espero que esta vez sí sea de verdad - la razón y la serenidad de Fabio hablaron<br />
- Le has vuelto a escribir, ¿a que si? - y señaló el móvil, mientras yo me cagaba en todo lo habido y por haber - dame el móvil.<br />
- No te voy a dar el móvil, y no, no le he escrito.<br />
- No te lo crees ni tú, ¿y tú? - señaló a Fabio -¿no le has dicho nada al respecto? Luego quien recoge sus pedazos soy yo, claro; y acabamos llorando y pasándolo lo mal. Que me des el móvil.<br />
- Es invadir su intimidad, y si te dice que no le ha escrito, es que no lo ha hecho.<br />
- Y encima la defiendes, es increíble, no quiero hablar más del tema, pero prometiste que ibas a pensar en ti.<br />
- Joder, eres un moñas, vamos a dejar el tema, ya lo he superado. Si hablamos o no es cosa mía, pero te aseguro que ya no pienso en ello de la forma que crees. Sí, he estado jodida, pero no pienso en Él de la forma que crees, es algo que pasó; y ya está, pasó. Todos pasamos por rupturas, unas mejores y otras peores, y sólo espero que le vaya bien.<br />
- Espera Ale, - sonrisa ironica de Fabio - que ahora va a decir que lo ha olvidado y que ha pasado página.<br />
- Ja ja ja - Ale no pudo evitar reírse- esa me la sé, nunca más abriré mi corazón a nadie, he vuelto a levantar muros infranqueables.<br />
- Sois gilipollas, no sé porqué hablo con vosotros; de verdad.<br />
- Es que nos jode verte mal y que te cierres en banda a un futuro y ... - Fabio se calló, se hizo el silencio absoluto, hablar del futuro en mi presencia últimamente se había convertido en tabú.<br />
- ¡Oye! Que aquí hay unos enfermeros que ojo ¡eh! - sonrieron por intentar complacer mi sarcasmo - Se os va mucho la olla con lo de intentar no hablar de "ciertas" cosas delante mío, que no la voy a palmar ahora - y me tiré en la cama haciéndome la muerta y sacando la lengua.<br />
- ¡Dios, Sarah! No gastes estas bromas, son de muy mal gusto - Ale me agarró con toda la delicadeza del mundo y me colocó sentada en la cama, mientras Fabio estaba con los dientes tan apretados que se podía escuchar como rechinaban en una habitación en plena montaña en China.<br />
- Va, que ya sé que lo hacéis por mí, pero no os hagáis ollas por mi culpa, ya sabéis que el yoga me ha ayudado mucho; las cosas deben pasar y fluir, y al fin todo volverá a su sitio.<br />
- Bufff, voy a salir un momento. - Fabio se revolvió el pelo, se mordió el labio y creo que se contuvo para no dar un portazo.<br />
<br />
Al cerrarse la puerta, mi querido dramaqueen se desató.<br />
- Darling, te has pasado mucho, sabes que está muy afectado, todos estamos afectados; pero él, ya sabes como es.<br />
- Oye, que la que está aquí soy yo no él - y señalé la puerta.<br />
- No seas así, vuelve de entre los gilipollas, ya sabes como va esto, lo pasamos mal y tú te mereces algo más.<br />
(CONTINUARÁ)</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-33694621920339827662017-07-07T12:02:00.002-07:002017-07-16T23:00:03.532-07:00Nadie hablará de nosotras cuándo hayamos muerto<div style="text-align: justify;">
Esperé dos semanas, y bueno cómo os podéis imaginar no pasó nada. No recibí ningún mensaje ni ninguna llamada. Esto es lo que tienen los <i>bajalunas, </i>que una vez te bajas los pantalones, te arrastras y te abres un poco (no me refiero a abrirte de piernas, ya sabéis) se cuelgan una medalla más, se echarán unas risas a tu costa, y a vivir, que son dos días.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
En el transcurso de esas dos semanas, como la vida es muy puta y no me deja ni tomar un respiro, volvieron a llamarme del hospital, tenia una nueva visita con la oncologa. La noticia era que la cosa no había ido bien y tenía que hacer radio otra vez y posiblemente quimio. Todo dependía de cómo evolucionara todo. Así que otra vez me veía yendo al hospital semanalmente</div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div style="text-align: justify;">
La conversación fue algo asi:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah sé que la otra vez no quisiste ir al psicólogo, pero creo que esta vez deberías ir, y hablar esto con tu familia. No deberías pasar por esto sola. No creo que sea conveniente.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ya, imagino, no sé que decirte ahora mismo, no estoy pasando por un buen momento personal, y estoy bastante ofuscado. - por no decir que estaba hasta los huevos de que la muerte me pasase los talones y que la relación en la cuál me habia apoyado se había ido a tomar por culo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Por eso mismo debes hablarlo, también depende de tu estado mental que el tratamiento funcione.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No te preocupes - y ahí iba una de las mejores actuaciones de mi vida - estoy bien, y si necesito ayuda ya te la pediré, pero por ahora estoy mejor así, sin decirle nada a nadie.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No creo que eso te ayude, pero es tu decisión y tengo que respetarla. Si necesitas cualquier cosa mis puertas están abiertas.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Después de la tercera sesión volveremos a hacer un PET y veremos cómo evoluciona.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Más o menos sé cómo funciona - lo había vivido demasiadas veces en mi familia, así que no me asusté por el proceso.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Te doy cita para el lunes a primera hora.</div>
<div style="color: black; font-family: "times new roman"; font-size: medium; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-indent: 0px; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<div style="font-style: normal; margin: 0px;">
<br /></div>
<div style="font-style: normal; margin: 0px;">
Salí de aquel habitáculo de nuevo, está esta vez no iba sola, Fabio me estaba esperando sentado en aquellas sillas que por su complexión parecían tremendamente ridículas y minúsculas. Decidí contárselo el mismo día que me llamaron del hospital, ya que sabía que no quería pasar de nuevo por todo esto sola. Ale no podía acompañarme ese día y en ese momento estaba viviendo una segunda oportunidad con Alan, así que no quise molestar, como siempre hago. Y tiré de la otra única persona que nunca me había fallado.<br />
Después de la discusión más idiota de todos los tiempos, entendió el motivo por el que no se lo había contado.<br />
<br />
- No me preguntes como ha ido esto, por favor. Y vámonos de este tugurio, se me ponen los pelos de punta.<br />
- Vámonos. - no hubo ninguna discusión ni ninguna mala cara, cosa que me extrañaba debido a mi reacción y la forma en la que le había hablado.<br />
<br />
Fuimos hasta el parking, y entramos en su coche.<br />
- Sé que la otra noche te dije que no te quedases a dormir, no era una buena día por los dos. Estabas vulnerable, y yo, ... bueno yo no puedo evitar según que cosas.<br />
- Fabio no digas nada sobre ese día, no pasa nada, no fue una buena idea por mi parte, no quería estar sola en ese momento y no era justo para ti. Lo entiendo. - y era completamente cierto, en esas dos semanas que sentí su apoyo incondicional, entendía perfectamente que seguía sintiendo algo por mi, y que era duro vivir a diario que no eres correspondido. Yo lo estaba viviendo, así que no podía culparle por nada. sólo estar agradecida.<br />
- Ya, pero quiero que entiendas que si estoy a tu lado no es por lo que sienta, a ver si me entiendes, si estoy ayudándote es porque te aprecio muchísimo y quiero que estés bien.<br />
- Ya sabes que siempre estoy bien - e hice una mueca parecida a una sonrisa, no quería pensar otra vez en la radio y en todo lo que se me venía encima.<br />
- No estás bien, esto, ... ya sé que prometimos no hablar de esto, pero,... ¿te ha contestado? - le costó la vida preguntarme por Él y se le notaba demasiado, agarró el volante como si quisiera asfixiarlo.<br />
- Te prometí que no volveríamos a hablar de esto. y vas tú y sacas el tema. ¡Oh! ¿ese restaurante japonés es nuevo, no? - esta es mi fantástica forma de cambiar de tema cuándo no me interesa hablar.<br />
- Eso es que no - demasiados años, conocía mis reacciones - ¿y tú?, ¿le has vuelto a escribir? - seguía estrangulando el volante con fuerza.<br />
- No, y no le he escrito, desde el mensaje que tan magníficamente me aconsejaste que le enviase, no sé nada de Él.<br />
- ¿Te quedan un par de días lo sabes, no?<br />
- Sí, y lo prometido es deuda. Borraré todo, mensajes, fotos, todo. Os lo prometí, ya sé que no es bueno para mí, soy muy propensa a regodearme en mis miserias.<br />
- Es decisión tuya, pero no pienso volverte a ver llorando sin cesar y enganchada al móvil cómo si fuese una extensión de tu cuerpo - sí esa fui yo durante un par de semanas, me pasaba el día mirando el móvil, esperando un mensaje, una llamada, repasando cada una de sus fotos, y recordandole. </div>
<div style="font-style: normal; margin: 0px;">
- Eres un exagerado - esta vez sí que me reí.<br />
- ¿Exagerado? Tuvimos que arrancarte, literalmente, el móvil de tus manos mientras llorabas mirando sus fotos. - real cómo la vida misma, creo que ha sido el momento más patético de mi vida.<br />
- ¡Venga! Que no es para tanto, ya he dejado de repasar sus whatsapp, cual yonki esnifando farlopa.<br />
- De verdad, eres insufrible, te encanta reírte de ti. - se había relajado, el volante empezaba a respirar.<br />
- Dejemos el tema ¿vale?<br />
- Ok, cómo dirías tú, corramos un estúpido velo. Y ahora vamos a tomar algo y me cuentas qué te han dicho en el hospital.<br />
<br />
Nos sentamos en una terraza. tranquilos, y le expliqué muy por encima lo que me habían dicho. No me apetecía hablar del tema.<br />
- No te voy a dejar que vayas sola como has hecho hasta ahora. Si no quieres que entre, o no quieres explicarme más, no pasa nada, pero te vamos a llevar o Ale, o yo. Y no hay escusas que valgan - a veces me daba mucha rabia lo comprensivo que era.<br />
- Tengo que ir el lunes a las ocho de la mañana y ...<br />
- Y nada, el lunes te paso a buscar. </div>
<div style="font-style: normal; margin: 0px;">
- Cambiando de tema, ¿cuándo tienes previsto volver a la ciudad que nunca duerme?<br />
- Pues la verdad es que tendría que volver un mes, intentaré que sea para agosto, no quiero dejarte sola.<br />
- Es que eres idiota, no me va a pasar nada en agosto, o en julio, o en el mes que sea.<br />
- Buffff, no empieces con tus sarcasmos.<br />
- No es sarcasmo, ni humor negro del que suelo usar, tienes que pensar en ti. Yo estoy empezando a hacerlo.<br />
- ¿A si? Pues ya me dirás, si pareces un alma en pena </div>
<div style="margin: 0px;">
- Las ojeras y la cara vienen de serie, imbécil - dije mientras me burlaba de mi misma haciendo una mueca, algo parecido a lo que yo llamo "cara de <i>monguer</i>".<br />
- Va anda, ¿qué te apetece hacer hoy?<br />
- Pues estaba pensando en tirarme en paracaídas, pero creo que no es muy recomendable.<br />
- De verdad, no hay quien te aguante. En serio ¿qué te apetece hacer esta tarde?.<br />
- Pues no sé, la verdad, podíamos ir al cine ¿No?<br />
- ¿A ver una película friki?. Te propongo un plan, vamos a ir a la playa y vamos a cenar por ahí. ¿qué te parece?<br />
- Que me da palo<br />
- Yo sí que te voy a dar un palo, anda, levanta el culo de esa silla que nos vamos.</div>
</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-57525190997727871702017-07-01T07:42:00.000-07:002017-07-01T15:44:16.746-07:00Las cosas malas me hacen dudar (II)<br />
<div style="text-align: justify;">
Ese bloque me era muy familiar, ya sabía dónde estaba, me esperaba la película <i>The Crow </i>y la dichosa manta de ositos en casa de Ale.<br />
<br />
- Sarah, no sabía hasta dónde debía conducir, ¿quieres subir? - me miraron por el retrovisor esperando alguna respuesta.<br />
<br />
Vi el reflejo de mi rostro en la ventanilla, y me recorrió una sensación extraña, era una mezcla de asco y pena. ¿cómo había llegado a esta situación otra vez? Tardé un momento en contestar aunque me parecieron horas.<br />
<br />
- No, no quiero ir a tu casa ¿podemos, ... podemos ir a otro sitio? por favor - y ahí estaba la fábrica de lágrimas de nuevo, en pleno proceso de fabricación.<br />
- Vamos a mi casa - espetó Fabio.<br />
Sin más Ale encendió de nuevo el coche y empezó a conducir, yo estaba ensimismada en mis pensamientos, dándole vueltas a ese adiós absurdo que acababa de vivir. Diez minutos más tarde estábamos en frente del portal del piso de Fabio.<br />
Los tres nos miramos y Ale abrió la boca:<br />
- Sarah, lo siento pero, que si quieres yo dejo el plan que tenía, es que había quedado con Alan y después de casi un año queríamos arreglar las cosas.<br />
- Ale, no te preocupes estoy bien - sí, claro - me quedo un rato y me voy a casa.<br />
- <i>Princess </i>de verdad, yo no sabía que iba a pasar esto, yo si quieres lo dejo para mañana y ... - no le dejé continuar.<br />
- Cariño, no pasa nada estoy bien - rocé su brazo como pude - estoy genial y ya mañana quedamos, y hablamos, y me cuentas, mañana será otro día. Seguro que mañana veré todo esto con otra perspectiva.<br />
<br />
Se dirigió al coche, con cara de pena, cómo cuándo abandonas a un perro, Nos despedimos con un triste gesto de mano. Fabio abrió la puerta y nos dirigimos al ascensor, sin mediar palabra. Llegamos a la planta pulsada, acercó su mano a mi hombro y me hizo entrar al piso. Fuimos hasta el comedor y allí nos quedamos los dos solos, sentados en el sofá, mirando al infinito de la enorme televisión de 55 pulgadas que estaba apagada, por no mirarnos a la cara. Yo no era capaz de mediar palabra, mi cabeza no regía demasiado bien, los pensamientos negativos no paraban de nublarla.<br />
<br />
- Me puedes explicar que ha pasado esta vez, si quieres - la voz de Fabio sonaba pausada, creo que estaba haciendo un esfuerzo titánico para no gritarme y llamarme gilipollas.<br />
- No lo sé - me eché las manos a la cabeza y empecé a tocarme el pelo, como siempre hago cuando me pongo nerviosa - la verdad es que no lo sé.<br />
- Si no me lo quieres contar ahora, no pasa nada. ¿quieres tomar algo?. ¿Te preparo una infusión, o prefieres una cerveza sin alcohol? - se levantó y se puso en frente de mí, empezó a revolverse el pelo, en eso nos parecíamos demasiado, sabía que estaba muy nervioso.<br />
- No, no quiero nada, ¿me puedo quedar? - no sé porqué salió esa frase desde mi cerebro, jamás le había pedido quedarme a dormir.<br />
- Sarah, hoy no es buena idea, y lo sabes. Sólo quiero verte tranquila y llevarte a casa. Y no me vengas con que ya estás tranquila.<br />
- Esta vez es de verdad, hemos dado carpetazo. Pero me besó, sonrío y después me dejó. ¿porqué me besó? - esa pregunta rondaba mi cabeza sin parar, no lo entendía.<br />
- Yo no te puedo contestar - volvió a sentarse y me agarró la mano - yo no estoy en su mente, no sé lo que ha pasado, pero si no te quiere esto es lo mejor,<br />
- ¿Lo mejor?, ¿lo mejor para quién?, no lo entiendo, es que no sé qué he echo mal. - y lo cierto es que me culpaba y no entendía nada.<br />
- Pues lo mejor para ti, no puedes decidir por Él, no puedes decidir a quién quiere, en un futuro lo verás de otra manera.<br />
- No me digas qué es bueno o no para mí, no es justo, no es justo, y no lo voy a entender. ¿sabes qué me ha dicho? que las cosas buenas le hacen dudar. - esa frase se repitió en mi mente demasiadas veces.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Yo siempre he dudado de las cosas malas - dijimos al unísono. Sonreímos, nos miramos y decidí que lo mejor era que me llevase a casa.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Escríbele, dile lo que sientes, dale un plazo, quizás tenga que pensar. - sentí que era la primera vez que comprendía por lo que Fabio había pasado todo este tiempo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Y así lo hice, le escribí, me bajé otra vez los pantalones, aparté mi orgullo y allí estaba yo, a punto de mandar el whatsapp más idiota de toda mi historia.</div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-style: italic;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Sé que no debería escribirte, y sé que me voy a odiar por esto, pero no lo estoy pasando nada bien, te quiero y te echo demasiado de menos. No te pido que me escribas. Ojalá pudiese volver al momento de ¿cómo te gustan los huevos? Hasta siempre</i></div>
<br />
<span style="text-align: justify;">Enviar ... (doble check)</span><br />
<span style="text-align: justify;"><br /></span>
<span style="text-align: justify;">Fabio arrancó el coche y me llevó hasta casa, me dejé caer en la cama y no pude dormir durante días.</span>
<span style="text-align: justify;"><br /></span>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-84372666523744548042017-06-27T02:56:00.000-07:002017-06-27T02:56:10.722-07:00Las cosas malas me hacen dudar<div style="text-align: justify;">
Llegué a su casa, abrí con delicadeza, me recreé un poco al introducir la llave y girarla, preveía que el final estaba cerca. Lo tenía bastante asumido, supongo que saber que era el preludio, me hizo pensar y relentecer mis movimientos. No quería olvidar esa última vez.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Dejé las llaves encima de la mesa, intuía que se iban a quedar allí, sin más. No llegué a descalzarme, ni a ponerme la ropa cómoda que tenía en su casa, guardada en un rincón de un cajón. Eso era lo que ocupaba en su vida, un rincón en un cajón. Imagino que siempre supe que ese trozo de cajón nunca fue mío, hasta las zapatillas eran para invitados.</div>
<div style="text-align: justify;">
No conseguí entrar más allá del comedor, me senté en una esquina del sofá; cansada de todo, agotada, logré dejar mi abrigo y mi bolso estratégicamente cerca de mí. Estaba preparándome para un adiós, y este iba a ser de los que dolían. Recogí la manta roja de Ikea que siempre estaba sin doblar encima del sofá, la doblé cuidadosamente y puse el mando de la TV justo encima; era mi rutina cada vez que llegaba a su casa. No toqué absolutamente nada más, por miedo a sentir más de lo debido. Seguí sentada esperando a que llegase.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Media hora más tarde entró por la puerta sonriendo, como si nada, dejó la chaqueta y el resto de cosas en el lugar de siempre; me sonrió.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Qué hacen aquí las llaves? - las cogió y las dejó justo en la otra mesa que se encontraba a mi lado; volvió a sonreír, se acercó a mí y me besó en los labios.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ah, es que no sé... - me quedé callada y miré hacia el suelo, cómo hacen los niños cuando saben que han hecho algo mal. Me sorprendió su reacción, esperaba alguna bronca, alguna mala cara, alguna explicación de porqué había estado borde todos esos días. Aquel beso me resultó esperanzador.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Cogí mi tabaquera con mi tabaco de liar, algo nerviosa, e intenté liarme un cigarro.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Anda toma uno - me acercó su paquete de tabaco, y me dio un cigarro.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Salimos al balcón, yo detrás, como un jodido perro faldero, no sabía exactamente a qué exponerme, por desgracia aquel beso me hizo pensar cosas que no eran.<br />
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- No sé qué pensar - inhaló otra calada.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Yo creo que sí, se lo que estás pensando, no alarguemos más esta discusión.<br />
- Sarah, no es una discusión, es que ... - y no consiguió acabar la frase.<br />
- Yo ya sé lo que quieres, lo has dejado claro muchas veces, yo también estoy cansada. Llevas días extraño, ausente, y de mala leche, ya te he pedido perdón - sabía que eso no era suficiente. Llevaba varios días sin escribirme, lejano, y yo ya sabía lo que eso significaba, me había pasado varias veces,<br />
- Por favor si me vas a dejar dímelo ya, no es necesario hacer esto más duro. - y no, no entendía que me hubiese besado, que me hubiese acercado las llaves de su casa nuevamente si me iba a dejar.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
Dí una última calada a mi cigarro y lo apagué en el cenicero.<br />
- Dímelo<br />
- ¿Cómo? - me miró extrañado<br />
- Qué me digas que me dejas, que no dejes las cosas a medias, que esta vez es para siempre. No quiero que me dejes pendiente de ti, de estar pendiente veinticuatro horas del móvil para ver si vas a querer volver o no. Necesito oírlo. - necesitaba escucharlo para zanjar un tema en mi vida, estaba cansada de sus idas y venidas, de pensar que me quería.<br />
- A ver - hizo una pausa dramática - es mejor que por ahora lo dejemos.<br />
<br />
Y mi mundo se desmoronó, dejó de tener sentido todo, dejé de pensar de forma clara y dije lo primero que se vino a mi cabeza, mi negra del Bronx habló por mí.<br />
<br />
- No vuelvas a escribirme, no vuelvas a hablarme, no intentes ponerte en contacto de ninguna de las maneras conmigo, esta vez es la definitiva. No quiero pasar por esto otra vez. Ahora sólo te digo una cosa, espero que no hagas cómo hasta ahora y alejes a la gente que te quiere de tu lado, es algo que haces habitualmente y no es justo para los demás ni para ti. </div>
<div style="text-align: justify;">
- Las cosas buenas me hacen dudar.- y se calló para siempre, no hubo más esa fue su última frase.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si no te importa me voy a sentar un momento - notaba que me flaqueaban las fuerzas, y que el aire no llegaba a mis pulmones. Debería haberme imaginado todo aquello, aquel beso sólo fue algo frío y fingido que dilataba en el tiempo lo que Él realmente quería.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Ya no podía más, le di la vuelta a la silla, me senté y arranqué a llorar; y cómo cuando arrancas una Vespa después de mucho tiempo sin usarla, me ahogaba. Deberíamos tener en cuenta que soy asmática y que lo de ahogarme está bastante a la orden del día .</div>
<div style="text-align: justify;">
Esperé una eternidad, quizás fueron segundos, a que por lo menos se dignase a consolarme. No fue así, cuando conseguí que mi dignidad volviese, y paré de llorar, levanté la vista. No estaba, se había ido al balcón a fumarse un cigarro, miraba a la calle en silencio, ni si quiera se dignó a mirarme.</div>
<div style="text-align: justify;">
Agarré el pomo de la puerta, y salí de allí como pude. No quise mirar atrás. Llamé al ascensor, entré y escondí la cara de zumbada que llevaba, no quería mirarme en el espejo. Me acerqué todo lo fuerte que pude a la barandilla del ascensor, no quería caerme y mucho menos que algún vecino me viese en ese estado. Al fin se abrió la puerta, y lógicamente, con la suerte que me caracteriza, allí estaba medio bloque esperando el ascensor. Me escabullí de aquellas miradas de extrañeza o lástima que me regalaban, y salí de aquel portal lo más rápida que mis piernas permitieron.</div>
<div style="text-align: justify;">
Recorrí unos metros, no creo que fuesen más de 10, me senté en un banco, arranqué de nuevo a llorar; es que la Vespa ya había arrancado antes, así que ahora era fácil que las lágrimas siguiesen su curso. Volví a pelearme con el bolso, joder qué de mierdas podemos llevar en el bolso, logré encontrar el móvil entre todo aquel amasijo de cosas inútiles. Si es que ya dicen que no hay nada más infinito que el bolso de una mujer. Busqué entre la lista de contactos el número de Ale como pude, dos tonos, y voila.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola <i>darling</i>! ¿qué haces? - tan <i>happy </i>como siempre, creo que ese era su saludo oficial al descolgar el teléfono.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Puedes venir a buscarme, por favor - tuve un deja vu, esto ya lo había vivido antes.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Dónde estás?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Es que, ... es que, ... sólo ven a buscarme - sí, de nuevo me puse a llorar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- A ver, pero ¿dónde estás?, no me cuelgues, no me cuelgues por favor.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No puedo estar aquí, puedes venir a buscarme a la estación, ya luego te cuento - por fin una frase seguida, eso sí entre sollozos.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pero ¿a qué estación?, a ver ... - escucho como se entrecorta la comunicación, joder.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola Sarah, vamos para allí, ¿dónde estás? - esa voz me sonaba, no se había perdido la cobertura, era otra persona la que había cogido el teléfono, la última a la que quería escuchar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Fabio?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí Sarah, ¿en qué estación te esperamos? - su voz sonaba amenazante, espació las palabras, su tono dejaba entrever que estaba más cabreado que una mona.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Me quedé callada, joder, no hay cosa que me de más rabia que darle la razón a alguien; pero en ese momento no estaba yo como para pensar mucho, y mucho menos andarme con remilgos.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- No sé, sólo quiero irme de aquí - conseguí pronunciar, este cerebro mío que funciona a ratos.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Media hora más tarde estaba sentada en la barandilla de fuera de la estación de Plaza Catalunya. Estaba helada, cansada, con todo el maquillaje corrido. Estoy segura que no se acercó nadie a robarme porque daba más pena que otra cosa; si hubiese extendido la mano, algún céntimo de algún guiri hubiese caído. Noté como una mano se apoyaba en mi hombro, eso hizo que me despertase y me alejase de esos pensamientos destructivos que rondaban mi mente. </div>
<div style="text-align: justify;">
Alcé mi cabeza y allí estaba, Fabio, mientras Ale desde el coche no paraba de gesticular, básicamente quería que nos diéramos prisa ya que no podía quedarse allí parado con el coche o le iban a multar. No hubo ninguna palabra, ningún mal gesto, absolutamente nada. Me condujo hacia el asiento trasero de aquel coche tan cómico; es que ese color azul pitufo llama la atención desde la Luna, y cerró la puerta tras de mí.</div>
<div style="text-align: justify;">
Ninguna pregunta, ninguna mirada, de nuevo, nada. Los dos se miraban y parecía que en silencio estuviesen teniendo la conversación más locuaz de los últimos tiempos. De vez en cuando dirigían su mirada al espejo retrovisor, imagino que para comprobar que no me había muerto.</div>
<div style="text-align: justify;">
Y allí estaba yo, cual niña de la mala tarde (niña de la película de Ring), con el pelo pegado en la cara, la mirada fija al suelo; vamos, que sólo me faltaba el camisón blanco y empezar a maldecir a la gente.</div>
<div style="text-align: justify;">
Después de lo que me pareció el recorrido más corto del mundo, y escuchar el freno de mano conseguí mover la cabeza y mirar por la ventanilla.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-62278523419979899932017-06-19T09:30:00.002-07:002017-06-19T09:30:43.539-07:00Presagios<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">El alma tenias</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">tan clara y abierta,</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">que yo nunca pude</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">entrarme en tu alma.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">Busqué los atajos</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">angostos, los pasos</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">altos y difíciles...</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">A tu alma se iba</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">por caminos anchos.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">Preparé alta escala</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">—soñaba altos muros</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">guardándote el alma—</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">pero el alma tuya</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">estaba sin guarda</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">de tapial ni cerca.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">Te busqué la puerta</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">estrecha del alma,</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">pero no tenía,</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">de franca que era,</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">entradas tu alma.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">¿En dónde empezaba?</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">¿Acababa, en dónde?</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">Me quedé por siempre</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">sentado en las vagas</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">lindes de tu alma.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: white; color: #39424d; font-family: "helvetica neue" , "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 16px;">(Pedro Salinas)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
Me levanté, otra mañana, como si de repente me diese cuenta que cada día es regalado, cómo si todo hubiese cambiado. Sí, en mi mente, la sensación era de que era un día que no me merecía, que no lo hubiese luchado.</div>
<div style="text-align: justify;">
Lo miré y sonreí, sus manos acariciaban mi pelo mientras veíamos una serie chorra de TV3 en su móvil, no sonreía porque algo me hubiese hecho gracia, la realidad era que sonreía porque Él estaba en ese momento, sin pedírselo, por vivir esos momentos con Él ¿cuánto me quedaba?, ¿cuánto tiempo iba a disfrutar de su compañía? mi cabeza iba a mil por hora.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿En qué piensas?</div>
<div style="text-align: justify;">
- En nada, ya sabes, ..., cabeza hueca, no pienso - pues claro que pensaba, pensaba en que se aburriría, en que no era su "chica ideal" en qué el tiempo iba en mi contra pero no iba a contárselo, nunca - Estoy bien.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Va Sarah dime qué piensas</div>
<div style="text-align: justify;">
- De verdad, no pienso en nada, estoy con la mente en blanco - porsupuesto que no, había pasado por esto antes en mi familia, había vivido esa sensación de no pensar en lo malo e intentar disfrutar del momenti.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si no me lo quieres contar, tú misma.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Y ahí se acabó nuestra conversación. Ojalá le hubiese podido decir que no podía con mi alma, que el cansancio me estaba comiendo, que de repente , me encontraba en una situación que no había pedido, que mi vida pendía de un hilo, que necesitaba de Él cada vez más, que quería quedarme a su lado, pero no, simplemente sonreí, me guardé toda mi mi mierda para mi, no se merecía sufrir más. ¿porqué tenía que pasar por esto? no quería que de repente se encontrase con una moribunda, ¿ qué clase de vida le iba a dar en un futuro? callé y lloré por dentro. Sabía que no iba a durar mucho mi "estado de bienestar" para qué iba preocupar a nadie, para que iba a prescindir de un amor verdadero, sólo iba a darle pena. Y el tiempo me iba a demostrar que así sería, que la vida es una hija de puta y no me iba a dar tregua alguna. <i>Ya sabes que va a ser así, disfruta del puñetero momento y deja de darle vueltas a esa neurona que a veces le da por funcionar. </i>Mi negra del Bronx a veces reaccionaba, aunque últimamente parecía que se apagase como yo, parecía la TV de la película de Poltergeist, funcionando cuando le daba la gana.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Me daba cuenta que poco a poco todo se iba acabar, incluida mi vida, pero ¿porqué no iba a disfrutarlo? ¿porqué no iba a quererlo?, ¿porqué tenía que morir sin saber lo que era querer a alguien incondicionalmente? .</div>
<div style="text-align: justify;">
Sé que en el fondo Él sabía que se aburriría yo no iba a ser la mujer que estuviese a su lado, no iba a ser nadie. Esa sonata se repetía cada día en mi cabeza, ¿y qué? en ese momento no me importaba.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
En ese instante sólo me importaba sentir, y vivir, ¿ y si no lo iba a vivir nunca más? ¿y si el mundo, para mi, se acabase hoy? Al menos he vivido el hecho de haberle estrechado entre mis brazos, haberle amado, haberle sentido, sentir ese silencio en el que de repente todo se detiene y sólo estábamos Él y yo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Diiiime - parecía cansado de esperar una respuesta.</div>
<div style="text-align: justify;">
- De verdad, estoy bien. - me di cuenta que no sonaba tan bien como yo quería, pero no importaba. Los últimos días yo ya había llorado mi muerte en demasiadas ocasiones, todas ellas sóla y dándole demasiadas vueltas a todo. Me había preguntado mil veces qué quería de mí, pero la respuesta era siempre la misma, y eso no me aliviaba.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Porque sigues callada y no me dices nada?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Porque te quiero - me salió del alma, porque lo más gracioso es, que no he querido a nadie como le he querido, porque darte cuenta de que te estás muriendo y que la persona que amas sabes que no te va a corresponder, es indescriptible, es como si cada día fueses al cementerio y cavases tu propio hoyo. </div>
<div style="text-align: justify;">
Siempre he querido verle en su vida perfecta, desde la lejanía, desde la nada, y saber que serví de algo en su vida, Que esa mujer de postín, no le cambiaría, y que Él tendrá derecho a pensar y opinar y no llevar una vida llena de convencionalismos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Me la he imaginado tantas veces abriendo la nevera y preguntándole qué querrá cenar, arropándole por las noches, besándolo con amor, planeando una vida juntos, y será del agrado de todos los que le rodean. Y juro que no es por masoquismo, aunque a veces me lo llegue hasta plantear yo misma, aún así, aunque le desee lo mejor, se me parte el alma, y jamás he podido soportar pensar en alguien acariciando su piel cómo yo lo hacía, Imaginar que otra me sustituiría en breve me minaba la moral. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Sí yo era efímera, y a veces en esas introspecciones a mi interior, me daba cuenta que a veces deseaba tener una vida cómo los demás. Pero mi reloj había tomado la iniciativa y el segundero iba más rápido de lo normal. <i>Tic-tac el tiempo corre y tu sólo piensas en gilipollces y sólo piensas en que te vas a morirte, pues sí como todos, aunque tu quizás un poco más rápido. Piensa en tu lista y empieza a hacer cosas. </i>Mi negra volvía a estar en mi mente.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Me despedí de Él con un abrazo eterno y un beso tímido en sus labios.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Nos vemos pronto - dijo sin mucho ímpetu</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si claro, nos vemos en un par de días - sonreí cómo pude, notaba como mi cuerpo desfallecía por momentos.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Cogí el móvil y escribí a Ale.</div>
<div style="text-align: justify;">
-Tenemos que hablar</div>
<div style="text-align: justify;">
Estoy muy cansada</div>
<div style="text-align: justify;">
Necesito día de relax y mimos</div>
<div style="text-align: justify;">
Pleaseeeeee</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Ale no tardó en contestar:</div>
<div style="text-align: justify;">
-Claro que sí princess</div>
<div style="text-align: justify;">
Estas bien?</div>
<div style="text-align: justify;">
Ya habéis vuelto a discutir?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Noooo de verdad</div>
<div style="text-align: justify;">
Es que estoy cansada en serio</div>
<div style="text-align: justify;">
Estas sesiones están acabando conmigo</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Por cierto Fabio te ha escrito?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- No, por?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues tenemos que hablar quizás he metido la pata</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Como?</div>
<div style="text-align: justify;">
Que dices ahora?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Quizás se me haya escapado un poco que has estado en el hospital</div>
<div style="text-align: justify;">
Tranqui que no le he dicho nada de lo de la radio</div>
<div style="text-align: justify;">
Pero sí que estabas en el Hospital</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Ale ya hablamos</div>
<div style="text-align: justify;">
Ya te vale</div>
<div style="text-align: justify;">
Joder, es que no puedes tener la boca cerrada</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Luego te llamo </div>
<div style="text-align: justify;">
Estarás encendida en llamas como el <i>Sinsajo</i></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-65710766819972531452017-05-27T12:32:00.001-07:002017-05-27T12:32:11.104-07:00Cosas pendientes<div style="text-align: justify;">
Era mi día libre, me desperté en mi cama, sola, abrí los ojos y miré el reloj, había dormido la friolera de cuatro horas. Me toqué el pelo y resoplé. Este es el ritual matutino que realiza cualquier persona que sufre de insomnio, puse un pie en el suelo, después el otro y el resto de mi cuerpo siguió por inercia a aquellos pies enormes. Para ser bajita uso un cuarenta, cuarenta y uno de pie. Fui al lavabo me lavé la cara y me miré al espejo, otra ves esa cara de autocomapasión apareció de la nada. Sacudí mi cabeza intentando borrar esa mueca, pero ahí estaba de nuevo la cara de perro abandonado. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Fui hacia la mesita, y ahí estaba el móvil con mil mensajes. Accedí al Whatsapp busqué a Ale.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola, qué haces?</div>
<div style="text-align: justify;">
Me he despertado y necesito terapia.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Respuesta inmediata</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Oído cocina!!!</div>
<div style="text-align: justify;">
Vienes tú a casa? </div>
<div style="text-align: justify;">
O voy a buscarte?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Voy yo no te preocupes</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí me preocupa</div>
<div style="text-align: justify;">
Dame 30 minutos y estaré en la puerta de tu casa</div>
<div style="text-align: justify;">
Vamos donde siempre?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Vale, o si prefieres vamos a otro sitio</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- No, no Buena Gente me parece bien.</div>
<div style="text-align: justify;">
Dame media hora darling</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
El Buena Gente es un bar perdido en las entrañas de L'Hospitalet de Llobregat, un bar extraño, oscuro y de color verde, lleno de plantas tipo ficus colgando del techo y paredes. Íbamos desde pequeños, era muy curioso, las mesas son de madera con un cristal transparente encima; en tu visita obligatoria, debías dejar escrito/dibujado algo en tu posa-vasos y dejarlo allí, debajo del cristal, entre otros dibujos/escritos de otros extraños que pasaron por allí. Si lo preferías podías dejarlo enganchado en la pared de corcho que cubría todo el bar. </div>
<div style="text-align: justify;">
Nosotros teníamos una mesa ya adquirida, era la del fondo, la de la esquina antes de entrar al lavabo, cada vez que íbamos dejábamos nuestro pedacito de historia allí. Era obligatorio. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Media hora más tarde, tan puntual como siempre, allí estaba el coche azul pitufo esperándome en la puerta. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Sube ya, anda - dijo Ale mientras me invitaba a subir con la mano.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
En una hora estábamos sentados en nuestra mesa, con una copa de cava para Ale y una cerveza sin alcohol para mí, entre los dos había una tapa de bravas, que por cierto en este bar están riquísimas.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Me vas a contar que te pasa de una vez?, Sarah, desde que hablaste con Fabio estás muy rara.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ale, me dolió mucho que hablaseis de mí a mis espaldas, creo que tienes la suficiente confianza conmigo cómo para decirme las cosas a la cara.</div>
<div style="text-align: justify;">
Odio que especuléis sobre qué pasa en mi vida, y me critiquéis, no tenéis nada mejor de lo que hablar ¿no?</div>
<div style="text-align: justify;">
- No empieces con esas tonterías, simplemente hablamos de cómo has cambiado, ya sabes cómo es Mr. Grey.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No sigas por ahí - dije mientras le señalaba de forma amenazante y daba un sorbo a mi cerveza sin alcohol.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, sí sigo por ahí, ya sabes que Fabio se preocupa por ti, y que no puede soportar ver cómo has cambiado - iba a contestar pero me interrumpió tapándome la boca - Espera, déjame acabar, no has sido capaz de decirle a nadie, ni si quiera a tu familia de lo que estás pasando. Sólo lo sabemos Él y yo; ¿y sabes qué? no es justo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Porqué no es justo? Porque te sale a ti de los huevos, no se lo voy a contar a Fabio. ¿sabes cómo se puso el otro día? Como un puto loco, me hizo sentir como una mierda.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No te dijo nada que tu no hayas pensado antes</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¡Ale! - alcé la voz - Ya sé que lo he pensado muchas veces, y eso me carcome por dentro, y me jode día a día. Pero lo del cáncer, vamos a dejarlo a un lado, no puedo decirle a Fabio que no se lo he contado hasta ahora. Es más, no se lo puedo decir, ¿sabes como se pondría?. Si ya le gustaría ponerme en una burbuja de cristal, imagínate si se lo cuento.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sólo se preocupa por ti, y ya se que sigue enamorado de ti. No puedes dejar de amar a alguien que lo ha significado todo para ti.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Lo sé, en el fondo le entiendo, yo no puedo dejar de estar encoñada de Él. Y o poder desengacharme va a hacer que al final me queme. </div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah - me cogió de la mano y me miró con lástima y cariño - cómo dices tú, mañana será otro día. Nadie puede robarte tu sonrisa.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Dejamos el tema a un lado, y hablamos de cosas banales cómo el trabajo, y el día a día, y últimos cotilleos de nuestros amigos y compañeros de trabajo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Cogí el bolígrafo y empecé a escribir en mi posa-vasos</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
COSAS QUE HACER ANTES DE MORIR:</div>
<div style="text-align: justify;">
1, Viajar a Tailandia</div>
<div style="text-align: justify;">
2. Besar a alguien en Toumbouctou</div>
<div style="text-align: justify;">
3. Dormir doce horas</div>
<div style="text-align: justify;">
4. Nadar con tiburones blancos en Nueva Zelanda</div>
5. Hacer la croqueta en una playa, tras haberme metido en mar cómo cuándo era pequeña<br />
6. Gritar "Te quiero"<br />
7. Ver la película Amélie en un cine antiguo de París<br />
8. Saltar en paracaídas<br />
9. Salir desnuda a la calle<br />
10. Hacer explotar un microondas con una cuchara de metal<br />
11. Volver a tocar la guitarra en público<br />
12. Tocar una pirámide en Egipto<br />
13. Observar una aurora boreal<br />
14. Pasar varios días en una isla desierta<br />
15. Tener un hijo<br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
Cogí una de las chinchetas de la pared de corcho y lo clavé el posa-vasos al lado de nuestra mesa.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- A ver qué has escrito, ... ¿Tener un hijo? ¿En serio? ¿Tú? - me señaló - ¿Qué me he perdido? - Ale me miró como si acabase de ver a un fantasma -</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, he hecho una lista sincera, con algunas de mis cosas pendientes, pues ahí están.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ya, pero ¿un hijo?</div>
<div style="text-align: justify;">
- No es por dejar un legado, odio que la gente se rija por unas normas, vamos que seas un coño productivo. Pero supongo que al ver tan de cerca la muerte, me he dado cuenta que me gustaría sentir que hay alguien que me quiere incondicionalmente, que ha crecido en mi interior, que ha sido parte de mí y que lo será. Que ese hilo que nos une no se romperá jamás. Por desgracia no sé lo que será sentir eso, pero puestos a soñar ¿porque no? - empezaron a brotar lágrimas de mi interior, empezaba a asumir que me iba a morir,</div>
<div style="text-align: justify;">
- No, no te hagas esto - Ale se acercó a mí, me abrazó y empezamos a llorar los dos. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Cuando pude respirar hondo y hacer que mis palabras no sonasen cómo el balbuceo de un bebé, volví a dar un trago de mi cerveza. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Ale, no me entiendes, no es que quiera ser madre, es que sé que no voy a poder serlo, estoy empezando a ver la muerte demasiado cerca. ¿Y si la radio no funciona?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Va a funcionar, tránquila - intentó consolarme-</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pero ¿y si no funciona?. No sabes las vueltas que le doy. Y sé que mi relación con Él no va a durar mucho, ya sabes que es una veleta. Se rallará me dejará, la historia de siempre. Estoy cansada de esto. Tendría que preocuparme más por luchar que por contentarlo. Y no sé cómo lo hago, siempre acabo posponiendo todo, aparcando todo y sólo pienso en Él.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues eso es lo que nos jode a todos, que el poco tiempo que tienes se lo dedicas a Él, y entiéndeme sé que lo quieres; pero no es justo para ti, ni para los que te queremos.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ves cómo no me entiendes, tú que cuándo te enganchas a un tío no existe el mundo, en serio, ¿me vas a juzgar?</div>
<div style="text-align: justify;">
- No es eso, por supuesto que en otra situación te apoyaría, pero ahora no, Porque sabemos que esto te va a destrozar, y éste no es el mejor momento.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ya sé que no es el mejor momento, pero, ¿qué hago? no puedo evitar quererle. Y si no está a mi lado siento que me falta el aire; es mis ganas de vivir.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No te equivoques, las ganas de vivir son las que tienes que sacar ahora, y las garras <i>darling</i>, que te queda mucho que luchar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Lo sé - miré nuevamente la lista, me quedan demasiadas cosas por hacer y tengo que luchar por mí. Ojalá Él estuviese a mi lado y ojalá no tuviese que aparentar estar bien, y dejarme caer en sus brazos.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Te falta un punto en la lista. Sacarte el carnet para conducir un coche - y de repente empezamos a reírnos a carcajadas</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
A veces olvidaba que esos eran los mejores ratos, en los que podía ser yo misma, en los que podía derrumbarme sin miedo. </div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-70755655256647665842017-05-19T12:55:00.004-07:002017-05-19T12:55:41.293-07:00Resiliencia<div style="text-align: justify;">
Resiliencia: La resiliencia es la capacidad para afrontar la adversidad y lograr adaptarse bien ante las tragedias, los traumas, las amenazas o el estrés severo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Iba camino a la segunda sesión de radio, me coloqué los cascos, enchufé el móvil y puse el volumen al máximo. La alarma de peligrosidad del volumen del móvil saltó: <i>"Escuchar a volumen demasiado alto durante periodos de tiempo puede dañar su audición. Pulse Aceptar para que se pueda aumentar el volumen por encima de los niveles seguros"</i> Por supuesto <i>Power </i>de <i>Helloween </i>sonó a todo trapo en mis oídos. </div>
<div style="text-align: justify;">
Me dirigí al Hospital, entré en el tétrico recinto sin bajar el volumen de mi música. Sentí que me iba a comer el mundo: <i>If I could Fly</i>, también de <i>Helloween</i>, retumbaba hasta en mi interior:</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: x-small;">No fear, no pain</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: x-small;">Nobody left to blame</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: x-small;">I'll try alone</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: x-small;">Make destiny my own</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: x-small;">I learn to free my mind</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: x-small;">Myself I now must find</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: x-small;">Once more</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: x-small;">Once more</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Ojalá fuese tan fácil dejar libre mi mente, pero en ese momento me sentía pletórica con la mente en blanco, no quería pensar en ello. Pasé mi tarjeta por el lector y esperé a que sonase mi nombre en la sala de espera.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Al salir de la sesión de radio me encontraba fatigada, cansada y mareada así que decidí mandarle un mensaje.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Puedo ir a tu casa?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
No sabía cómo iba a reaccionar pero estaba tan agotada que tan sólo necesitaba un poco de cariño y un abrazo, me encontraba débil y no estaba dispuesta a pensar demasiado en el motivo por el cuál, la primera persona que se vino a mi mente fuese Él. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Claro que sí</div>
<div style="text-align: justify;">
A que hora llegarás?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Llegué a su casa de forma mecánica, me limité a decirle que necesitaba descansar un poco en la cama, cosa que era completamente cierta. Él también estaba cansado del amargo de día de trabajo que había pasado. Así que nos tumbamos en la cama sin mediar una gran conversación. En seguida cayó rendido y cerró los ojos, mientras yo y mi cabeza íbamos a dos mil por hora. </div>
<div style="text-align: justify;">
Hubo un momento mientras dormía que se giró hacía mi y me abrazó de forma inconsciente; fue el único momento en el que creí que me quería.</div>
<div style="text-align: justify;">
Sentí que me amaba incondicionalmente que queda abrazo significaba algo, que aún estando dormido tenía la necesidad de estrecharme, sentirme y no dejar que me escapase de entre sus manos. Pero, no sé si habéis visto la serie de <i>Awkward</i>, a su lado siempre me sentía igual, pequeña, insignificante y buscando a un Matt como pollo sin cabeza.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Las palabras de Fabio resonaban en mi cabeza, no era nada para Él, un simple juego, un capricho, pero al mirarle agarrado a mí, pensaba todo lo contrario. Toda esa situación me resultaba absurda, resulta que siempre estaba a la defensiva y a expensas del debate de mi ángel y mi demonio interior. Tengo que admitir que siempre ganaba mi demonio, mi negra del Bronx tenía mucho carácter.</div>
<div style="text-align: justify;">
Quise apartar su mano y quería creer que no necesitaba, supongo que en el fondo, quería auto engañarme. </div>
<div style="text-align: justify;">
No era nada para Él. Sabía perfectamente que no pegábamos ni con <i>Superglue</i>. Éramos tan diferentes, un niño de la Bonanova y una punky zaparrastrosa; la noche y el día. Creo que hasta ahora nunca os lo había descrito, era el típico niño pijo: barbita de tres días que tanto me gustaba acariciar,era muy alto y muy guapo, como no. Tenía los ojos azules penetrantes, de esos que cuando te miran, hace que creas que estas completamente expuesta y desnuda. Tenía una sonrisa espectacular, esa media sonrisa que le salía de vez en cuando, mientras mordía su labio que tan loca me volvía. Un pecho en el que me gustaba apoyar la cabeza y dejar pasar el tiempo mientras el latir de su corazón penetraba en mis oídos. Manos fuertes y suaves, esas manos que sabían perfectamente como acariciar cada centímetro de mi cuerpo. Y yo, pues bueno, una chica morena, bajita, del montón, llena de piercings y tatuajes. Vamos la típica pareja de chiste. Sabía que el amor que le tenía no iba a ser suficiente, nunca iba a ser suficiente. Considero que se lo había comentado en infinidad de ocasiones sin hallar una respuesta coherente. </div>
<div style="text-align: justify;">
Al igual que yo no entendí, desde el principio, como un chico como él se ha fijado en alguien como yo, imagino que Él se debía hacer la misma pregunta a diario.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Era cierto, no era la típica chica que presentarías con orgullo a tus padres. Sospechaba que más bien yo era un trance en su vida, algo provisional y pasajero. Siempre he creído que he sido la chica transitoria.</div>
<div style="text-align: justify;">
Imagino que en parte le hizo más fuerte estar conmigo ,y de eso, sí que me tengo que sentir orgullosa. Me figuro que con los años, casado, con hijos y una mujer florero perfecta, se acordará de mí con nostalgia. Estará en la típica charla de amigotes un domingo por la mañana, sentado en una terraza tomándose unas cervezas, escapando de su idílica vida y recordando tiempos pasados; entonces Él diría algo así: cómo me acuerdo de aquella chica a la que me tiraba, ostia, ¿cómo se llamaba? follaba muy bien, pero ya sabéis la típica tía que sólo es de paso. (risas de complicidad)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Las palabras de Fabio me habían hecho mucho daño, no por lo que dijo, sino porque realmente yo me sentía así. Sentía que mientras estaba con Él, estaba viviendo una vida prestada. Algo que no me pertocaba; nunca iba a poder ser su rubia, chica florero, despampanante, con el celebro justo para combinar zapatos y bolso. No, no sería la rubia perfecta para crear una familia y vivir una vida maravillosa de cara a la galería.</div>
<div style="text-align: justify;">
Quise ser la persona que le hiciese pensar, y que lo hiciese ser él mismo, la persona con la que se desahogarse, con la que llorase, con la que sintiese. No, no iba a ser una vida fácil, habría millones de desavenencias, miles de discusiones, incluso por las pequeñas cosas como dejarse los botes abiertos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Pretendí que supiese que llorar delante de mí no era de ser débil, era una forma de enfrentarse a las situaciones negativas de la vida. Le amé como nunca he amado a nadie, pero todos sabemos que eso no es suficiente. No es la vida que él tenía prevista para sí mismo.</div>
<div style="text-align: justify;">
Alguna vez le dejé caer cómo me sentía, como creía que no pintaba nada en su vida y cómo, realmente, iba a ser una persona simplemente pasajera en su vida. Se lo tomaba a broma, a veces se enojaba, pero en el fondo, sabía que era mis palabras eran ciertas. Nunca iba a ser esa rubia perfecta, pero quería disfrutar de aquel momento. Ansiaba creer que me quería tal y como era.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Así que simplemente aproveché el momento, decidí dejar de pensar en lo malo; porque como decía mi abuela: si lo breve es bueno, dos veces bueno. Sabía que iba a ser algo fugaz, pero merecía la pena y tenía derecho disfrutarlo.</div>
<div style="text-align: justify;">
No sabía cuánto iba a durar lo nuestro, pero tampoco sabía cuánto iba a durar yo. Por lo que me aferré a esos momentos, intenté memorizar cada uno de ellos, no iba a dejar que se escapasen de mi memoria. Quería guardar cada beso en una cajita (cómo diría <i>Robe </i>de <i>Extremoduro</i>), por si alguna vez me veía cara a cara con la muerte, y así poder mostrarle que alguna vez me quisieron.</div>
<div style="text-align: justify;">
Deseaba poder memorizar cada abrazo, cada caricia, cada mimo, cada "te quiero", cuántas veces le rogué que me dijese te quiero, quería grabar a fuego cómo sonaba un te quiero de sus labios. Y es que en el fondo, muy en el fondo, una es blandengue y empalagosa como los osos amorosos.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Imagino que estaréis pensando dónde estaba mi negra del Bronx, en esos momentos la muy cabrona siempre estaba apagada o fuera de cobertura, aunque siempre había un ápice de su conciencia.</div>
<div style="text-align: justify;">
<i>¿En serio necesitas a un tío para esto?. Masturbate y recuerda las mejores pajas.</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Estaba exhausta, el agotamiento se estaba apoderando de mí, la radio le afecta a cada persona de una manera diferente, a mí, me afectaba en el cansancio, estaba molida. Además de mis pesadillas habituales, ahora me daba pánico dormirme, no quería dormir; cada vez que mis ojos se cerraban tenía la sensación de que esa iba a ser la última vez; dormir y no despertar. Seguía cagada de miedo pero no iba a demostrarlo.</div>
<div style="text-align: justify;">
No quería que Él se diese cuenta de lo que estaba pasando por mi cabeza. El miedo a la muerte es algo que dejamos aparcado, a no ser que empiece a pisarte los talones. No podía permitirme que eso me afectase delante de Él, yo siempre estaba bien. Esa ha sido mi excusa, siempre estoy bien, algo cansada pero bien.</div>
<div style="text-align: justify;">
Si me tenía que recordar quería que fuese como la tía que follaba de puta madre, no como la tía que se estaba ahogando en sus propios miedos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Así que gocé de cada momento con Él, como si fuese el último. Necesitaba tanto sus besos sus caricias. Esas caricias que hacían que se estremeciese todo mi cuerpo, esas que me hacían olvidar que estaba al borde del abismo y que me hacían sentir viva. Tenía que positivizar cada segundo, no quería irme con un mal sabor de boca.</div>
<div style="text-align: justify;">
A veces, uno se olvida que uno mismo, puede llegar a ser su peor enemigo. Hay que tomarse las adversidades de otra forma y aprender a ser resiliente.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-80711038131983273322017-05-13T06:43:00.000-07:002017-05-13T06:43:46.618-07:00Conversaciones en la Tercera Dimensión<br />
<div class="post-footer" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; background-color: white; color: #999999; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 13.5px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; line-height: 1.6; margin: 0.5em 0px 0px; orphans: 2; text-align: start; text-decoration-color: initial; text-decoration-style: initial; text-indent: 0px; text-transform: none; white-space: normal; widows: 2; word-spacing: 0px;">
</div>
<br />
<div class="post-body entry-content" id="post-body-7388509647717892553" itemprop="description articleBody" style="background-color: white; line-height: 1.4; orphans: 2; position: relative; text-align: start; text-decoration-color: initial; text-decoration-style: initial; text-indent: 0px; widows: 2; width: 578px;">
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
Son las tres de la mañana, estoy en la cama con mi sobrina durmiendo. Tras preparar los Reyes como buen Melchor que soy, y pasar una noche tranquila viendo como mi sobrina aún sigue siendo inocente, ... comienza a sonar mi teléfono. Asustada, corro a la mesita, con desespero, casi como si me faltase el aire. <i>Ha pasado algo, joder.</i> Mi cabeza empieza a volverse loca, joder, se me cae el móvil al suelo y creo que me va a dar algo, <i>joder estoy en casa de mis padres, todo está bien ... ¿Quién Coño llama a estas horas? </i>Por fin reacciono, estoy en casa, mis padres están bien, mi sobrina está bien. ¿Quién llama? Cojo el móvil del suelo como puedo, medio dormida y frotándome los ojos. Es Mr. Grey. Atino a darle al botón verde y acercó el teléfono a mi oreja</div>
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<br /></div>
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Joder, ¡qué susto me has dado! ¿Qué pasa? - consigo decir tras mi horrible despertar.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Podemos hablar? - consigue decir entre balbuceos.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Estás borracho? - consigo formular la pregunta, aunque más bien es una afirmación. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">Pero, ¿qué clase de imbécil llama a las tres de la mañana el día de Reyes borracho como una cuba? Esto me está superando, e intento calmar mis deseos irrefrenables de cometer un asesinato sin premeditación.</span><span style="font-size: 14.85px;"> </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- He bebido un poco, emmmm (pausa) estoy en la portería de tus padres. ¿Puedes bajar?</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">Se hace una pausa en mi cabeza, ya que intento no parecer una psicópata, o por lo menos que mi voz o mi contestación no suene a eso. Salgo de la habitación, dejo a mi sobrina tranquila durmiendo, la tapo con las sabanas, y voy a la cocina; allí tengo los cuchillos cerca.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Emmmm ... ¿Sigues ahí? ... Puede que no haya sido buena idea.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Puede? Pero, ¿se te ha ido la olla por completo? ¿En que coño estabas pensando?</span><span style="font-size: 14.85px;"> </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Necesito hablar, ¿puedes bajar o no? He estado hablando con Ale y creo que tenemos que hablar.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Buff, dame diez minutos.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;"><br /></span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
Consigo enfriar mi cabeza, aunque interiormente llevo un cabreo descomunal. Me hierve la sangre, y el enfado va creciendo a medida que me voy quitando el pijama, y voy vistiéndome para poder salir a la calle. Aún me estoy cuestionando el hecho de qué estoy haciendo, y porqué mis amigos creen que mi disponibilidad es de <i>open</i><i> 24 </i><i>hours</i><i>. </i>Sigo endureciéndome más, y mi cabeza va a explotar en cualquier momento de tanta sangre acumulada. Bajo las escaleras y lo veo plantado en la puerta. Abro la puerta de cristal con el mismo cabreo que llevaba cuando he cogido el móvil.</div>
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<br /></div>
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Se puede saber que coño le pasa a tu cabeza? - es lo primero que sale de mi boca, sin pensarlo, sin más, tan solo quería entender que le pasa a alguien para despertar a otro a las 3 de la mañana.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Tenemos que hablar, y creo que este es el momento ... Emmmm vamos a tomar algo, sabemos que hay algo abierto.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- No, no voy a tomar nada, pero, ¿qué poyas te pasa?, joder, ¿qué coño haces llamándome a estas horas borracho como una puta cuba? - creo que a veces digo demasiadas palabrotas. Sobretodo cuándo la sangre me hervía.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Es en serio, tenemos que hablar, Ale y yo hemos hablado y, ... esto no es, .... como lo dirías tu - sonrió - SANO. </span><span style="font-size: 14.85px;">Dijo cada letra de la palabra SANO como si le fuese la vida en ello.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Me cago en la puta, ¿qué coño quieres? y, Ale es gilipollas. ¿se puede saber de qué coño habéis hablado?</span><span style="font-size: 14.85px;"> </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Vamos a tomar algo tranquilos, tenemos que hablar de esto muy en serio - alzó su mano y acarició mi cara, el acto reflejo fue inmediato, alcé mi mano y aparté su mano de mi cara.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Te lo pido muy en serio, para, no quiero mas juegos ni mas tonterías, hablamos, tomamos algo y me voy. Eso si, tienes dos horas y no quiero escuchar gilipolleces - sentencié, estaba harta de escuchar tonterías, idioteces y a esas horas menos. Dirigí mis pasos al único garito que conocíamos que a esas horas estuviese abierto. Fabio me seguía, sus manos metidas en la americana y con cara de no haber roto un plato, mientras yo, solo pensaba en partirle la cara.</span></div>
<br />
<div dir="ltr">
</div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;"><br /></span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">Nos sentamos, pedí un par de copas, la suya por supuesto sin alcohol y tras sentarme en el sofá tan solo espeté</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Qué coño te pasa? No quiero escuchar escusas ni gilipolleces.</span><span style="font-size: 14.85px;"> </span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Emmmm te acuerdas de lo que el otro día dijo Rafa, respecto a tus ojos.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Se puede saber ¿qué coño os ha dado a todos por mis putos ojos? Joder, solo me veis triste, no os alegrais por mi - y de repente Ale vino a mi mente - ¿Qué te ha dicho Ale? Y no quiero tonterías, ni mentiras.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿De verdad quieres saber lo que pensamos todos? - cogió mi mano fuerte, sin darme tiempo a apartarla y me miro a los ojos. Tiré de mi mano y conseguí salvarla de una amputación.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">- Quiero saber lo que marujeais, ¡ya basta! - y grité como hacía años no hacía.</span></span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- No creo que te convenga encabronarte antes de saber que Ale no tiene la culpa, llevo tiempo sonsacándole algunas cosas, incluso mi hermano piensa lo mismo y ...</span><span style="font-size: 14.85px;"> </span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Tu hermano? Pero, ¿qué pasa?, ¿os aburría hablar del tiempo? Y hablar de mí a mis espaldas, sois patéticos. - deseaba mandarlos a todos a la mierda y cantarles las cuarenta a cada uno de ellos.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Puedes escucharme un segundo? No creas que nos dedicamos a criticarte - se revolvió el pelo y soltó un bufido desde lo mas profundo de su alma.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- A ver, imbécil, dime lo que tengas que decir, estoy harta de todos vosotros y sobretodo de ti, te crees que puedes .... Te crees que puedes meterme en una burbuja, que nadie me hable, que nadie me mire, que nadie pueda respirar cerca de mí. Pero es que no ves, que siempre la lías, por idioteces como que un amigo se acerque a darme dos besos. ¿Tú te crees que es normal lo de fin de año? - cogí carrerilla - Siempre hacéis lo mismo, y tú - lo señalé directamente a la cara - y tú deja de hacerte el superheroe por la vida.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- No sigas por ahí, te lo advierto - me interrumpió y su tono sonaba igual de amenazante que una madre con una zapatilla en la mano - si sigues por ahí vas a hacerme decir cosas que no quiero. - volvió a revolverse el pelo, sabía que estaba nervioso porque ese tic lo teníamos ambos.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">Me envalentoné, cogí la copa le di un trago largo y continué con el discurso: </span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Vaaaa dímelo, ¿no has venido a eso?, borracho, dime lo que tengas que decir y deja de hacerte el Mr Grey, sabes que eso no te funciona conmigo, dímelo, ¡va! - esta vez el tono más bien chulesco, era el mío.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Emmmmm, esto va a doler, pero tú lo has querido - volvió a sonreír, creo que lo odiaba con toda mi alma, esa sonrisa cínica, hacia que me enfureciera más - emmm aún no nos creemos que estés así, y yo mucho menos. Se supone que tenemos que creer qué, ... es igual</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Sigue - dije, aunque sabía que eso iba a doler y mucho, esas declaraciones no iban a ser fáciles de digerir.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- No me creo, que, ¿cómo lo vas a aguantar? En serio, ¿cómo lo vas a hacer? ¿Cuándo vas a salir corriendo? Sabes que no encajas en su vida y eres tú - nuevamente enfatizando y señalándome - la primera que crees que no encajas y que eres un capricho. ¿Qué vas a hacer cuando se aburra? Sabes que lo hará, ... No eres la típica mujer a la que alguien presentaría en una fiesta familiar . Lo sabes. ¿Sigo? ....</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">Enmudecí, no sabia que decir, realmente ¿quería escuchar mis peores miedos? Era tarde y no supe reaccionar.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Sigue.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">- Sabes que eres SU capricho, que no vas a ser nada mas allá que alguien que ha pasado. Aunque no lo creas, no vas a estar en su pensamientos para siempre. ¿Cuánto tiempo vais a durar? Tan solo te quiere en su cama y nada más, tú eres la primera que lo dices. - frotó nuevamente su frente, cada vez me parecía menos borracho - ¿Qué te está pasando? En serio, la señora fría ¿se ha enamorado? Y que harás ¿cuándo te de la patada? Llorarás a solas como siempre, no pedirás ayuda a nadie y,.... Y no apreciará una mierda lo que ha tenido. Joder ¿qué te ha hecho?</span></span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¡Vale ya!, te lo pido por favor, no me merezco esto, en serio. - me hice la fuerte y no solté ni una lágrima, pero sabía que todo eso lo había pensado, se lo había dicho a Ale y ahora salía de su boca, como mil puñales directos a mi corazón.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Voy a seguir, me arriesgo a todo lo que me puedas negar. ¿Crees qué te va a querer? ¿qué te quiere de verdad? Ni siquiera tú sabes lo que es querer a nadie, a decir verdad. Joder, cómo empezar con todo esto... No te voy a negar que en este tiempo no me he acostado con nadie, no te voy a mentir, pero....</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Qué mierdas quieres decirme? ¿Qué nadie me puede querer? ¿Qué no me merezco a nadie? Y, se puede saber, ¿qué coño me importa a mí a cuántas tías te has tirado?</span><span style="font-size: 14.85px;"> </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">- Por favor, escucha - volvió a cogerme del brazo - claro que te mereces a alguien, que te quiera como eres, eres .... Perfecta. ¿Quién no se iba a enamorar de ti? Escúchame, y ésta vez de verdad, te lo daría todo, absolutamente todo, sabes de lo que soy capaz. Nunca te ha visto mal, lo sé, ¿cómo va reaccionar? ¿Y tus ataques de pánico? ¿Y tus pesadillas?</span></span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Se pude saber a qué viene esto? - arrastre mi brazo, tan solo quería huir, y mire a mi alrededor.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿A qué viene? A que yo no aguantaría que te fueses con él, entiendo sus celos, yo estoy que ... Nunca has sentido esto por nadie, te has arrastrado por él ¿qué te ha hecho?</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">- Estoy cansada de tanta pregunta tonta, no me ha hecho nada, por una vez os podíais alegrar por mí. </span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">- Te tengo que contar la verdad; ofrecí buscarle trabajo a Ale porque sé que es lo mas importante para ti, y así poder arrastrarse con él. ¿No lo entiendes? ¿Sabes la suerte que tiene? Ojala pudiese echármelo a la cara y decírselo, porque vas a ser un juguete. Y por supuesto que voy a estar para recoger tus pedazos, pero no quiero que té haga daño. Sabes que te juré que jamas volvería a hablar de lo nuestro porque para ti, sabemos lo que fue para ti, pero para mi no. Y te lo daría todo, no dudaría un segundo. Lo que me pidieras, tan solo tendrías que abrir la boca y lo tendrías ... Dime algo, por favor.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;"><br /></span></span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
Callé, tan solo callé, me importaba muy poco las últimas palabras que salieron por su boca, tan solo pensaba en todos mis miedos. Era verdad, por mucho que le quisiera, ¿y si tan solo era un capricho? Y si .... Tantas cosas.... Tantos miedos. Quería salir corriendo. Es verdad que siempre he pensado que no soy la típica chica que nadie presentaría a sus padres, tampoco me gustaban esas situaciones, pero sabía perfectamente que no encajaba en su vida, eso lo sabía.</div>
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<br /></div>
<div dir="ltr">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">- Dime algo, no te calles, dímelo. Si quieres cancelar todo lo entenderé. Pero quiero que sepas que jamas te tocaría, lo sabes, ante todo sigues siendo mi amiga, y para mi es lo mas importante. </span><span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">Mírame - acarició mi mano nuevamente y la volví a apartar - no me alejes de ti.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">- Sois unos gilipollas y por supuesto os podéis meter vuestras opiniones por el culo. Os pensáis que todo en vuestras vidas es perfecto. Iros a la mierda, y tú el primero, me conoces, no necesito un guardaespaldas, ni que me compres. No entiendo a que viene esto, y a Ale, ya le vale, porqué ... me cago en la puta, ¿porqué te ha contado todo esto? Acaso pretendéis joderme la vida? - no pude contener la rabia, pero no alcé la mirada de la copa.</span></span><span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;"> </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">- Mírame, Ale no tiene la culpa, yo he estado sacando información tanto a él como a Sergio, y tampoco hay que ser adivino para saber que es lo que te da miedo, y ya sabemos de lo que hablo. Ale te ha visto llorar, y sabes que eres su punto débil. </span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;"><span style="font-size: 14.85px;">Tú, la que todo lo calcula, la que no cree en los sentimientos, y mucho menos en el amor, la que decía que todo es química, incluso hiciste el trabajo para la universidad, ¿te acuerdas?</span></span><span style="color: #333333; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;"> </span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Dios. - esta vez era yo la que revolvía mi pelo, me había hecho recordar - claro que me acuerdo de ese trabajo, y ya sé por donde vas, así que para de una puta vez. ¿Os creéis que no puedo enamorarme? - al decirlo me di cuenta que su mirada volvió a clavarse en mí.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Por fin, al menos esta vez lo escucho de tu boca - comenzó a jugar con su copa y su pelo - sólo espero que te deje jodida igual que tú lo hiciste conmigo, pero sabes qué, yo seguiré estando ahí.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- ¿Pero tu eres gilipollas? ¿Acaso te prometí amor eterno? Las cosas estaban muy claras, mira yo no puedo seguir con esta conversación. Dijimos que no volveríamos a hablar de ésto por tu bien, pero parece que te guste revolcarte en la mierda. Y eres un puto ruin, jamas he deseado que te hagan daño.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Solo quiero que veas lo que te va a pasar y evitarlo, entiendo que ahora me odies, que no quieras el viaje, pero piénsalo, ya te he asegurado que no te voy a tocar ni un pelo, ni nada por el estilo, sólo quiero enseñarte New York</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;">- Mira son las cinco y media y creo que ya es suficiente, ya basta, me voy. - sin mirarle me levanté de la silla.</span></div>
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-align: justify; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<span style="font-size: 14.85px;"><br /></span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="-webkit-text-stroke-width: 0px; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">Tan solo quería correr, cogí mi bolso, llevaba dos horas hablando de tonterías, mis peores miedos habían salido a la luz, como trapos sucios y dolorosos. ¿Porqué nadie podía alegrarse por mi?</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">Cogí mi bolso me dirigí a casa de mis padres sin mirar atrás, sin más, tan solo quería cambiarme, llegar a casa y no pensar. Pero, ¿y si tenían razón?, ¿y si mis peores miedos eran la pura realidad y me estaba auto engañando? Estaba realmente confundida, tan sólo recordar sus ojos y como me miraba, no podía y no quería estar sin él.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 14.85px;">Me di una ducha, volví a la cama, tenía cerca de 30 mensajes en el móvil, no quería mirarlos.</span></div>
<br />
<div style="-webkit-text-stroke-width: 0px; clear: both; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 14.85px; font-style: normal; font-variant-caps: normal; font-variant-ligatures: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
</div>
</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-1079367830870847462017-05-05T12:15:00.002-07:002017-05-05T12:15:25.637-07:00Demonios <div style="text-align: justify;">
Él:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah no empieces con tus "bucles"</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Soy yo quién decide </div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Hablamos mañana</div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Estoy cansado</div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Buenas noches</div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Cómo siempre, debía haber sabido leer entre líneas, Él era el que decidía, y el que iba a decidir todo. </div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Pero yo, en ese momento, no estaba dispuesta a hacerle pasar por todo este proceso, ni a Él ni a nadie. No era justo para nadie. Empezando por mí, no era justo para mí.</div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Mi orgullo, en parte, no permitía que Él pudiese decidir algo por encima de mí. Y el odio que sentía en ese momento hacía hacia la vida, tampoco me dejaba pensar con claridad. Así que simplemente contesté con un "buenas noches". No me apetecía discutir, estaba cansada y me metí en la cama.<br />
<br />
Me desperté entre llantos, el sudor frío volvía a recorrer todo mi cuerpo, y al abrir los ojos, no puedo gritar. Estoy paralizada, y aún noto como la voz no me responde. Comienzo a respirar poco a poco y mis manos empiezan a responder, es casi cómo si un hormigueo atacase todo mi cuerpo. <i>Otra vez, ¡no¡ </i>Siento aún la presión en mi cuerpo y sus manos en mi garganta, de nuevo ese hedor cubre la habitación y su voz aún retumba en mis oídos aterrorizándome.<br />
Me levanto en cuánto mis músculos responden por fin, y corro a la ducha, tengo que quitarme ese olor, y tras más de diez minutos frotándome y dejándo care el agua, consigo volver al mundo real; son las cuatro de la mañana.<br />
Consigo sentarme en el sofá, todo el cuerpo sigue temblándome, y de nuevo esos escalofríos, odio esa sensación. Necesito controlar la sensación. pensar en otra cosa. Quizás lea un poco, es lo que me evade de todo.<br />
Cojo mi libro electrónico, le pongo los cascos y mientras suena <i>Cada noche </i>de Marea, intento leer una página de algún libro que tengo a medias. Pero la cabeza me da vueltas e intento no pensar en nada, sólo quiero concentrarme en la lectura. Cierro los ojos, y mi pensamiento hace que vuelva a ver esos brazos cogiéndome, y esa horrible voz retumba en mis oídos de nuevo. Vuelvo a levantarme y enciendo una vela, un poco de incienso; a ver si así, además de perder un poco el tiempo, consigo eliminar el olor que invade la habitación.<br />
<br />
Hacía mucho tiempo que no tenía pesadillas, el sudor frío seguía recorriendo mi cuerpo, pero tenía que movilizarme, espabilarme e irme a trabajar.<br />
Era viernes y habíamos quedado, estaba ansiosa por verle, besarle, sentirle, pero no sabía como reaccionar. Quería alejarle, y a la vez no me quería separar nunca de Él. Esas sensaciones encontradas, me tenían mareada.<br />
<br />
Vibró el móvil y un <i>buenos días </i>hace que evada cada uno de mis malos pensamientos, sólo quiero pensar en esa tarde, habíamos quedado para tomar algo. Una sonrisa se dibuja en mi rostro, pensar en Él ocupaba toda mi mente, pensar en su sonrisa me tranquilizaba. A pesar de todos mis miedos, pesadillas y la mala noche que había pasado, decidí sacar lo mejor de mí.<br />
Me maquillé un poco, necesitaba aparentar buena cara, no podía permitirme el lujo de qué pensara qué me encontraba mal.<br />
<br />
Lo vi entre la muchedumbre, me acerqué y le miré a los ojos, esos ojos en los que me perdía tan fácilmente. Una sonrisa infantil, volvió a dibujarse en mi cara, revolví mi pelo, es tic que desvelaba lo nerviosa que me ponía. Se agachó y me besó. Adoraba esos besos castos, los echaba de menos.<br />
<br />
- ¿Qué tal estás hoy? - dijo mientras acariciaba mi barbilla.<br />
- Mejor, no he dormido muy bien, pero estoy bien - y el premio a la mejor actriz es para (redoble de tambores) ¡Yo!<br />
- Vamos a tomar algo, ¿no?<br />
- Sí, me apetece mucho - lo cierto era que sólo necesitaba sentarme, sentía que estaba arrastrando mi cuerpo.<br />
- Vamos.<br />
<br />
Me cogió por el hombro, y fuimos a un bar cercano a tomar algo, voy sonriendo mientras caminamos juntos, estaba completamente idiotizada. Tenía aliens en el estómago y estaba a punto de vomitar arco iris. Me sentía como en los anuncios de compresas, libre, feliz y con ganas de comerme el mundo. Mis miedos se desvanecían cuándo estábamos juntos, todo aquel aura negra que me había perseguido durante todo el día, se había ido con un soplido.<br />
<br />
- Va, cuéntame, ¿cómo estás realmente?. Se te ve cansada<br />
- Que va, estoy genial, te echaba de menos<br />
- Pues no lo parecía, tú y tus bucles. Sarah, es que siempre te lías. Haces que todo parezca malo.<br />
- No es eso, es que se me hace muy complicado pensar en todo esto, y que pases por esto,...<br />
- No es justo ¿no?. Tendré que decidir yo, lo que quiero hacer, te anticipas, y piensas por mí. Sabes que no me gusta nada.<br />
<br />
En parte tenía toda la razón, pero no se la iba a dar. A su lado todo parecía tan fácil, hasta superar un cáncer parecía posible. Me estaba aferrando a Él, cosa que creía que iba a ser contraproducente, siempre tenía esas dos sensaciones a su lado. Le había perdido tantas veces que pensar en agarrarme a Él, era cómo pensar en tirarme de un puente con una cuerda de dos milímetros atada a mis pies; una misión suicida.<br />
<br />
- Ya, bueno no tengo ganas de hablar de esto ahora.<br />
- Y ¿cuándo lo vas a hacer?<br />
- El lunes tengo radio, no tengo ganas de hablar de esto. Ya sabes si no piensas, no duele.<br />
- ¿Quieres otra? - dijo alzando la copa de cerveza vacía<br />
- Claro que sí, ya pido yo.<br />
<br />
Mientras bajaba las escaleras de aquel bar, y me dirigía hacia la barra, sentí que era feliz. ¿porqué no podía disfrutar de esos momentos?. La respuesta era clara, la muerte me estaba pisando los talones.<br />
<br /></div>
</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-4463209363361730812017-04-28T03:33:00.000-07:002017-04-28T12:14:45.540-07:0015 minutos<div style="text-align: justify;">
Quince minutos es lo que dura la sesión de radioterapia externa. Los efectos secundarios van desde el cansancio, que es lo más habitual, hasta el posible vómito, tos, dificultad al tragar, irritación de la piel del seno parecido a una quemadura; y lo más importante, posible endurecimiento de las arterias del corazón.</div>
<div style="text-align: justify;">
A tener en cuenta que nací con problemas en el corazón, eso me preocupaba bastante, correr más riesgos y tener un posible ataque de corazón, me tenía un poco en vilo.</div>
<div style="text-align: justify;">
La oncóloga me miró nuevamente muy seria.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Tienes alguna pregunta sobre el tratamiento?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Enmudeci, tenía mil millones de preguntas, pero me había quedado en blanco. Por supuesto mi negra del Bronx debía estar parajeando de nuevo en alguna parte de la cara oculta de la Luna.</div>
<div style="text-align: justify;">
Tan sólo agache la mirada e hice un gesto de negación con la cabeza.</div>
<div style="text-align: justify;">
Volvió a mirarme como mira un médico, cómo si todo aquello fuese normal y no tuviese que preocuparme por nada.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si necesitas ayuda, podemos darte cita con el psicólogo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No, no, estoy bien - y una mueca similar a una sonrisa temblorosa se apoderó de mí.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No es necesario que te hagas la fuerte aquí - señaló el cubículo al que ellos llaman "sala" - ¿has hablado ya con alguien de esto?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si, sí, todo está bien</div>
<div style="text-align: justify;">
- Empiezas la semana que viene. En principio, el tratamiento será de dos meses con una sesión semanal. Es indoloro como te he comentado.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Estoy bien, de verdad.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Me levanté, suspiré profundamente, y abrí la puerta con sumo cuidado. Giré el pomo a cámara lenta y salí de nuevo a la sala de espera. No pude mirar a nadie a la cara, todos eran enfermos como yo, esperando malas noticias. Estaba en proceso de asimilación. Realmente estaba pasando, tenía cáncer y empezaba el tratamiento en unos días.</div>
<div style="text-align: justify;">
¿Cómo debía reaccionar? No iba a llorar, no me lo podía permitir. Salí del hospital en plan zombie, pero como en la película <i>28 semanas</i> en la que los zombies corren. No quería pasar más tiempo cerca de aquel hospital . Miré el móvil.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Mama:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Qué te ha dicho el médico?</div>
<div style="text-align: justify;">
Vienes a comer?</div>
<div style="text-align: justify;">
(Emoticonos)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Nada, mama, visita rutinaria. Todo bien.</div>
<div style="text-align: justify;">
No, hoy no voy</div>
<div style="text-align: justify;">
Nos vemos mañana</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Ale:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Te voy a buscar?</div>
<div style="text-align: justify;">
Sé que me has dicho que hoy no querías ver a nadie. Pero si lo necesitas, cuenta conmigo.</div>
<div style="text-align: justify;">
Darling, siempre voy a estar</div>
<div style="text-align: justify;">
Vente a casa si quieres</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Tranquilo, estoy bien.</div>
<div style="text-align: justify;">
Empiezo la radio el lunes</div>
<div style="text-align: justify;">
Es indolora</div>
<div style="text-align: justify;">
Todo ok (emoticono)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Él:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Bon dia</div>
<div style="text-align: justify;">
Qué tal ha ido todo?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Bien</div>
<div style="text-align: justify;">
Empiezo el lunes con la radio</div>
<div style="text-align: justify;">
Ya te contaré</div>
<div style="text-align: justify;">
Estoy bien (emoticono)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Fabio:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola petarda</div>
<div style="text-align: justify;">
Que haces hoy?</div>
<div style="text-align: justify;">
Café y brownie?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Holaaaaaaaa</div>
<div style="text-align: justify;">
Hoy no, tengo cosas que hacer</div>
<div style="text-align: justify;">
Hablamos</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Diez mensajes chorras de grupo que no merecían prestar la más mínima atención. Me dirigí al metro como un autómata. Cogí el móvil, enchufé los cascos y le di al <i>play</i>. No quería pensar, pero casualidades de la vida ahí estaba HIM con su <i>Join Me In Death. </i>Ridícula casualidad, al escuchar la parte de la canción en la que dice: <i>Won't you die</i>, se revolvieron mis tripas. ¿en serio no iba a morir?</div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Es sólo un tratamiento, no te ralles. </i>Mi negra del Bronx había vuelto, pero no era consuelo, la ironía y el sarcasmo no me iba ayudar en ese momento. Tan sólo quería encogerme, meterme en un agujero y gritar. Y gritar ¡¿por qué yo?!</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Tragué saliva, respiré, respiré tan hondo como pude y expiré, como si con mi aliento se fuesen todos mis dolores de cabeza. Pero no era así, estaba a punto de explotar y empezar a llorar. Tragué saliva, y mi boca empezó a temblar, sin hacer caso a mis órdenes. Por un momento sentí que volvía a olvidar cómo respirar. Después de todo lo que había pasado en mi vida, esto no me podía hundir. No podía consentirlo. Pero ahí estaban mis lágrimas recorriendo mi cara a su libre albedrío, saqué un pañuelo del bolsillo; esta vez mi mente había recordado que tenía uno a mano, y me sequé la cara cómo pude. No quería que nadie me viese así; no quería la lástima ni la pena de nadie; ya me bastaba yo sola. Me coloqué las gafas de sol, y me dirigí a la playa; no sabía cómo había llegado hasta allí pero mi inconsciente me había dirigido allí.</div>
<div style="text-align: justify;">
Me senté en la arena a pocos metros de la orilla, me descalcé, dejé las deportivas a un lado. me quité los calcetines como pude y los coloqué dentro de las deportivas. Me levanté, me arremangué los pantalones hasta la rodilla y caminé hacia el mar. Sentí el agua helada en mis pies, y un escalofrío recorrió todo mi ser, apreté los puños de rabia. Estaba enfadada con el universo, no entendía porqué tenía que pasar por todo ese proceso. Miré al cielo, cosa que no me consolaba, era atea, si me moría sabía que no iba a pasar nada, no iba a ir a ningún lado. Sentía que se me estaba escapando el tiempo entre los dedos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Me alejé del agua, y me tumbé en la arena, sentí que se estaban acabando mis días. ¿estaba siendo una cobarde? Y entonces, la fuente empezó a brotar, empecé a llorar cómo si no hubiese un mañana. Imploré al universo, internamente, un poco más de tiempo, quería existir, deseaba seguir teniendo sueños de futuro; pero ahora mismo lo más cerca de planes de futuro era pensar que me encontraba en una misión suicida. batallar contra la muerte. Estaba agotada mentalmente, no era justo, La vida debería premiarme, no joderme cada día más. Necesitaba un abrazo, un: tranquila todo va a salir bien; pero allí estaba yo, sola y quemando esos segundos valiosos. Estaba completamente segura que no iba a pedir ayuda y que iba a acabar pasando por todo aquello sola.</div>
<div style="text-align: justify;">
Dejé la mente en blanco, y me dejé envolver por la arena, había pasado más de media hora cuándo empecé a notar que otras gotas frías estaban mojando mi cuerpo, había empezado a llover. Estaba empapada, necesitaba que ese agua limpiase todo lo malo que sentía en ese momento, así que no hice ni el intento de levantarme. Cuando el frío se apoderó de mi cuerpo, mi cerebro reaccionó y dirigió mis pasos hacia casa. Miré de nuevo al mar, tiritando, clavé mis pupilas en el horizonte, la pena se tenía que ahogar en esa playa, volví a respirar profundo y volví a mi ser. </div>
<div style="text-align: justify;">
Llegué a casa chorreando, fui al lavabo, encendí la ducha, me desnudé, dejé la ropa mojada tirada en el suelo. Estaba asqueada, cansada, abatida, derrotada, dejé de nuevo que el agua me recorriese.</div>
<div style="text-align: justify;">
Cogí la toalla y rodeé mi cuerpo con ella, agarré el móvil, no quise mirar ningún mensaje. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Le echaba de menos, necesitaba su boca susurrándome al oído, necesitaba un abrazo de los que curan, quería quedarme en posición fetal apoyando mi cabeza en sus rodillas mientras acariciaba mi pelo y desahogarme. Pero no iba a pedirle ayuda, no iba a rogarle que me cuidase, no iba a suplicarle que me quisiese, no quería mendigar su afecto. Deseaba poder sincerarme y decirle que si tenía que morir, quería morir a su lado, que estaba cagada de miedo, que no entendía nada y que mis alas se habían roto y que dependía de las suyas para volar; que quería vivir, que esta lucha estando sola iba a destrozarme, que había dejado de ser la dueña de mi destino y dependía de que unas sesiones de radio saliesen bien. Pero no iba a hacerlo.</div>
<div style="text-align: justify;">
Nunca he sabido pedir ayuda, en eso nos parecíamos demasiado. En cuánto precisaba de Él, lo alejaba de mí. </div>
<div style="text-align: justify;">
Saber que me creaba una dependencia me daba pánico, jamás había notado esa sensación y me asustaba. </div>
<div style="text-align: justify;">
Directamente abrí su chat y decidí escribirle con las pocas fuerzas que me quedaban, los demonios del miedo se habían apoderado de mí.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Creo que no es justo que pases por esto</div>
<div style="text-align: justify;">
Lo siento </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-44186764578264960152017-04-23T15:46:00.002-07:002017-04-28T02:43:30.064-07:00Camino, camino, y no levanto el vuelo<div style="text-align: justify;">
Miré el movil nuevamente, pero no sabía por dónde empezar. si contestarle a Él o empezar de cero. Levantarme del suelo, vivir y soñar y olvidar todo lo que tenía detrás. Pues por un momento pensé en mí y pensé en vencer a la gilipollez de sentir hormigas carnivoras en la boca del estomago y vomitar arco irirs.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ir a Nueva York petardo?</div>
<div style="text-align: justify;">
Esto se lo debías enviar a otra y te has equivocado, jejeJe</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah</div>
<div style="text-align: justify;">
Sabes de sobras que no me he equivocado, quiero que vengas a conmigo</div>
<div style="text-align: justify;">
No va a pasar nada, vas a estar mi lado</div>
<div style="text-align: justify;">
He olvidado respirar<br />
<br />
Sabía lo que significaba, Fabio me había visto en mis peores momentos y de verdad, existió un día en el que olvidé respirar, me cosí los labios, y decidí borrar todo aquello hace mucho tiempo; pero por un momento, sentí como un beso de los suyos, de los que no buscan sexo, de los que no buscan nada reciproco recorría mi cuerpo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Cómo cuándo das un beso bajo el agua</div>
<div style="text-align: justify;">
no?</div>
<div style="text-align: justify;">
Va anda gili</div>
<div style="text-align: justify;">
Que no te dejo atrás.</div>
<div style="text-align: justify;">
Que sigo aquí</div>
<div style="text-align: justify;">
Que no la voy a palmar</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Mierda, haciendo estas bromas a diario con Ale me sentia segura, pero con Fabio no, sabía que hasta el dolor de molestar, lo sentía. Me había dejado de hablar por tantos momentos, ... por eso, por no molestar. No quería que la pena ahogara a nadie. Sí, me tenía que morir, como todos. Antes o más tarde, el tiempo no se detiene para nadie. Pero Fabio, de alguna manera, no lo merecia.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Esto no tiene gracia, anormal</div>
<div style="text-align: justify;">
Ya hablaremos</div>
<div style="text-align: justify;">
Haz caso a los putos mensajes</div>
<div style="text-align: justify;">
Sabes que no hay cadenas</div>
<div style="text-align: justify;">
Pajarito</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Bufff, leer "pajarito" de sus labios, o de sus letras como se quiera llamar; era lo peor que me podía pasar, sabía que tenía que respirar profundo y por un momento, salir de mi cascarón . ¿Dejar que se enterase el mundo que tenía sentimientos? <i>Y un huevo </i>Mi negra del Bronx no me iba a dejar caer. Ni de broma. estaba callada cuamdo le salía de las pelotas, pero hoy no.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Fabio:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Una sola palabra me basta</div>
<div style="text-align: justify;">
Vente</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Seguí pensano en ello, ¿y si empezaba de cero? ¿Y si Fabio era mi mejor opcion? <i> ¿Hola? Si no os soportais ni cinco segundos. Mejor estar sola.</i></div>
<div style="text-align: justify;">
Me conformaré con no verle, con saber que aunque no quiera, es parte de mi vida, pero Fabio siempre cuidaba de mí. Aunque fuese una anormal y no pensase, aunque la negra del Bronx estuviese apagada. Siempre pensaba en mí, en lo mejor para mí, sé que él me quería, a su manera. Pero yo era así. Gilipollas, tal cual.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Que dices ahora de irme a New York ni que fuese tu putilla</div>
<div style="text-align: justify;">
jajajajaja</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Imbécil, vente, de verdad, te necesito</div>
<div style="text-align: justify;">
Sarah te lo he dicho muchas veces</div>
<div style="text-align: justify;">
Ya sé que estás con Él</div>
<div style="text-align: justify;">
Pero vente conmigo</div>
<div style="text-align: justify;">
No va a pasar nada</div>
<div style="text-align: justify;">
Ya sabes que hay otra habitación</div>
<div style="text-align: justify;">
Pero vente</div>
<div style="text-align: justify;">
Déjalo todo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Por una vez sentí que no sabía que decidir, lo malo, lo bueno, lo malo y lo bueno. Decidí escribirle a Él.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si me fuese a New York un mes</div>
<div style="text-align: justify;">
Que pasaría?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Respuesta a los 5 segundos</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Cómo?</div>
<div style="text-align: justify;">
Qué me estás contando</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Intenté ser buena persona y vencer a todos mis sentimientos encontrados.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues he intentado cambiar de vida y todo lo que viene ahora</div>
<div style="text-align: justify;">
si me fuese ahora</div>
<div style="text-align: justify;">
que pasaría?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
¿Tú que esperarías? Pues que dijese que no, que lo habíamos arreglado hace dos días y que no podía vivir sin mi. Lógicamente eso no iba a pasar, no me iba a necesitar, no iba a decirme: quédate.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Él:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues haz lo que quieras</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Mis dudas empezaban a crecer, no sabía si realmente me quería, si le tenía un poco más, si esos minutos que pasamos juntos eran reales. Si la conversación que tuvimos había ido más allá, si aquel beso fue real.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Por favor dime algo</div>
<div style="text-align: justify;">
No sé que hacer</div>
<div style="text-align: justify;">
De verdad</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Es gilipollas, tánto cuesta decir, TE QUIERO, quédate aquí y que necesito hasta los suspiros cuándo duermes. </i></div>
<div style="text-align: justify;">
Pero por supuesto no iba a volver a buscarme.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Haz lo que quieras</div>
<div style="text-align: justify;">
No me pidas que diga que quiero que te quedes</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Pues por supuesto, no iba a poner de su parte. Pídemelo, pídeme la luna, el mar, el olor a buenos días y te lo doy. Pero no, todas las dudas que necesitaba aclarar, ahí seguían. Y como siempre, ahí estaba yo, sóla. Preferiendo que el mundo se acabase.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Vale</div>
<div style="text-align: justify;">
No te voy a pedir nada</div>
<div style="text-align: justify;">
No te pido que me pidas nada</div>
<div style="text-align: justify;">
Pero necesito que me digas algo</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Haz lo que quieras.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Y me quedé blanca, sin pensar, se acabó todo, ¿de verdad querí avolver a empezar? ¿Quería irme a NY? ¿De quién necesitaba los besos?</div>
<div style="text-align: justify;">
¿Tan difícil era amarme?, ¿decirme que necesitaba que me quedase?. Sentí que me había vuelto a equivocar. Nunca me viniste a buscar realmente. Esperaste a que yo te pidiese y te suplicase tu amor.</div>
<div style="text-align: justify;">
Esa era lo que debía haber hecho. Vivir. Irme a NY. Pero no, me sentí mal. Sentí que mi vida estaba su lado. ¿A mi lado?, nunca estaba a mi lado.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Pero eso es lo que iba a vivir de aqui en adelante.</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-45088904282071152882017-04-14T15:37:00.003-07:002017-04-14T15:40:15.803-07:00New York, la ciudad que nunca duerme<div style="text-align: justify;">
Volví a desbloquear el móvil, busqué en mis notas y ahí estaba una de las últimas notas que le había escrito, y que nunca envié. Las guardaba para recordarme a mí misma porque no debía volver a caer. </div>
<div style="text-align: justify;">
<i><br /></i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Quisiera decirte tantas cosas, y no me sale ninguna. Espero que estés bien, imagino que lo estás. Te quiero odiar y no puedo, supongo que es cuestión de tiempo, creo que estarás bien, que te importa todo un "carajo" y que ya te has buscado sustituta jeje, la otra de la que tantas bromas hacíamos. Pero encontrarás a alguien porque te mereces ser feliz. No puedo imaginarte con nadie, porque no lo soporto. Te he querido, es más te quiero como no he querido a nadie, y no ha servido de nada. No te culpo de nada, ni mucho menos; nunca me has querido y eso es lo que me hace seguir adelante, saber que no me quieres y que de tus labios escuché pocas veces un te quiero, y por compromiso.</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Que por una vez en mi vida me equivoqué, bajé muros, dejé que alguien entrara para nada, me has enseñado que no merece la pena luchar, porque nadie ni nada merece la pena. </i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Me pedias que estuviese a tu lado, y tu nunca estuviste al mío. Tenía tantos planes... oirte decir "mejor lo dejamos" creo que ha sido lo mejor y lo peor de mi vida. </i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Lo mejor porque me he dado cuenta que nadie merece que abra mi corazón, que estaba mejor antes de ese roce de manos y ese primer beso, hace tanto tiempo; lo peor ha sido pasar por esto; porque es como si nunca hubiese existido, como si este tiempo, no mereciese la pena.</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Mi abuela decía que siempre deberíamos arrepentirnos de lo que no hemos hecho, no de lo que hemos hecho. Hoy me arrepiento de haberte conocido, nada me ha hecho tanto daño, ni si quiera saber que tengo cáncer porque lo he arrinconado en una de mis carpetas olvidadas en mi cerebro.</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>He soñado tantas veces con el hecho que me dijeses ... este es tu hueco en mi vida, tu armario, quiero una vida juntos... Sólo pedía eso, que me dejases entrar en tu vida. Espero que alguien lo consiga.</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Pides que alguien esté en tu vida pero como tú quieres, esto no funciona así.</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i><br /></i></div>
<div style="text-align: justify;">
Sentí que me faltaba el aire, que casi me ahogaba, ¿iba a llorar otra vez?. Sacudí mi cabeza, volví al lavabo y lavé mi cara con agua fría, casi congelada, como si ese agua purificase todo lo malo que estaba sintiendo en ese momento. Encendí la música del móvil y puse un random de Iron Maiden; sonó <i>The Trooper, </i>dejé de pensar y empecé a maquillarme. Dos quilos de corrector para tapar mis ojeras negras, un poco de base para tapar mis pecas, colorete, máscara de pestañas, colorete y un labial borgoña. Me miré al espejo otra vez, esta vez con detenimiento, como si quisiera parar el tiempo. <i>Espabila o llegarás tarde Looser. </i> ahí estaba mi negra del Bronx que tanto había echado de menos estos días.</div>
<div style="text-align: justify;">
Salí corriendo cómo todos los días, con prisas, siempre voy con el tiempo pegado en el culo. Cogí el metro y me dirigí al trabajo. El móvil vibró un par de veces, pero decidí ignorarlo por completo, estaba cantando interiormente <i>Can I Play With Madness, </i>y no me apetecía pensar demasiado, ni leer ningún mensaje, ni notificaciones de aplicaciones absurdas.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Llegué al trabajo, corriendo, como no, mientras <i>Fear of the Dark</i> me daba ritmillo para llegar a tiempo. Pasaron las horas y a la hora del desayuno por fin miré el móvil, más que nada porque tenía veinte whatsapps, y algunos de ellos eran de mi madre; que desde que sabía usar el móvil cada día tenía la necesidad de recibir noticias mías.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Mama móvil:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola princesa cómo estás hoy?</div>
<div style="text-align: justify;">
(Emoticonos)</div>
<div style="text-align: justify;">
Yo ahora me voy a trabajar, cuándo puedas me dices cómo estás y si vas a venir a comer, y a que </div>
<div style="text-align: justify;">
hora llegarás. </div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola mama, estoy bien, llegaré a las cuatro (emoticonos)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Él:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Buenos días</div>
<div style="text-align: justify;">
Cómo estás</div>
<div style="text-align: justify;">
- Buenos días, bien, mucho curro.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Estaba deseando que me dijese aquel buenos días, porque era cómo empezar de nuevo, cómo si al escribirme buenos días, se acordase de mí. Ese buenos días, era algo más que dos palabras. Por lo menos para mí, era algo más; pero en mi cabeza no dejaba de rondarme todas las palabras de aquella nota que me auto escribí, ya que nunca fui lo suficientemente estúpida como para enviárselo en forma de mensaje; si lo hubiese hecho, me hubiese sentido vulnerable y estúpida. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Fabio:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah</div>
<div style="text-align: justify;">
No empieces, sé que lo has leído, contesta</div>
<div style="text-align: justify;">
No te quiero agobiar y lo sabes</div>
<div style="text-align: justify;">
Sólo quiero verte y charlar</div>
<div style="text-align: justify;">
Ya te he dicho que no voy a tocar el tema.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Estoy trabajando, luego hablamos.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Ale:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Quedamos cuándo salgas?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, así me haces el favor y me llevas a casa de mi madre</div>
<div style="text-align: justify;">
Te quedas a comer con nosotras?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, te espero cuando salgas</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Mensajes de grupos chorras, y alguna notificación más de apps que no suelo utilizar. Volví a mirar el whatsapp. Él, última conexión hace menos de quince minutos. ¿Debería escribirle? ¿He hecho mal en volver a empezar? ¿Qué tiene preparado la oncóloga para este lunes? </div>
<div style="text-align: justify;">
Respiré hondo, y volví a caminar hacia el trabajo, tras tomarme el cuarto café y fumarme el décimo cigarro del día. </div>
<div style="text-align: justify;">
La jornada pasó, y no cogí el móvil en ningún momento, me quemaba en las manos. Esperé a la hora de la salida con ansia. Y allí estaba el coche azul pitufo, esperándome en la entrada del trabajo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola Ale!</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sube al coche, anda, tienes muchas cosas que contarme - eso significaba que de camino a casa de mi madre, unos veinte minutos, me iba a hacer un interrogatorio, que ni la KGB en su época de esplendor.<br />
<br />
Fabio<br />
- Vente a New York conmigo<br />
Me voy en unos días<br />
Te necesito</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-541852180814131532017-04-09T04:08:00.001-07:002017-04-11T11:54:07.608-07:00Yo no mataré monstruos por tí<div style="text-align: justify;">
- Pero hay cosas que tienen que cambiar, y lo entiendo. Tenemos que poner de nuestra parte para poder empezar otra vez.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Dicen que segundas partes nunca fueron buenas, pero con él..., con él era diferente, si fuésemos una película, seríamos Viernes 13, con 10 partes por lo menos. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Deberíamos empezar de cero, no guardarnos cosas y hablar de nosotros de vez en cuando, ya me entiendes - rozó mi mano un segundo y mi mundo se desmoronó.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Por supuesto que le entendía, cada vez que escuchaba la frase: <i>vamos a hablar de nosotros</i>, mi cuerpo temblaba, sabía que algo iba a ir mal y acabaría dejándome como siempre, se liaría con sus propios pensamientos, acabaría diciendo alguna de sus tonterías y acabaría con la gran frase; Sarah, mejor lo dejamos. Esa era su <i>vamos a hablar de nosotros</i>.</div>
<div style="text-align: justify;">
Pero claro yo estaba en ese momento en el que flotas y vomitas arco iris de felicidad. Así que mi neurona no iba a reaccionar ni mucho menos, y mi negra del Bronx estaba en Cuenca pajareando.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí deberíamos empezar de cero y bueno, intentar hacer las cosas bien ¿no crees? - y le miré con esa cara de perro abandonado que sólo me sale en los momentos en los que de verdad necesito que diga algo ingenioso y que me llegue al corazón.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Claro que sí, y te voy a apoyar en todo este proceso, no me gusta que estés sola. Siempre haces lo mismo, te lo guardas todo y no te preocupas por ti.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Lo sé.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Se lo has contado a alguien?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues, ..., la verdad es que, ... sólo lo sabe Ale. Ahora mismo no sabría como contárselo a mi familia, ya sabes por todo lo que han pasado, y no creo que sea el mejor momento para explicarles todo esto. Creo que los hundiría. </div>
<div style="text-align: justify;">
- Pero, no puedes estar sola en esto.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No estoy sola, tengo a Ale, ya sé que es un poco <i>drama queen</i> y un poco veleta, pero es la única persona que ha estado ahí siempre.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Y era verdad, Ale ha estado en todos los momentos de mi vida, en los mejores, en los peores, en las fiestas, en los llantos. No podía decir lo mismo de él, pero ya sabéis como funciona esto, una es imbécil profunda y siempre cae en la trampa.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- No te preocupes yo estaré ahí, para lo que necesites.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Gracias - sonreí, de verdad sonreí, porque a su lado me sentía protegida, con ganas de vivir y seguir adelante. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Se acercó a mí, lentamente, cómo pidiendo permiso y me besó. Me estremecí, sentirme amada, deseada y comprendida de nuevo. Ese cúmulo de sensaciones que sentía cada vez que estaba a su lado, invadía de nuevo mi ser. Ese beso era el principio de algo, no sé si alguna vez habéis sentido algo parecido, pero es cómo si el mundo se detuviese, dejase de girar y de repente, apareciese Él delante de la nada corriendo hacia a ti; como en esas pelis románticas donde el protagonista corre hacia ella, y ella le espera con los brazos abiertos. Debe ser la mejor sensación del mundo, yo no lo había sentido, pero debe ser lo mejor que has sentido. Al ser imbécil mi mejor sensación era sentirle cerca, y de alguna manera era mío por un instante.<br />
<br />
Le volví a besar, necesitaba su aliento, sus manos en mi piel, sus caricias, sus ganas de vivir, todo, lo necesitaba todo de él. Lo agarré del cuello, como si no hubiese mañana, cómo si al alejarme se separase todo lo que sentía cuándo estaba cerca de mí.<br />
<br />
- Lo siento, pero no puedo evitarlo - conseguí decir entre beso y beso, casi sin aliento. Mi cabeza ya no regía,<br />
<br />
- No pasa nada - con esa frase sentí que empezábamos de cero, tal y cómo había dicho.<br />
<br />
Seguimos hablando de banalidades, como siempre, y nos despedimos en la entrada del metro con un beso, largo tierno, de esos que te das cuándo tienes catorce años en la puerta del instituto.<br />
Mientras bajaba las escaleras sentí que mi mundo volvía a girar y que las mariposas revoloteaban a mi alrededor. Sentía que esta vez, si iba a ser diferente, le vi muy seguro de si mismo, con ganas de ayudarme y estar a mi lado en este arduo proceso. Cuan idiota podía llegar a ser.<br />
<br />
Entré en el metro y revisé mi teléfono, veinte whatsapps, 2 llamadas perdidas, notificaciones de varias aplicaciones. Abrí el whatsapp.<br />
Ale:<br />
- En cuánto vuelvas a casa me llamas<br />
- Como va todo?<br />
- En cuánto puedas escribeme y me cuentas<br />
<br />
Era peor que mi madre, todo el día encima de mí, pensé que sería mejor contestarle en un rato<br />
<br />
Fabio:<br />
- Hola que tal?<br />
- Que haces hoy? Te apetece café y croissant de chocolate?<br />
- Besos<br />
<br />
Decidí que era mejor contestar a Fabio primero.<br />
- Holaaaaa!!!!!<br />
Pues hoy no me va muy bien, quedamos mañana.<br />
Respuesta inmediata.<br />
- Hola que tal estas?<br />
- Bien, la verdad es que bien. y tu?<br />
- Que has hecho hoy?<br />
A ver como le explico que he quedado con Él y hemos vuelto. No creo que le siente muy bien.<br />
- Pues nada, a parte de currar, jeje he quedado.<br />
- Con Él no?<br />
Vaya, creo que no me tendré que esforzar en decírselo de buenas maneras.<br />
- Sí<br />
- Vale, ya hablamos mañana.<br />
<br />
Sabía lo que significaba esa frase, me iba a caer una bronca de las que ya mi madre no se encarga. Íbamos a discutir y acabaríamos odiándonos durante un par de días. Demasiado previsible entre nosotros.<br />
<br />
Así que intentando evitar mi cabreo y seguir escribiendo a Fabio, que hace que salga lo peor de mí; decidí contestar a Ale.<br />
- Hola!!!<br />
- Que tal ha ido?<br />
Ya has vuelto a caer no?<br />
- En serio? <br />
- Eso es un sí.<br />
Se lo has dicho?<br />
- Sí se lo he dicho, y?<br />
- Ya sabes lo que pienso.<br />
- Bufff, Ale no empieces.<br />
- Vente a casa y hablamos.<br />
- Hoy no,<br />
- Vaaaa, Sarah!!!!<br />
- No de verdad, necesito descansar y pensar.<br />
Quedamos mañana a la salida del curro<br />
Ok?<br />
- Vaaaaale, pero ya sabes que si necesitas hablar<br />
Aquí estaré<br />
<br />
Y así me fui a casa, entre bronca y bronca, estaba agotada con un cúmulo de sentimientos encontrados. ¿Había hecho bien?. <i>Por supuesto que no, te has bajado los pantalones otra vez</i>, mi negra del Bronx había vuelto. En parte la echaba de menos.<br />
Llegué a casa y descansé unas horas, delante del ordenador, repasando correos, y de nuevo el móvil.<br />
- Buenas noches.<br />
<br />
Eso era lo que necesitaba para irme a dormir, un último mensaje, necesitaba sus buenos días, y sus buenas noches como respirar. Después de haber estado más de dos semanas sin comunicarnos, ese mensaje me daba esperanzas, ganas de empezar y luchar contra el bicho que llevaba dentro.<br />
Me metí en la cama exhausta y con ganas de un nuevo mañana.<br />
<br />
Después de cinco horas y media de sueño, sonó el despertador. Abrí los ojos y miré el movil, cómo hacía cada mañana.<br />
<br />
Fabio:<br />
- Tenemos que hablar.<br />
Espero no haberte despertado.<br />
Cuándo puedas, tenemos que quedar<br />
Prometo no hablar del tema.<br />
Pero necesito verte y hablar<br />
<br />
Bloqueé el móvil, y fui directa al lavabo a lavarme la cara. Me senté en el sofá y encendí un cigarro. Tenía que pensar. </div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-78353201741574802772017-04-02T12:04:00.001-07:002017-04-04T12:38:11.767-07:00Venderte mil baratas quimeras<div style="text-align: justify;">
Era viernes y eran las 18:25 de la tarde, había llegado pronto, como siempre. Me encontraba nerviosa, titubeante, como una quinceañera esperando el concierto de esos grupos de cinco componentes por los cuales chillan, lloran y se pintan las caras con sus nombres.</div>
<div style="text-align: justify;">
No sabía a qué me tenía que exponer, otra vez el pánico y ese gusanillo que hace que tus tripas brinquen como si estuvieses montada en una atracción de feria.</div>
<div style="text-align: justify;">
Y allí estaba yo, esperando en mitad de una multitud, se me distinguía fácilmente, bajita, morena, pantalones rotos, una sudadera de los <i>Sex Pistols, </i>y unas Converse que siempre me acompañaban<i>. </i>Cualquier hipster me hubiese robado el look.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Lo vi llegar, con su aire de seguridad, esa media sonrisa que tanto añoraba, y esos ojos claros en los que me perdía tan fácilmente. Si se tratase de una película, de esas americanas, mientras se acercaba a mi, hubiese sonado <i>You Sexy Thing</i> de <i>Hot</i> <i>Chocolate</i>. Pero como esto es la vida real, en mi cabeza sonaba la música de la escena final de <i>Muerte en Venecia. </i>Tenerle tan cerca hacía que me temblasen hasta las pestañas. Sigo sin saber cómo ejercía ese efecto en mi, me sentía desnuda, desprotegida y expuesta.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Hola.</div>
<div style="text-align: justify;">
Me acerqué y nos dimos dos besos fríos, como los que se dan dos extraños cuando se acaban de conocer. Otra vez esa sensación de repulsión se ahondaba en mí.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Quieres ir a tomar algo?</div>
<div style="text-align: justify;">
Asentí sin mediar palabra. Sonrió de medio lado y se mordió el labio. Y ahí estaba yo, cayendo de nuevo en su red. Ni la abeja Maya caía tantas veces en la telaraña de Tecla ( sí, así se llamaba la araña de la serie)</div>
<div style="text-align: justify;">
Caminamos unos minutos, a mi se me hicieron eternos, tenía tantas cosas en mi cabeza, tantas cosas que decir</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Aquí te parece bien?</div>
<div style="text-align: justify;">
Señaló a nuestro lugar favorito, una tetería marroquí, sin grandes lujos, un poco escondida y con un cartel un poco cutre, pero con la mejor tarta de zanahoria de toda Barcelona.</div>
<div style="text-align: justify;">
Me daba pánico entrar allí, nuestras rupturas, malos entendidos y discusiones se escondían en aquella última mesa de la esquina.</div>
<div style="text-align: justify;">
Nos sentamos, pidió lo de siempre y nos quedamos en silencio. Él, midiendo sus palabras y yo, cagada de miedo y sin saber qué decir.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Me sorprendió tu mensaje.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ah, pues, ... No sé</div>
<div style="text-align: justify;">
Tan locuaz como siempre Sarah, a veces odiaba a mi cerebro.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No sabía muy bien qué querías, y tampoco sabía que contestar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ya, por eso tardaste dos días en contestar ¿no?</div>
<div style="text-align: justify;">
Por fin, gracias ironía por despertar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah, por favor, después de tanto tiempo sin hablarnos. El otro día cuando quedamos, la verdad, esperaba otra cosa.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Otra cosa? Pues no sé, quizás yo también esperaba que en vez de pensar en tu moto, me preguntases al menos cómo estaba. Y creía que te alegrarías por mí.</div>
<div style="text-align: justify;">
Estaba indignada, ¿en serio era tan imbécil? Respuesta: SI</div>
<div style="text-align: justify;">
- Eres tan, tan ... Joder es que, no se te puede decir nada, siempre estás a la defensiva.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Soy tan qué?, ¿a la defensiva yo?</div>
<div style="text-align: justify;">
Y tenía toda la razón, siempre llevo mi escudo, mi espada, y mi capa por si acaso. Pero no le iba a dar la razón. Eso jamás.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sabes que tengo razón, rompes mis esquemas. Cuando digo que esperaba otra cosa, es que no esperaba que me contarás lo del libro.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Entonces?</div>
<div style="text-align: justify;">
Presionar a alguien no es la mejor manera de comunicarse, pero es que había que arrancarle las palabras. Siempre medía lo que iba a decir, la única forma de que fuese sincero era ponerlo entre mi espada y esa pared con dibujos árabes que tenía detrás de él.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Entonces, ... nada.</div>
<div style="text-align: justify;">
Resopló, miró su taza y dio un sorbo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- En serio, es que ¿no vas a decir nada?, y tu comportamiento del otro día ¿qué?, ¿me vas a decir que fue normal?</div>
<div style="text-align: justify;">
Mi negra del Bronx salió a la luz.</div>
<div style="text-align: justify;">
- A ver, como ya te he dicho es que esperaba otra cosa.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pero ¿qué cosa?</div>
<div style="text-align: justify;">
Me exasperaba.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues, es que, no sé por dónde empezar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Por el principio ¿quizás?</div>
<div style="text-align: justify;">
Gracias cerebro por empezar a despertarte.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Ves? - resopló de nuevo, a veces soy insufrible - pues, cuando me escribiste que querías hablar, pensaba que te referías otra cosa. Me bloqueaste y de repente me escribes, pues ¿qué quieres que piense?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues no lo sé, ya te dije que era una chorrada y que si preferías te lo podía decir por teléfono.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Quería verte.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ya, claro, por eso te comportaste como un capullo.</div>
<div style="text-align: justify;">
En realidad después de decirme que me quería ver, me hubiese tirado a su cuello y le hubiese besado cómo si no existiese un mañana, pero mi orgullo y yo no íbamos a permitirlo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Te he echado de menos. Me molestó que sólo quisieras verme por ese tema. Creía que querías algo de mí.</div>
<div style="text-align: justify;">
Y me miró a los ojos, cómo sólo él sabe hacer.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Me dejaste. ¿qué iba a hacer? No te preocupaste ni si quiera si llegué bien aquel día.</div>
<div style="text-align: justify;">
Mis defensas, mi orgullo y mi negra del Bronx desaparecieron.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No me dejaste hablar, te fuiste sin más.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Tampoco dijiste nada. Contigo es todo una montaña rusa.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Bufff - resopló nuevamente - déjalo estar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pero ¿qué esperabas que te dijese?</div>
<div style="text-align: justify;">
Empezaba a no entender nada, me había dejado, ¿esperaba que me pusiera de rodillas y suplicara su perdón? Era yo la dolida, a la que habían dejado. La que estaba sola cara a cara con una enfermedad que no sabía si iba a acabar conmigo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Esperaba que la noticia que me ibas a dar fuese otra.</div>
<div style="text-align: justify;">
Que hombre tan cansino.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues no sé, fui sincera contigo.</div>
<div style="text-align: justify;">
Bueno, bueno, sincera... Quizás no le expliqué toda la verdad, pero eso no es mentir, es ocultar parte de la información.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Es igual.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Y ahí acabó nuestra conversación, por llamarlo de alguna manera. Llena de sinsentidos y estupideces. Acabamos nuestra consumición y charlamos sobre cosas banales, trabajo, amigos, y cómo nos iba todo. Nos levantamos y pagamos.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ya invito yo.</div>
<div style="text-align: justify;">
Soy demasiado orgullosa cómo para que alguien me pague algo, aunque no tenga ni un duro, prefiero ser independiente hasta para esto.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Vale.</div>
<div style="text-align: justify;">
Dios, porqué sigue sonriendo de esa manera. No entiendo cómo esa sonrisa me pierde tanto. Hace que me desvanzca internamente.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Seguimos caminando, de vuelta, ambos callados con las manos en los bolsillos y evitando el roce de nuestros cuerpos.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Bueno, ¿te quieres sentar?</div>
<div style="text-align: justify;">
Aquella frase me dejó helada, Iceman me había contagiado y una parte de mí, pensaba ¿porqué no? en otro momento hubiese pensado en el dolor que me iba a producir todo aquello.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí claro.</div>
<div style="text-align: justify;">
Olé por mí, no entendía porque mi boca hacía lo que le daba la gana. Iba completamente en su dirección sin pensar en mi cerebro o mi corazón.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Bueno y ... ¿qué?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Mira te voy a ser sincera, aquel día sí te quería decir algo, pero como siempre cuándo más te necesito, cuánto más te quiero, y cuánto más me aferro a tí. Tu decides huir.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Yo? Te fuiste tú.</div>
<div style="text-align: justify;">
Estábamos a menos de un metro y deseaba tenerlo entre mis brazos, besarle, abrazarle e hincharme a llorar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Yo no me fui, tú, tú me dejaste. parece mentira que no lo recuerdes. Toda mi vida a tu lado cogía en una simple bolsa, que no quise coger.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pensaba que querías volver, que todo iba a cambiar.</div>
<div style="text-align: justify;">
Me quedé estupefacta, ni de broma pensaba que esperase que quería volver, lo había pasado tan mal, no sabía ni por dónde empezar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Lo siento, pensaba que querías dejarlo. Lo dejaste bien claro. Mira, es que no sé por dónde empezar. Siempre haces lo mismo, cuándo peor estoy, me alejas.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- No es verdad.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si lo es, me alejaste y yo no supe cómo decirte que tenía cáncer.</div>
<div style="text-align: justify;">
Olé de nuevo por mí. soy la persona más idónea para dar malas noticias.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Cómo?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Se quedó blanco y acarició sin querer mi mano, y sentí la misma sensación que tuve el día que nos conocimos cuándo rozó mi mano. Sentí que el mundo se acababa en ese momento y que él era mi aire para subsistir.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sin comer, a ver por dónde empiezo. (pausa dramática como en las películas de los 80) Me han diagnosticado cáncer y tengo que empezar el tratamiento, o lo que sea, tengo visita con la oncóloga el lunes. El día que me dejaste me dieron los resultados; pero claro, estabas demasiado preocupado por otras cosas.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Eh....</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, siempre que te necesito, que sé que estoy mal, no estás. desapareces, no sé aún nada, no sé tratamientos, ni que voy a hacer. Lo único que sé es que tengo cáncer. Y no, no me mires con pena, ya veremos que pasa.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Porqué no me lo dijiste? </div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Para qué? ¿para darte pena? ¿para mantenerte a mi lado cuándo no me quieres?</div>
<div style="text-align: justify;">
- Yo, yo, yo te quiero.</div>
<div style="text-align: justify;">
De las pocas veces que escuchaba esas palabras de su boca, sentí como su calor inundaba mi cuerpo. tan vanas esas palabras en su boca.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sarah, te he echado de menos, no sabes cuánto. Cuando estoy contigo todo es genial, el problema, es cuando no nos vemos. Pero quiero intentarlo. Esta vez las cosas tienen que salir bien.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Mis cojones 33, esto equivale a: y una puta mierda. Pero ahí estaba yo, lejos de mi negra del Bronx, lejos de mi orgullo, lejos de todo, Era sentir que me quería y toda yo se derretía como un helado a las tres de la tarde en una playa en Huelva. Otra vez me subí a la montaña rusa, pero cómo todas las montañas rusas tienen principio y final.</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-34185038514154168582017-03-26T04:13:00.000-07:002017-03-26T04:13:32.823-07:00Por el mar corre la liebre <div style="text-align: justify;">
Al cabo de más de dos días recibí un mensaje más allá de un simple whatsapp, me escribió un correo electrónico:</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Se que me quiere con locura, y eso me tranquiliza, pero no paro de pensar como sería todo si estubieramos juntos día a día. Nos necesitamos y nos cumplimentamos en muchas cosas. Necesito a diario un beso suyo, una mirada y una sonrisa. Que me diga que guapo soy, y decirle que no, necesito su silencio cuando está a mi lado, sus videos colgados, sus compras de cosas baratas, sus labios y su cuerpo que me hipnotizan, sus enfaditos tontos y sus reconciliaciones a besos, que me coja de la cara, que me diga que soy un sol, que me hable de sus cosas, ir a comer los dos tranquilamente, ir al cine y estar tan cómodos, ir a cenar pizza, despertame con ella con un brazo dormido y decirle que no es nada, hacerle el desayuno, jugar, hablar, reir, abrazar y tantas cosas que hacen que la quiera cada día más, es una persona muy especial que cautiva a cualquiera que tenga ojos y que tenga alma. Podría decir que no he estado tan bien conmigo mismo con alguien a mi lado, con ella parece que levites por encima del tiempo como si no existiera nada más. Hoy he visto el dunkin donut y claro, pienso en ella en como pone esa cara al comerse algo dulce El primer donut que he visto es uno de color rosa, color odioso vale, pero en el centro había una casa y he pensado, mira, nuestra casa, y la nostalgia se ha apoderado de mi.</i></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-style: italic;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
Soy del género idiota, ya sabéis, y de nuevo creí que las cosas iban a cambiar, pero ya sabemos como va esto. A lo que iba, mi idiotez y yo decidimos bajarnos los pantalones a la altura de Julio Verne en Viaje al centro de la tierra y volver a caer rendida a sus pies. Realmente no sé cómo lo hace, pero mi orgullo, al que siempre me he aferrado, se desvanece con tan sólo dar señales de vida, contarme una milonga y volver a ilusionarme.</div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Bueno, me ha sorprendido mucho lo que me has escrito, podríamos quedar y hablar.</div>
<div style="text-align: justify;">
Orgullo cero - Idiotez 1</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí podríamos quedar.</div>
<div style="text-align: justify;">
Y ahí estaba de nuevo, el hombre de hielo, tan eufórico y tan sentimental.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Cuando tengas un rato libre, podemos tomar un café.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, estaría bien.</div>
<div style="text-align: justify;">
De verdad después de dos días y escribirme ese correo, eso es todo lo que tenía que decirme, tanto entusiasmo no por favor, que me abrumo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues ya dirás.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
De nuevo a expensas de que The Iceman pusiese algo de su parte y se dignase a quedar y hablar. Me había cansado de esa situación, me lo había hecho tantas veces, pero no me quedaba otra. La mecha se estaba agotando, pero ahí estaba yo, aguantando como una jabata, haciéndome la fuerte, y esperando que un mensaje llegase a mi móvil.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Llamada del hospital</i></div>
<div style="text-align: justify;">
- ¿Sarah Rodriguez?</div>
<div style="text-align: justify;">
Siempre ese tono, que a veces te entran ganas de decir que están llamando a un número equivocado,</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, soy yo.:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Era para recordarte la cita con la oncóloga, el lunes a las 18:30</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ah, sí, sí.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Nos vemos el lunes.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí adiós, hasta el lunes.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Bueno, esa era mi preocupación, la principal, y debía plantearme tantas cosas. ¿Qué iba a ser de mi vida ahora?, ¿cuánto tiempo me quedaba?, ¿realmente iba a funcionar el tratamiento? </div>
<div style="text-align: justify;">
Pues bien, volví a hacer lo que hago con todo, aparcarlo todo en un cajón al final de mi cabeza. Siempre he tenido la teoría de que <i>si no piensas, no duele. </i>Es mi lema de vida, y es la forma que tengo de protegerme de todo lo malo. En esto soy como mi familia, si no se habla de ello es cómo si no hubiese pasado. </div>
<div style="text-align: justify;">
Estaba realmente cansada del puto <i>karma</i>, mi mejor amiga y yo, siempre hemos tenido la teoría de que si existe el <i>karma</i>, en otra vida tuvimos que ser unas hijas de puta monumentales. Siempre hemos creído que eramos los principales cabecillas de la Santa Inquisición, sino no se entiende tanta mala suerte. </div>
<div style="text-align: justify;">
Vuelvo a mirar el móvil, sin noticias desde hace más de dos horas, no sé como se puede ser tan gilipollas, me miro al espejo y vuelvo a pensar en la que pena que doy ¿cuando empezaré a perder el pelo?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Bueno ya me dirás si puedes quedar o no, y dónde quedamos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Me había cansado de esperar, yo ya no estaba para jugar mucho, y se me estaban agotando las vidas.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí bueno podemos quedar en el centro, en un par de días y tomamos algo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ok. el viernes a las 18:30 ¿te va bien?</div>
<div style="text-align: justify;">
O pongo toda la carne en el asador o éste no va a poner de su parte.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ok</div>
<div style="text-align: justify;">
- Ok.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Y esta es la gran conversación que tuvimos por whatsapp antes de quedar para hablar. La bipolaridad que tanto odiaba siempre salía a la luz. No entendía cómo una persona pueda decir te quiero, y a los cinco minutos se muestre frío, sin sentimientos. Me agotaba. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Me metí en la cama dándole vueltas a todo, pensando en si le iba a contar algo o no, en cómo iba a afectar el cáncer a mi vida. Dos horas más tarde, después de darle una paliza a la cama y no poder dormir, me vestí y salí a correr, me vi como en un videoclip de Sia, loca perdida, despeinada y con ganas de gritar. </div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-36015706903756112032017-03-18T03:43:00.000-07:002017-03-26T02:55:07.622-07:00Manolo Tena<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Soy el juguete de la desolación, mi alma vacía.</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
No estaba nada bien. Pero eso no impedía que intentase parecerlo, soy una pedazo de actriz, ya lo había demostrado; ¡Hollywood qué te has perdido!. Con él no podía, sabía que Ale conocía cada una de mis muecas, de los intentos por no molestar a nadie; y no sé cómo lo hago pero siempre acabo pidiéndole ayuda sin saberlo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Me abraza fuerte nuevamente, como si la vida le fuese en ello, y como si mi cuerpo se pudiese estrujar cuál peluche. No me importa, tan sólo necesito ese abrazo que termine de absorber las últimas lágrimas que me quedan. Pero para ironías del destino, tan solo dejo que mis lágrimas fluyan y se abran camino entre mis mejillas. Se ha abierto la caja de Pandora una vez más, y entre sollozos solo puedo pronunciar:</div>
<div style="text-align: justify;">
- Tengo miedo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
No me suelta, deja que me derrumbe en el suelo y se agacha para abrazarme aún más fuerte.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Cariño, estoy aquí, no voy a dejar que te vuelvan a hacer daño, respira.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Ahora no puedo parar, mi cabeza ha estado impidiendo esto. He vuelto a tocar fondo. Había estado una semana teniendo pesadillas y despertándome sin aliento, teniendo la misma sensación de estar sucia y de que mis entrañas se abrían paso hasta llegar al suelo. Lo último que necesitaba era esto, un agujero donde meter más mierda. Joder, no había llorado tanto desde que vi por primera vez Como agua para chocolate; y sí, he visto este coñazo de película más de una vez.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Acabo de despertarme en un sofá extraño, con esa manta de ositos que Ale sacaba para las grandes ocasiones, mis grandes momentos. Si esa manta pudiese hablar... madre mía, que de cosas contaría (acabo de recordar a Los Sirex en su famosa canción <i>si yo tuviera una escoba</i>)</div>
<div style="text-align: justify;">
Ale, que estaba velando mi sueño justo a mis pies, me miró con lástima y resignación, como cuando una madre mira a su hijo adolescente, al verle con los ojos rojos y oliendo a porro desde que ha abierto la puerta y dice: voy a la cama que estoy cansado.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Nos merecemos que nos quieran - es lo único que dijo, mientras acariciaba mis pies suavemente, Ay! si no fuese gay sería el hombre de mi vida.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Nos quedamos en silencio viendo de nuevo <i>The Crow, </i>aún sigo sin entender como ese DVD no se ha rallado ya y ha dejado de funcionar, cuántas veces hemos visto esa película en silencio y nos hemos hinchado a llorar en la escena en la que Brandon Lee deja el anillo en la tumba de Shelly. Seguramente tod@s soñamos en que nos amen de esa manera, y no es amor en plan moñas, es ese incondicional mucho mejor que el de Diario de Noa,</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Me levanto poco a poco del sofá sigo siendo una zombie, no quiero ni mirarme al espejo, seguro que me daría más pena de la que doy. Es lo que tiene ser demasiado auto crítica conmigo misma, pero es que esos pelos de loca pegados a la cara de todo lo que había llorado, y esas ojeras no ayudaban demasiado a quererme.</div>
<div style="text-align: justify;">
Logro deshacerme de mis prejuicios, y consigo llegar al lavabo a lavarme la cara, ¿de verdad merece la pena sufrir por alguien?, cuánto daño ha hecho <i>50 sombras, </i>nadie, ni nada, merece a pena que sufras de esa manera, no necesitamos ser <i>drama queens </i>pero, se ve que tenemos algún chip implantado al nacer que hace que las mujeres suframos por amor, necesitamos pasarlo mal aunque lo mejor de nuestra vida esté a nuestro lado; siempre elegimos al capulllo de turno que nos hace sufrir y pasarlo mal.</div>
<div style="text-align: justify;">
Me lavo la cara, me miro al espejo y pienso que ... y qué hago aquí sin ti ... que esta pueda ser la última vez que te hable o que te escriba; miro el móvil y me hago la fuerte; no voy a hacerlo me repito una y mil veces, pero mis dedos pasan completamente de mi razón, y hacen caso al corazón; y le escribo, ¡maldito Whatsapp!</div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Te echo de menos</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>No sé como decirte tantas cosas que tenía guardadas</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Creo que debería haberte dicho más cosas pero la cobardía siempre me hace guardarme las cosas para mí</i></div>
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<br /></div>
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Las espinas se clavan cada vez que miro el puñetero móvil, como en la canción de Mecano, pero era hora de empezar a hacer cosas por mí, después de mirar el puñetero whatsapp durante más de media hora cada 5 segundos, no recibí respuesta. Sí, eso era lo que valía 0,75€ la hora. Se acabaron las lágrimas, me repetí una y otra vez, mientras Ale me miraba sin cesar. No sabía como consolarme, imagino que yo en su lugar, hubiese sacado dos vasos de chupitos, me hubiese cagado en la madre que parió al imbécil que le hubiese hecho daño, nos hubiésemos ido de fiesta y mañana ... mañana sería otro día, con resaca, pero otro día.</div>
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Y hablando de resacas, a mi edad, las resacas ya no son como antes, ahora me duran una semana, jodido alcohol; nos pasamos la mitad de nuestra adolescencia bebiéndonos hasta el agua de los floreros, entrenando a nuestro hígado, para que luego, a partir de los 30 nos duela hasta la uña del dedo gordo del pie derecho un miércoles, cuándo hemos salido de fiesta el viernes anterior.</div>
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<br /></div>
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Lo cierto era que en mi cabeza mi mayor preocupación había pasado a un segundo plano; ¿en serio estaba sufriendo por un tío cuándo sabía que tenía cáncer? A veces la mente nos juega malas pasadas, y optamos por priorizar los sentimientos, cuándo realmente debemos preocuparnos por lo verdaderamente importante.</div>
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<br /></div>
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El Whatsapp no emitía ningún sonido, y me estaba desesperando, así que dejé el móvil a más de dos metros de mí, como si de esa forma por arte de alguna divinidad fuese a sonar. Se ve que la divinidad me escuchó y una hora más tarde, mi móvil sonó:</div>
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<br /></div>
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<i>Me ha cogido un poco por sorpresa</i></div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Mientras que no uses mi nombre puedes usar lo que quieras</i></div>
<br />
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<span style="font-style: italic;"><br /></span></div>
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Menuda puta mierda, otra vez estábamos cómo al principio, preocupado por su nombre, lo de este chico no tiene solución, es imbécil. Menos mal que no le conté nada (yo y mi bipolaridad), no se ha preocupado en ningún momento por mí. Y como yo soy del género idiota, esperaba que después de dos semanas sin hablarnos, me rogase que volviésemos a estar juntos. Quizás me he saltado el punto en el que hacía dos semanas me había dejado.</div>
<br />
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<br /></div>
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- ¡Ya le contesto yo! - indignado, Ale me arrancó de las manos el móvil, mientras yo estaba ensimismada en mis propios pensamientos absurdos.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Déjalo, si no sé ni que contestarle a parte de decirle que es un capullo integral - lo dije con una voz muy suave, robándole mi propio móvil de entre sus manos. No quería que le mandase un mensaje en plan: púdrete en el infierno maldito cabrón; aunque muy en el fondo pensase que era lo correcto.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues es lo que deberías contestarle, capullo integral te preocupas de gilipolleces cuándo tendrías que estar de rodillas suplicándome que vuelva contigo, gusano inmundo - nos miramos, se hizo un silencio y empezamos a reírnos a carcajadas. Era la primera vez que reía sinceramente en mucho tiempo, sin importarme quién estuviese mirando o lo que podrían pensar de mí.</div>
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<br /></div>
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Seguimos riendo durante un buen rato, recordando locuras que habíamos hecho, rememorando viejas historias de noches gloriosas, llenas de alcohol y risas.</div>
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<br /></div>
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- Decidido <i>princess, </i>nos vamos a tomar unas copas - golpeó mi rodilla, y me arrancó la manta de ositos a la que me aferraba con tanto ahínco.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Estoy completamente de acuerdo, nos vamos - no tenía ningunas ganas, y él lo sabía; pero eso no me iba a impedir pasar unas horas sin pensar en que la señora de la guadaña me pisaba los pies, ni pensar en capullos integrales.</div>
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<br /></div>
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Salimos de su portal, él con sus mejores galas, pajarita incluida; y nos dirigimos al único Pub que queda en condiciones en el barrio. Él se pidió su copa de champagne y yo una cerveza sin alcohol (que loca eh!). Nos encontramos con viejos amigos a los que no veíamos habitualmente y entablamos las típicas conversaciones de cortesía: ¿qué tal la vida? ¿sigues casado con...? ¿ah! pero ya tienes hijos!? Ya habían pasado más de dos horas y me lo estaba pasando genial, cuándo Ale tuvo que abrir su gran bocaza.</div>
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<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Vale que no se lo quieras contar a nadie, pero... - no dejé que terminase la frase, le interrumpí.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Por ahora no se lo voy a contar a Fabio, no creo que sea correcto, imagínate, como se pondría, si fuese por él me metería en una burbuja de cristal y no dejaría ni que me tocase ni el aire - asintió.</div>
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<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Os pongo en antecedentes, Fabio era algo así como un "ex", nunca llegamos a salir, nuestra relación se basaba en sexo puro y duro; me acabo de dar cuenta que puro y duro no es la mejor manera de definir una relación sexual, así que lo definiré mejor, sería algo así como un <i>"follardo"</i> No eramos una pareja, y nunca lo fuimos, simplemente eramos amigos y nos acostábamos de vez en cuando; sin explicaciones, sin amor, sin nada más allá de lo meramente dicho. Pero para él no fue así, y después de tantos años seguía algo colgado de mí. Nunca llegué a enamorarme de él, y tampoco quise hacerle daño nunca, ¡que conste en acta!, pero las cosas entre nosotros, siempre se complicaban. Él creía que tenía algún derecho sobre mí, y actuaba siempre de forma sobreprotectora, y necesitaba saber que formaba parte de mi vida. No le culpo por ello, después de todo sólo estaba enamorado de una persona que no sentía lo mismo, de alguna forma le entendía, estaba pasando por algo parecido.</div>
<div style="text-align: justify;">
Fabio era el típico hombre por el que todas perderían la cabeza, es de esas personas que entra en un bar y hace que se giren hombres, mujeres y niños; su seguridad al caminar, esa media sonrisa y ese porte. Es alto, guapo, moreno, esa mirada con ojos marrones que parece que te estén penetrando (en el buen sentido) y ese cuerpazo curtido en el gimnasio; como diría mi abuela; ¡cualquiera le hace ascos!</div>
<div style="text-align: justify;">
Pero como yo soy de otro planeta, de Plutón por lo menos, que además ya no está ni en el sistema solar, no me atraía lo más mínimo. Demasiado perfecto para mí, así soy yo, rara de pelotas.</div>
<div style="text-align: justify;">
Nunca me sentí atraída por él, excepto en lo meramente dicho, el sexo. En parte me siento culpable por todo lo que pasó, no me di cuenta a tiempo, que las cosas se estaban empezando a complicar entre nosotros; pero bueno agua pasada, no mueve molino. Aunque en este caso sus molinos giraban cómo los de Don Quijote.</div>
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No comprendía, después de tanto tiempo, como un hombre como él, seguía enamorado de mí. Siempre he querido pensar, que he sido la única que le ha dicho que no, y por eso seguía un poco colgado por mí. No sé cómo nos lo montábamos pero siempre que nos veíamos acababámos discutiendo por una cosa o por otra. Así que no estaba dispuesta a contarle todo por lo que estába pasando en ese momento.</div>
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<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
- Sabes que se va a enterar ¿verdad?, de una manera u otra. Con él soy muy <i>bocachancla </i>y acabo contándole todo sobre ti, es que tú no sabes como le cambia la cara cada vez que sales en alguna conversación - me miró con esos ojos de cordero degollado. Sabía perfectamente que odiaba que Fabio le sonsacase información sobre mí, y no sé como lo hacía, siempre acababa sabiendo más de mí, que yo misma.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No tengo ganas de hablar de eso ahora - le dije mientras recorría con mis dedos las gotas que se habían formado en su copa de champagne. Creo que me relamí, quería beberme esa copa y dejar de pensar.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues en algún momento tendrás que hablar con él y con todos, no puedes con esto tu sola, y lo sabes - y me señaló, ahí estaba Julio Iglesias apoderándose del alma de mi amigo.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Y ... de lo otro ... ¿qué hago?</div>
<div style="text-align: justify;">
- No soy quién para decirte lo que tienes que hacer <i>princess </i>pero ya sabes lo que te voy a decir.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Lo mismo que yo te digo cada vez que algún capullo te hace daño. Olvídalo, a rey muerto, rey puesto, ¿no? - asintió nuevamente mientras le daba un sorbo a su copa - pero esta vez es diferente, me he encoñado. ¿yo? La que siempre dice que los hombres entre más lejos mejor, la que nunca se cuelga de nadie, la que tiene más muros que la Gran Muralla China. Y ya me ves... echa una puta mierda.</div>
<div style="text-align: justify;">
- No te voy a decir lo que no quieres oír, pero no creo que te merezca, y se qué le voy a dar la razón a Mr. Grey - así llamaba a Fabio en nuestro minicirculo - pero esta vez se ha pasado, y ya, ya sé qué no le has contado nada. Pero yo no te puedo ver así, bastante ...</div>
<div style="text-align: justify;">
- Sí, bastante tengo con lo que tengo, me voy a tener que acostumbrar a esa frase. Pero no se puede obligar a nadie a que te quiera. Además, que le den por culo, a lo mejor le gusta.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¡Sarah! Por favor, no es eso, es que siempre estás a expensas de lo que él quiere y cuándo él quiere. Te manipula y no quieres darte cuenta.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Estoy hecha un lío, estoy cansada de sus montañas rusas, ahora te quiero, ahora mejor estar sin vernos, ahora mejor nos damos un tiempo, ahora vuelvo a ser frío. Es que cada vez que tiene un problema o una de sus pajas mentales me aleja de él, le da la ventolera y a mí que me jodan. Sé que yo al principio no se lo puse fácil, pero es que ¡ostia puta! es que cada vez es alguna gilipollez nueva - sí, de normal digo muchas palabrotas.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Pues ahí tienes la respuesta, no puedes seguir así, esperando que te conteste, que te hable y caer rendida a sus pies</div>
<div style="text-align: justify;">
- Si, yo entender maestro Yoda, encoñamiento no ser bueno.</div>
<div style="text-align: justify;">
- ¡Sarah! Contigo no se puede hablar en serio. - resopló, miró al camarero y con un gesto pidió otra copa.</div>
<div style="text-align: justify;">
- Es mi manera de quitarle hierro al asunto, ya sabes.</div>
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<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Nos terminamos la bebida, nos levantamos y fuimos a casa a descansar. Estaba terriblemente cansada. Y la manta de ositos me estaba esperando cuál amante espera que caiga la noche para ver a su amada. En el fondo soy una romántica, y la manta de ositos me había robado el corazón muchas veces.</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/15663573535894634125noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2527894433156372863.post-87498952161651148692017-03-11T04:36:00.000-08:002017-06-30T15:31:06.148-07:00Primer día <div dir="ltr" style="line-height: normal; widows: 1;">
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Este es mi primer día de cura. Estoy lejos, muy lejos lo único que escucho es el maldito ruido de esta maquina de hospital.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Había tenido que elegir, y ya había elegido, mi primera sesión del tratamiento.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Pero retrocedamos en el tiempo, os voy a contar mi historia, esa historia que todos conocemos, y a todos nos ha pasado alguna vez, enamorarse locamente de alguien y como perderlo todo.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Era un lunes, un maldito lunes, había quedado para contarle todo, para decirle que lo echaba de menos, que lo quería, que estaba cagada de miedo, y que le necesitaba a mi lado como nunca, porque el pánico se había apoderado de mí.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Le había mandado un mensaje para vernos, y aunque me dolía el alma sólo con pensar en su rechazo, tenía la esperanza que por una vez en mi vida, saliese todo por mi boca.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Hola, me darás dos besos por lo menos. - me espetó frío y distante.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Cínico, capullo, retorcido, mierdas, pero de mi boca solo salió: - Claro.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">¡Seré imbécil!, y en mi boca, con un tremendo esfuerzo, simulé una sonrisa.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Sólo necesito cinco minutos, de verdad, es una chorrada, te lo dije en el mensaje que si preferías te llamaba por teléfono - pero, ¿por qué es tan guapo?, y me derrite sólo con mirarme, volví a sonreír cual quinceañera y volví a mirarle directamente a esos ojos que casi me congelan.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Bueno, ¿quieres sentarte?, ¿O prefieres tomar algo?</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Vamos a tomar algo, mejor, ¿dónde quieres ir? - habíamos quedado en un centro comercial, así que era fácil elegir algún sitio, no muy íntimo para tomar algo, algo impersonal, una gran cadena de restauración por ejemplo. Mientras caminabamos, sin rumbo, por ahora, iba pensando cómo explicarle todo.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Vale, vamos aquí, hay una sanwitcheria aquí cerca. - dijo frío como el acero. (Brian bosworth, qué daño hiciste...)</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Nos acercamos, y vimos que no había ningún local que estuviese bien para sentarnos y charlar un rato.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Bueno, pues podemos ir al Subway - solté para romper el hielo. Después de más de dos semanas sin hablarnos, era duro y difícil poder empezar una conversación. - Y.. ¿Qué quieres tomar?</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- ¿Una cerveza, y tú? - me preguntó como si fuese una extraña, ausente, con la mirada perdida, y sin ningún tipo de interés en lo que iba a contestar. Como en esas primeras citas en las cuales quedas con alguien por Internet y después de haberos contado miles de intimidades por Whatsapp, qué hasta Lucía Lapiedra se quedaría perpleja; al encontrarte cara a cara, no tienes ni la menor idea qué decirle a la otra persona. Le miré otra vez, y pensé en cómo podía hacerme sentir tan pequeña después de todo este tiempo.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- No, yo prefiero café - me miró un poco extrañado, nunca rechazo una cerveza; pero no podía soltarle de repente todo, ni vomitarle porqué no podía tomar alcohol</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Toma, voy a coger sitio fuera - me soltó dos euros en la mano, como si fuese cualquier cosa, sin miramientos. Como sino me conociese de nada, me sentí como una completa extraña.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Me quedé sola, esperando a pedir, la camarera me miraba con pena, no sé si era por las ojeras que llevaba acarreando esos últimos días, o por la cara de desolación que se me estaba quedando al ver como empezaba a dirigir sus pasos hacia la puerta.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Yo ya tenía bastantes problemas en mi cabeza, y en mi vida, como para pensar que un nombre en un cuento fuese algo tan importante para una persona. Ahora mismo me importaba más si mañana me despertaría. En mi cabeza sólo había contradicciones, por una parte sentía ganas de abrazarle y echarme a llorar, y por otra parte, cogería la cerveza que estaba bebiendo y se la derramaría por la cabeza delante de toda aquella muchedumbre que paseaba por el centro comercial, ¡Ja!, que a gusto me hubiese quedado si lo hubiese hecho.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Es que, no sé, me ha cogido un poco por sorpresa. Y bueno, ¿qué tal estás? - y otra vez, esa frialdad, ¡premio al hombre de hierro!.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Pedí esa cerveza, de lata y con vaso de plástico y el café con hielo, también con vaso de plástico, y las saqué con resignación hacia la terraza. Si hubiese sido una película romántica de las antiguas, estaría lloviendo, y un coche pasaría justo a mi lado, haciendo que una ola de agua y suciedad; arroyase a mi persona, lógicamente acabaría con la máscara de pestañas corrida y llena de barro, el público miraría con pena y sentirían tal congoja en el corazón que apartarían la mirada.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Crucé la puerta, y saqué la mejor cara que tenía en la recámara, estaba pletórica. Me acerqué a la mesa que había elegido y puse esas bebidas tan sofisticadas en la mesa. Me lié un cigarro en silencio y lo encendí.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Bueno, como te dije, era una tontería, incluso te lo podía haber dicho por teléfono- se hizo un silencio entre los dos- pues, me han llamado de una editorial, una pequeña; no es gran cosa, se ve que les ha gustado un cuento que había escrito, me han dado, la oportunidad de mejorarlo; y bueno, como en ese cuento había parte de ti, y parte que habías escrito tú. Pues, te quería pedir permiso para poder reescribirlo, utilizar tu parte, si me lo permites.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Ah, bueno, - me miró perplejo, no sé si esperaba otro tipo de declaración - me tendrás que pagar derechos de autor - se acercó la cerveza a esos labios que me volvían loca, y bebió un sorbo.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Pues, como no quieras que te firme un papel de mi puño y letra, indicando que si algún día gano un euro una parte será tuya. - será irónico, gilipollas, ¿pero de qué va?, encima que tengo el detalle de decírselo.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- ¿Y cómo que se han puesto en contacto contigo?</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Pues - me volví a justificar - resulta que Alejandro, que como siempre, me lía, envió el cuento por e-mail a una editorial y le dijeron que les interesaba lo que escribía. Me mandaron un correo diciéndome que les interesaba, pero que necesitaban algo un poco más largo. Y bueno, es una editorial pequeña, sería en formato digital, nada importante, pero sería algo importante para mí.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Y si me dejas, publicaré parte de lo que escribiste, pero, tranquilo, que no me tienes que contestar hoy, tienes tiempo para pensártelo.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- No sé - otro silencio - pero, mi nombre no saldrá, ¿no?</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- No tranquilo, lógicamente cambiaría tu nombre y el del resto de los personajes, ese cuento era algo personal, y no pondría tu nombre. - ¿en serio? ¿era eso lo que le preocupaba? ¿su nombre?.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Pues, ... - a ver como le cuento lo demás - bien, muy bien, supongo qué como siempre, no he hecho gran cosa durante este tiempo, ya sabes. ¿y tú? se te ve cara de cansado.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Es que he tenido un día complicado, primer día de curro, ya sabes. He tenido que venir en metro.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Ah ¿y eso?, ¿no ibas a venir en moto? - fingí interés, cosa que él no había hecho en ningún momento.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Resulta que creía que me habían robado la moto,ya que no estaba aparcada dónde la dejé cuando me fui de vacaciones. Pero no sé que ha pasado, he llamado, y me han dicho que llamase al depósito para ver si la moto estaba allí. Se ve que tenían que podar la zona, o estaba tirada en el suelo, o yo que sé. Así que está en el depósito y tengo que ir a buscarla, ahora cuándo me vaya, supongo que me cobraran, o yo que sé puede que pusieran los carteles, pero claro, yo estaba de vacaciones y no los vi.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Ah. - esta vez, el silencio lo produje yo. Me importaba, más bien poco, que su moto estuviese en el depósito, pero, ¿qué clase de persona era?. Tal y cómo estaba yendo esta conversación, realmente sentía que estaba hablando con un completo extraño.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Tranquila, que ya me acabo esto - dijo mientras señalaba el vaso medio vacío de cerveza.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- No tengo prisa - volví a sonreír. Joder, si me hubiesen dado un euro por cada vez que sonreí aquel día falsamente me hubiese echo millonaria. A ver como le cuento todo lo que me pasa y por dónde empiezo.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Bueno, yo sí, cada hora son 0,75€ del depósito de la moto. - Sonrió haciendo una mueca.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Me sentí como una puta barata, eso es lo que yo valía, ni siquiera 0,75€ la hora. Se me encogió el estómago, y se me rompió en mil trocitos el poco corazón que me quedaba. Ya no valía la pena nada, el hombre de mi vida me había dicho que mi presencia le importaba un carajo y que mi vida también.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Nos levantamos de la mesa. Recogí los vasos y los llevé a la papelera del Subway, no soy de las que dejan las cosas en las mesas en los fast food. Me acompañó unos metros hasta el Tram. Justo estaba llegando un tranvía, cuando estaba reuniendo todo el valor para contarle todo. Me miró, se acercó a mí, me dio dos besos y me dejó allí tirada. Me abandonó, como se abandona a un perro en los anuncios de "Él nunca lo haría", o como diría el gran Sabina, como se abandonan a los zapatos viejos.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Entré en el maldito vagón y comencé a llorar desconsolada, cogí el teléfono como pude, rebusqué entre las mil porquerías que llevaba en el bolso el móvil de 5,5", que para ser casi una tablet, cuándo más lo necesitas, logra esconderse entre los Kleenex, y el monedero, Por fin, apareció entre el millón de cosas, siempre útiles, indispensables y los "por si acaso"que se esconden en ese agujero negro llamado "bolso", lo desbloqueé cómo pude y busqué las últimas llamadas:</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Alejandro, por favor, ven a buscarme - logré decir, mientras una abuela me miraba con cara de echarme unas monedillas por yonky con el mono a tope.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- ¡Lo sabía!, ¿dónde estás?, ¿no le has dicho nada verdad? joder, te dije que ...</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Por favor, no me regañes - le interrumpí - ni a una puta se le trata así, soy una mierda.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- No te muevas de donde estás, joder y en tu estado,- como si estuviese embarazada, no te fastidia - dime dónde estás exactamente, y voy para allá.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- No he podido, créeme, no es,... no es, ... es un mierdas - conseguí decir entre sollozos - estoy,... estoy, ... en la siguiente parada del Tram.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">- Voy, no te muevas, por favor no hagas nada, siéntate. ¡No seas cabezona!, no te menees que en dos segundos estoy allí. - y la llamada finalizó.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Esperé durante veinte minutos a que el coche azul pitufo apareciese delante de mí, seguía llorando como un niño al que se le cae la bola de su helado favorito, recién comprado y sin oportunidad de darle un lametón. Menudo numerito había montado en un momento; la gente de mi alrededor me miraba como si estuviese loca, y una señora llegó incluso a intentar consolarme diciéndome que para todo hay solución menos para la muerte. ¡Ole señora! Acaba de alegrarme el día.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Me subí al coche como una zombie de las películas antiguas, de las buenas, lentamente y en blanco y negro. Me quería morir, aunque tampoco estaba para elegir, la señora de la guadaña ya había dejado una nota de aviso en mi buzón.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Ale, que era como le llamábamos en nuestro círculo, me miró con cara de pocos amigos, esa cara que ponía en plan mama de "te vas a cagar cuándo llegues a casa".</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Alejandro es mi mejor amigo, ese amigo <i>gayer</i>, que toda mujer debe tener en su vida. Ese amigo que desde la infancia prometió amistad eterna y que te lleva de compras cuándo estás mal, aunque sea él el que se compra ropa; ese que nunca te falla en los peores momentos, el que te quiere tal y cómo eres: en lo bueno y en lo bruja que puedes llegar a ser. Sus pintas dejaban mucho que desear, pero desde la adolescencia ha sido siempre igual, esa ropa que tanto marcaba su propio sytle. Odiaba sus camisas hawianas y las de cuadros, esos tobillos enclenques que se dejaban entrever entre el puño recogido de los pantalones y esos zapatos extraños, en cambio, adoraba esas pajaritas con estampados estúpidos que siempre me sacaban una sonrisa.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Y él era al único al que le había contado lo que me sucedía. Me habían llamado hacía tres semanas, tenía cáncer, no se lo había dicho ni a mi familia. Pensaréis que soy gilipollas, pero mi situación era la leche.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Hacia menos de un año que mi tío había muerto de cáncer, y había sido un trago muy duro para todos, mi padre iba al psiquiatra cada semana porque no había podido superar aquello y toda mi familia había evitado hablar de ello, como si ocultándolo no hubiese pasado.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Mi madre había pasado por un cáncer de útero y de mama hacía varios años; y aquello nos destrozó, pero como siempre, de la "cosa mala" no se habla.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Mi tía había pasado también hace años por un cáncer de mama y le habían extirpado un pecho. Y el padre de mi padre (no puedo llamarle abuelo, pero esta es otra historia) murió de cáncer de colon. Vamos que mi familia es el historial de cáncer por antonomasia. Y para historias alegres añadiré que mi mejor amigo murió de cáncer cuando apenas teníamos 20 años.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Así que mi futuro con la "cosa mala" no es que fuese esperanzador.</span></div>
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