lunes, 19 de junio de 2017

Presagios


El alma tenias
tan clara y abierta,
que yo nunca pude
entrarme en tu alma.
Busqué los atajos
angostos, los pasos
altos y difíciles...
A tu alma se iba
por caminos anchos.
Preparé alta escala
—soñaba altos muros
guardándote el alma—
pero el alma tuya
estaba sin guarda
de tapial ni cerca.
Te busqué la puerta
estrecha del alma,
pero no tenía,
de franca que era,
entradas tu alma.
¿En dónde empezaba?
¿Acababa, en dónde?
Me quedé por siempre
sentado en las vagas
lindes de tu alma.
(Pedro Salinas)



Me levanté, otra mañana, como si de repente me diese cuenta que cada día es regalado, cómo si todo hubiese cambiado. Sí, en mi mente, la sensación era de que era un día que no me merecía, que no lo hubiese luchado.
Lo miré y sonreí, sus manos acariciaban mi pelo mientras veíamos una serie chorra de TV3 en su móvil, no sonreía porque algo me hubiese hecho gracia, la realidad era que sonreía porque Él estaba en ese momento, sin pedírselo, por vivir esos momentos con Él ¿cuánto me quedaba?, ¿cuánto tiempo iba a disfrutar de su compañía? mi cabeza iba a mil por hora.
- ¿En qué piensas?
- En nada, ya sabes, ...,  cabeza hueca, no pienso  - pues claro que pensaba, pensaba en que se aburriría, en que no era su "chica ideal" en qué el tiempo iba en mi contra pero no iba a contárselo, nunca - Estoy bien.
- Va Sarah dime qué piensas
- De verdad, no pienso en nada, estoy con la mente en blanco - porsupuesto que no, había pasado por esto antes en mi familia, había vivido esa sensación de no pensar en lo malo e intentar disfrutar del momenti.
- Si no me lo quieres contar, tú misma.

Y ahí se acabó nuestra conversación. Ojalá le hubiese podido decir que no podía con mi alma, que el cansancio me estaba comiendo, que de repente , me encontraba en una situación que no había pedido, que mi vida pendía de un hilo, que necesitaba de Él cada vez más, que quería quedarme a su lado, pero no, simplemente sonreí, me guardé toda mi mi mierda para mi, no se merecía sufrir más. ¿porqué tenía que pasar por esto? no quería que de repente se encontrase con una moribunda, ¿ qué clase de vida le iba a dar en un futuro? callé y lloré por dentro. Sabía que no iba a durar mucho mi "estado de bienestar" para qué iba  preocupar a nadie, para que iba a prescindir de un amor verdadero, sólo iba a darle pena. Y el tiempo me iba a demostrar que así sería, que la vida es una hija de puta y no me iba a dar tregua alguna. Ya sabes que va a ser así, disfruta del puñetero momento y deja de darle vueltas a esa neurona que a veces le da por funcionar. Mi negra del Bronx a veces reaccionaba, aunque últimamente parecía que se apagase como yo, parecía la TV de la película de Poltergeist, funcionando cuando le daba la gana.

Me daba cuenta que poco a poco todo se iba acabar, incluida mi vida, pero ¿porqué no iba a disfrutarlo? ¿porqué no iba a quererlo?, ¿porqué tenía que morir sin saber lo que era querer a  alguien incondicionalmente? .
Sé que en el fondo Él sabía que se aburriría yo no iba a ser la mujer que estuviese a su lado, no iba a ser nadie. Esa sonata se repetía cada día en mi cabeza, ¿y qué? en ese momento no me importaba.

En ese instante sólo me importaba sentir, y vivir, ¿ y si no lo iba a vivir nunca más? ¿y si el mundo, para mi, se acabase hoy? Al menos he vivido el hecho de haberle estrechado entre mis brazos, haberle amado, haberle sentido, sentir ese silencio en el que de repente todo se detiene y sólo estábamos Él y yo.
- Diiiime - parecía cansado de esperar una respuesta.
- De verdad, estoy bien. - me di cuenta que no sonaba tan bien como yo quería, pero no importaba. Los últimos días yo ya había llorado mi muerte en demasiadas ocasiones, todas ellas sóla y dándole demasiadas vueltas a todo. Me había preguntado mil veces qué quería de mí, pero la respuesta era siempre la misma, y eso no me aliviaba.
- ¿Porque sigues callada y no me dices nada?
- Porque te quiero - me salió del alma, porque lo más gracioso es, que no he querido a nadie como le he querido, porque darte cuenta de que te estás muriendo y que la persona que amas sabes que no te va a corresponder, es indescriptible, es como si cada día fueses al cementerio y cavases tu propio hoyo. 
Siempre he querido verle en su vida perfecta, desde la lejanía, desde la nada, y saber que serví de algo en su vida, Que esa mujer de postín, no le cambiaría, y que Él tendrá derecho a pensar y opinar y no llevar una vida llena de convencionalismos.
Me la he imaginado tantas veces abriendo la nevera y preguntándole qué querrá cenar, arropándole por las noches, besándolo con amor, planeando una vida juntos, y será del agrado de todos los que le rodean. Y juro que no es por masoquismo, aunque a veces me lo llegue hasta plantear yo misma, aún así, aunque le desee lo mejor, se me parte el alma, y jamás he podido soportar pensar en alguien acariciando su piel cómo yo lo hacía, Imaginar que otra me sustituiría en breve me minaba la moral. 

Sí yo era efímera, y a veces en esas introspecciones a mi interior, me daba cuenta que a veces deseaba tener una vida cómo los demás. Pero mi reloj había tomado la iniciativa y el segundero iba más rápido de lo normal. Tic-tac el tiempo corre y tu sólo piensas en gilipollces y sólo piensas en que te vas a morirte, pues sí como todos, aunque tu quizás un poco más rápido. Piensa en tu lista y empieza a hacer cosas. Mi negra volvía a estar en mi mente.

Me despedí de Él con un abrazo eterno y un beso tímido en sus labios.
- Nos vemos pronto - dijo sin mucho ímpetu
- Si claro, nos vemos en un par de días - sonreí cómo pude, notaba como mi cuerpo desfallecía por momentos.

Cogí el móvil y escribí a Ale.
-Tenemos que hablar
  Estoy muy cansada
  Necesito día de relax y mimos
  Pleaseeeeee

Ale no tardó en contestar:
-Claro que sí princess
 Estas bien?
 Ya habéis vuelto a discutir?

- Noooo de verdad
  Es que estoy cansada en serio
  Estas sesiones están acabando conmigo

- Por cierto Fabio te ha escrito?

- No, por?

- Pues tenemos que hablar quizás he metido la pata

- Como?
  Que dices ahora?

- Quizás se me haya escapado un poco que has estado en el hospital
  Tranqui que no le he dicho nada de lo de la radio
  Pero sí que estabas en el Hospital

- Ale ya hablamos
  Ya te vale
  Joder, es que no puedes tener la boca cerrada

- Luego te llamo 
  Estarás encendida en llamas como el Sinsajo

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